El Gobierno acelera la liberalizaci¨®n econ¨®mica
Las fusiones necesitar¨¢n autorizaci¨®n previa y se pone freno a los oligopolios de la energ¨ªa
El Consejo de Ministros aprob¨® ayer su "voluminoso" paquete de medidas "para consolidar el crecimiento y la creaci¨®n de empleo", seg¨²n lo defini¨® ayer el vicepresidente segundo y ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato. No se trata de medidas de choque contra la inflaci¨®n, como las adoptadas el pasado a?o, sino de "hacer un traje m¨¢s grande para la econom¨ªa espa?ola".El abanico es muy amplio. Abarca desde el comercio hasta los impuestos, los libros de texto, las farmacias o los notarios, pero donde verdaderamente se pone el acento es en los grandes oligopolios del sector de la energ¨ªa y en lo que queda de telecomunicaciones. Se ha dejado pr¨¢cticamente la reforma para abaratar el suelo.
Rato dio ayer dos claves que explican el dise?o final de estas medidas que calific¨® de "rupturistas". Se han mantenido contactos con todos los sectores afectados y el Gobierno "ha tenido en cuenta los intereses corporativos, pero nunca ha respondido a ellos". Se va a exigir a las empresas, a?adi¨®, "una demostraci¨®n de eficacia" y que compartan "que una mayor competencia es necesaria para la econom¨ªa espa?ola".
En especial, en lo que respecta a los "vestigios aut¨¢rquicos" que, seg¨²n Rato, todav¨ªa perviven como consecuencia de "la forma en que se realizaron las privatizaciones durante la anterior etapa"; es decir, en la ¨¦poca socialista. Las resistencias han sido fuertes, como antes lo eran las de los socios nacionalistas catalanes del Gobierno, y en alg¨²n aspecto han conseguido parar o atemperar las primeras intenciones del Gobierno.
Por ejemplo, en la tarifa el¨¦ctrica para los consumidores dom¨¦sticos. En principio se estudi¨® una rebaja inmediata, pero finalmente se ha decidido aplicar, como m¨¢ximo, una del 9% en tres a?os, a partir de 2001 y a un ritmo no necesariamente uniforme. De hecho, esta rebaja es algo inferior a la que se ha producido en los ¨²ltimos a?os, si bien es cierto que las posibilidades de recorte son cada vez menores.
Esta decisi¨®n expresa otra de las l¨ªneas maestras del plan aprobado ayer. No se busca bajar la inflaci¨®n a golpe de rebajas de las tarifas a¨²n reguladas -electricidad, gas y llamadas locales- sino abrir la competencia con reformas estructurales de fondo. La inflaci¨®n est¨¢ ahora en el 3,2% (seg¨²n criterios armonizados para toda la UE), muy lejos de los dem¨¢s socios del euro y del l¨ªmite del 2% fijado por el Banco Central Europeo (BCE).
Pero la prioridad del Gobierno es, seg¨²n insisti¨® ayer Rato, afianzar el crecimiento econ¨®mico. En la actualidad, explic¨®, "la econom¨ªa crece por encima de la media europea y crea m¨¢s empleo, y de lo que se trata es de mantener esta situaci¨®n". Si para ello la inflaci¨®n tiene que ser un poco m¨¢s alta -no tanto como ahora-, la opci¨®n del Gobierno est¨¢ clara.
Los actuales cuellos de botella de la econom¨ªa espa?ola son una traba a ese desarrollo y suponen, adem¨¢s, un foco de inflaci¨®n. De forma muy clara en el sector de las gasolinas, donde el espectacular aumento de los precios del petr¨®leo ha repercutido mucho m¨¢s a los consumidores espa?oles que a los europeos.
El Gobierno ha descartado volver al sistema de precios m¨¢ximos, como propon¨ªa el PSOE, pero limita entre tres y cinco a?os el desarrollo de las empresas que controlan el sector (Repsol y Cepsa). Lo mismo hace en el sector el¨¦ctrico (Endesa e Iberdrola) y a medio plazo, se rompe el monopolio del gas (Enagas).
Hay, adem¨¢s, medidas para limitar las concentraciones de empresas en los sectores de electricidad, hidrocarburos y telefon¨ªa, para salvaguardar la competencia. Por ejemplo, se establece que un mismo accionista no podr¨¢ tener representaci¨®n en el consejo de administraci¨®n de m¨¢s de un operador.
L¨ªmite del 3%
Adem¨¢s, si su participaci¨®n supera el 3% en dos o m¨¢s operadores, no podr¨¢ ejercer los derechos de voto correspondientes al exceso en ese porcentaje en uno de ellos, ni nombrar consejeros. De hecho, ¨¦stos han sido los criterios que el Gobierno ha aplicado a las dos grandes fusiones bancarias recientes, la del BBVA y la del BSCH, y en el acuerdo del BBVA con Telef¨®nica.
Pero ahora estos criterios adquieren rango legal, a lo que se a?ade que las operaciones de concentraci¨®n en cualquier sector quedar¨¢n en suspenso hasta que el Gobierno d¨¦ su veredicto. El Tribunal de Defensa de la Competencia deber¨¢ emitir un dictamen en dos meses (antes tres) y el Gobierno trendr¨¢ un mes (antes tres) para pronunciarse.
En horarios comerciales, sin embargo, la reforma no ha sido tan amplia como en principio quer¨ªa Rato, debido a las resistencias de las comunidades aut¨®nomas. Tampoco las reformas en el sector del suelo pasan de ser un cat¨¢logo de buenas intenciones, en este caso, por las presiones de los ayuntamientos.
Igualmente, se ha descartado que los pensionistas paguen parte de las medicinas, por la impopularidad de la medida. El Ministerio de Sanidad, sin embargo, trabaja en un nuevo sistema que tendr¨¢ en cuenta el nivel de renta para modular el copago. Se modifican los m¨¢rgenes de las farmacias con un ahorro estimado de 40.000 millones de pesetas.
En los impuestos, las reformas van encaminadas al fomento del ahorro privado, si bien las presiones de los grandes bancos y las aseguradoras han hecho al Gobierno desistir de la idea de que el cambio de fondo de inversi¨®n no tribute. Mejora el tratamiento fiscal de los seguros y de los fondos de inversi¨®n. Otras medidas consisten en que los notarios podr¨¢n hacer un descuento del 10% en sus aranceles que se liberalizan en operaciones a partir de 1.000 millones de pesetas. Los aranceles de los registradores se reducen un 5%.
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