Los editores de libros escolares anuncian un recurso y los libreros piden la dimisi¨®n de Rodrigo Rato

"Los libreros o distribuidores minoristas podr¨¢n hacer el descuento que deseen en los libros de texto sobre el precio de venta al p¨²blico, frente al tope actual del 12%". El escueto comunicado del Gobierno desat¨® ayer las iras de libreros y editores de libros de texto.La medida, seg¨²n el sector del libro, beneficia a las grandes superficies y provocar¨¢ el cierre de numerosas librer¨ªas. Editores y libreros opinan que el descuento libre es la peor medida que se pod¨ªa aprobar y hubieran preferido la libertad de precios. La diferencia es que con el precio libre todos competir¨ªan en igualdad de condiciones y no se podr¨ªan abaratar los libros por debajo del precio de coste, como dice la Ley del Comercio Minorista. Pero con el libre descuento, las grandes superficies pueden regalar libros a sus clientes, algo que no pueden hacer las librer¨ªas, que viven s¨®lo de este producto.

A la espera del texto exacto del decreto ley que, seg¨²n el presidente del Gremio de Editores de Madrid, Fernando Valverde, ayer por la tarde ni siquiera ten¨ªa el director general del Libro, Fernando de Lanzas, han empezado a tomar posiciones. La Asociaci¨®n Nacional de Editores de Libros y Material de Ense?anza (ANELE) recurrir¨¢ la medida "ante todas las instancias jur¨ªdicas, al Tribunal Constitucional y a Estrasburgo si es necesario, porque es ilegal y atenta contra todas las leyes de la competencia. Se ampara desde el Gobierno la venta con p¨¦rdidas, algo que no tiene precedentes en ning¨²n pa¨ªs de nuestro entorno", seg¨²n el presidente de ANELE, Mauricio Santos.

La Confederaci¨®n de Gremios y Asociaciones de Libreros (CEGAL) calific¨® la medida de "fascista y olig¨¢rquica" y pidi¨® la dimisi¨®n de Rodrigo Rato "por su desconocimiento absoluto del funcionamiento del sector del libro y de las industrias culturales, por su talante prepotente e impositivo nada proclive al di¨¢logo democr¨¢tico".

Los libreros arremeterieron contra las grandes superficies. Es "un pago de servicios prestados a empresas de capital extranjero que aprovechan la debilidad del Gobierno para imponer pr¨¢cticas que no pueden realizar en el resto de Europa". CEGAL calcula que unas 1.500 librer¨ªas pueden cerrar. "Para las peque?as librer¨ªas y papeler¨ªas, la venta de los libros de texto significa entre el 30% y el 35% de su facturaci¨®n. Es la muerte por decreto", dijo Valverde.