Aprender con los mejores

La cantante de jazz Sheila Jordan imparte su magisterio en un aula de la planta baja de Villa Munda, sede de la Escuela de M¨²sica de Zarautz. "Alarga un poco m¨¢s ese final", dice a una alumna que se ha prestado a examinar su voz ante la maestra. Sin levantarse de la silla, Jordan cambia levemente de rostro e interpreta el final de Lover man, una pieza escrita por Jimmy Davis, Ram y Sherman. No hay un ¨¢pice de soberbia en sus maneras, s¨®lo buenas intenciones.Figuras de su talla han hecho un hueco en sus agendas para compartir sus experiencias musicales con los 182 alumnos que han participado durante toda esta semana en el I Seminario Internacional de Jazz y de Bandas Sonoras de Zarautz. El Ayuntamiento, con la colaboraci¨®n t¨¦cnica de Taller de M¨²sics de Barcelona, ha logrado lo que en principio se antojaba imposible: que estrellas como el pianista Kenny Barron, que recibi¨® el Premio Donostia en el reci¨¦n clausurado Festival de Jazz donostiarra, se hayan prestado a encabezar el plantel de profesores de esta singular universidad musical de verano. Y, adem¨¢s, con sumo placer.

La propia Jordan lo reconoc¨ªa minutos antes de meterse en el aula. "Si hay algo que he aprendido a lo largo de mi carrera musical es que no hay nada m¨¢s bonito que compartir. Y para eso estoy aqu¨ª; para trasladar mis conocimientos y experiencias a la gente joven y para transmitirles que el jazz no entiende de dinero, que es una m¨²sica que llega directamente al coraz¨®n".

La cantante no habla en vano, practica con el ejemplo y aconseja a las alumnas que se han inscrito en el curso de voz. Ana Valdeneo, de 23 a?os, se ha desplazado desde Barcelona para asistir a sus clases magistrales. Lleva diez a?os dedic¨¢ndose a perfeccionar su t¨¦cnica vocal que ejercita en un grupo femenino que canta a capella y ahora estudia en el Taller de Musics de Barcelona. El curso le sirve como complemento a su carrera."Estoy aprendiendo mucho", dice. "Sheila es muy divertida y tiene una gran experiencia que no est¨¢ sirviendo a todos".

En todo caso, el seminario le sabe a poco. "Una semana", observa, "es muy poco tiempo. Sirve sobre todo para montarte tu propio repertorio y que te aconsejen". Como ella, otros j¨®venes se han inscrito en este seminario te¨®rico-pr¨¢ctico que ofrece la posibilidad de estudiar trompeta con Tim Hagans; saxo con Perico Sambeat, bater¨ªa con Marc Miralta, guitarra con Kurt Rosenwinkel o piano.

Precisamente, la responsabilidad de esta asignatura ha reca¨ªdo en uno de los m¨²sicos vascos m¨¢s consagrados; I?aki Salvador, ganador del I Premio Tete Montoliu. El pianista est¨¢ sorprendido por el ¨¦xito que ha alcanzado esta iniciativa en su primera edici¨®n. "Se han desbordado todas las previsiones", apunta. "Lo m¨¢s bonito es que hay mucha energ¨ªa, que ha venido gente con muchas ganas, lo que ocurre es que al haber tantos alumnos tambi¨¦n hay diversidad de niveles". Uno de sus disc¨ªpulos, Sergi Sirvent, un catal¨¢n de 22 a?os, se queja de que la "falta infraestructruras" del seminario. "Creo", dice, "que han admitido a demasiados alumnos y la organizaci¨®n es bastante ca¨®tica. De todas formas, siendo el primer a?o, ya me lo esperaba".

El seminario se abre tanto a profesionales como a aficionados. Dice Salvador que "por una imposici¨®n de la realidad. Como ocurre en todas las m¨²sicas minoritarias, hay un sector importante de gente que tiene una gran competencia pero no una dedicaci¨®n profesional porque no se lo puede permitir".

Esta iniciativa, con vocaci¨®n de continuidad, no servir¨¢ para convertir en popular una disciplina minoritaria. Al menos ese es el sentir generalizado. Pero Salvador siente "que puede ser un paso m¨¢s para que el jazz salga del gueto en el que se ha movido siempre y pase a formar parte de lo cotidiano". De hecho el seminario, que concluye ma?ana, ha servido para eso. El jazz ha estado presente en la calle a trav¨¦s de conciertos de grupos y m¨²sicos de jazz como Mikel Andueza Quartet, Jazzaleak Big Band, Javier Garayalde, o las jam sessions ofrecidas por los propios alumnos y profesores.