Los consumidores piden al G-8 una moratoria de transg¨¦nicos

Rechazo en Espa?a

Dos grandes grupos de consumidores urgieron ayer al G-8 (pa¨ªses m¨¢s industrializados, Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Italia, Alemania, Jap¨®n, Canad¨¢ y Rusia) para que adopte una moratoria sobre cultivos y alimentos transg¨¦nicos, en vista de la preocupaci¨®n internacional por los supuestos efectos de esa tecnolog¨ªa en la salud y el medio ambiente."Estamos gravemente preocupados por el desarrollo de la ingenier¨ªa gen¨¦tica del arroz, el principal cultivo estable para muchos pa¨ªses de Asia, y por la reciente aprobaci¨®n por parte del Gobierno japon¨¦s de plantaciones de arroz transg¨¦nico", dice el comunicado de la asociaci¨®n estadounidense Organic Consumers y la brit¨¢nica Genetic Snowball al G-8, en cuya reuni¨®n en la ciudad japonesa de Okinawa participan tambi¨¦n Filipinas, Malaisia, Corea del Sur y Australia.

La divisi¨®n sobre el asunto de los transg¨¦nicos entre los pa¨ªses reunidos es patente. Estados Unidos, el principal productor de esa tecnolog¨ªa, presiona para que otros gobiernos se abran a sus importaciones de alimentos gen¨¦ticamente modificados. Pero Europa y Jap¨®n, tradicionalmente proteccionistas de su agricultura, son reticentes ante Washington por los posibles riesgos para la salud y por las presiones de las asociaciones de consumidores.

Por otra parte, en Espa?a, Ecologistas en Acci¨®n denunci¨® ayer que la intenci¨®n de la Comisi¨®n Europea de levantar la moratoria de facto que actualmente pesa sobre los transg¨¦nicos es "una aceptaci¨®n sin matices de los intereses de las multinacionales".En una nota, Ecologistas en Acci¨®n destaca que la comisaria europea de Medio Ambiente, la sueca Margot Wallstr?m, "no se ha recatado en aparecer como testaferro de la industria biotecnol¨®gica y ha hecho todo lo posible para levantar la moratoria, amenazando directamente a los pa¨ªses que, como Austria, Luxemburgo, Francia, Alemania, Grecia o Portugal, proh¨ªben la comercializaci¨®n de semillas transg¨¦nicas".

La organizaci¨®n critica la decisi¨®n de los comisarios europeos de Medio Ambiente y de Protecci¨®n al Consumidor de "pretender forzar" un cambio en la pol¨ªtica de protecci¨®n ante los nuevos alimentos transg¨¦nicos.

"Basta leer con atenci¨®n sus propias declaraciones para comprobar que Wallstr?m y Byrne son dos sinverg¨¹enzas que parecen actuar a sueldo de las multinacionales", afirma Diego Herranz, portavoz de la organizaci¨®n ecologista. "Por ejemplo: no es de recibo afirmar que por que se etiqueten los alimentos que contienen m¨¢s de un 1% de cualquier ingrediente transg¨¦nico se garantiza la plena protecci¨®n de la salud de los consumidores", a?ade al concluir: " Ning¨²n estudio permite concluir que por debajo de ese umbral los transg¨¦nicos sean completamente inofensivos. Nos quieren enga?ar como ya lo hicieron otras autoridades cuando insist¨ªan en que no hab¨ªa porqu¨¦ preocuparse por el mal de las vacas locas".