Un 14% de los adolescentes ha probado '¨¦xtasis', 'speed' u otras drogas de s¨ªntesis
Un 14% de los adolescentes madrile?os ha probado alguna vez las drogas de s¨ªntesis (¨¦xtasis, speed...), seg¨²n una encuesta realizada a 3.000 j¨®venes de 14 a 19 a?os por la Agencia Antidroga y el Instituto de Salud Carlos III. Entre los chicos sin escolarizar asciende al 26% los que han consumido estas sustancias. El gerente de la Agencia, Jos¨¦ Cabrera, califica estos datos de "preocupantes, pero no alarmantes". Indica que estos niveles de consumo son similares a los del resto de pa¨ªses mediterr¨¢neos e inferiores a los del norte de Europa.
Consumo en fiestas
Cabrera alert¨® ayer, durante la presentaci¨®n de los resultados de la encuesta, sobre los riesgos que entra?an estos derivados anfetam¨ªnicos, a menudo sintetizados en precarios laboratorios clandestinos por personas que saben poco de qu¨ªmica. "Estas sustancias pueden matar, porque ya lo han hecho", asegur¨®, refiri¨¦ndose a que, desde 1993, en Espa?a han fallecido siete personas, tres de ellas en Madrid, y alert¨® acerca de "la falta de conciencia sobre los riesgos de estas sustancias". "Estas drogas pueden causar da?o a largo plazo en el sistema nervioso central y precipitar trastornos mentales en personas que los ten¨ªan latentes. Uno de los problemas es que el consumidor no sabe qu¨¦ principios activos contiene esa pastillita de colores que se ha tomado; es como una ruleta rusa", a?ade.
Sin embargo, seg¨²n el gerente de la Agencia, el consumo de estas drogas de dise?o est¨¢ estabilizado en la regi¨®n. "Tuvo un crecimiento exponencial hasta principios de los a?os noventa, despu¨¦s se estabiliz¨® gracias a las campa?as preventivas, m¨¢s tarde baj¨® y se ha vuelto a estabilizar. Sin embargo, todos los veranos repunta, sobre todo porque turistas procedentes del norte de Europa introducen nuevas f¨®rmulas", apostilla.
Fernando Villar, jefe de estudios de programas de salud del Instituto de Salud Carlos III del Ministerio de Sanidad, explic¨® que con el estudio se pretende conocer las situaciones de riesgo para intervenir a tiempo. "Se ve necesario actuar en la escuela y en el ocio y tiempo libre de los j¨®venes", asegur¨®.
La desescolarizaci¨®n es uno de esos factores de riesgo, ya que, seg¨²n el estudio, el porcentaje de los chicos que han probado alguna vez estas sustancias se duplica entre los que han dejado sus estudios (por absentismo o porque, acabada la fase obligatoria, no han continuado). De los 3.000 chavales encuestados, 2.100 estaban escolarizados, y 900, no.
Entre los chicos que han consumido drogas de s¨ªntesis, el 33% lo hace "para divertirse"; el 20%, "para olvidar problemas", y un 13%, "para sentirse mejor". Tres de cada 10 adquieren las pastillas en discotecas; un 25%, en la calle, y otro 20%, a trav¨¦s de los amigos. Para los autores del estudio resulta preocupante que un 10% adquiera estas sustancias en su centro de estudios. La mayor parte se han iniciado en el consumo con sus amigos (un 88%).
La mayor¨ªa de los chicos toma estas p¨ªldoras, conocidas en la calle con nombres como stardust, mitsubishis, piolines o teletubbies, en fiestas o en la discoteca durante el fin de semana. El ¨¦xtasis y el speed son los derivados anfetam¨ªnicos m¨¢s demandados.El ¨¦xtasis o MDMA (metildioximetanfetamina) es un derivado de las anfetaminas que se empez¨® a utilizar en 1912 como supresor del apetito y resurgi¨® como droga de diversi¨®n a mediados de los ochenta. Provoca euforia y ganas de relacionarse. Suele venderse mezclado con cafe¨ªna. El speed se hizo popular en los sesenta y provoca gran movilidad y agitaci¨®n. Estas sustancias permiten bailar y estar de marcha durante horas sin sentir cansancio, hambre o sed. Para evitar la deshidrataci¨®n o golpe de calor, sus consumidores beben mucha agua. Por eso, en discotecas donde se toman estas anfetaminas, es frecuente la venta de gran cantidad de agua embotellada, a precios abusivos.
El 85% de los chicos encuestados cree que estas sustancias provocan adicci¨®n, aunque ese porcentaje baja al 73 entre quienes las consumen. Cuando se les pregunta sobre los principales efectos de estas drogas destacan "alucinaciones, euforia y cambios de humor".
El 69% considera que la persona que toma estas sustancias de dise?o no es un drogadicto. La respuesta de quienes las consumen es m¨¢s contundente: el 72% no se cree toxic¨®mano. M¨¢s del 60% de los j¨®venes encuestados conoce a alg¨²n consumidor.
A m¨¢s de la mitad de los j¨®venes les han ofrecido alguna vez estas sustancias, la mayor parte de las veces de forma gratuita, sobre todo a las chicas, quiz¨¢ por la idea de que estas drogas favorecen las relaciones sexuales. De hecho, una de ellas es conocida como "la p¨ªldora del amor".
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