Ruiz-Gallard¨®n da por zanjada la batalla con el alcalde

Hay guerras de verano. Y batallas que se pierden por un caballo mal herrado. O eso dicen. Y escaramuzas que s¨®lo existen en los papeles. En la disputa de la semana pasada entre Comunidad y Ayuntamiento a cuenta del plan urban¨ªstico especial para la construcci¨®n de nuevos hoteles, la batalla ha terminado casi antes de empezar. Hubo grandes fuegos de artiller¨ªa y, afortunadamente, pocas bajas. Ni siquiera ha habido v¨ªctimas por fuego amigo. Que siempre suele ocurrir. A lo mejor, es que no hay batalla. Ni guerra. Porque, si alguna vez la hubo, el presidente de la Comunidad, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, la ha dado ya por cerrada. O, por lo menos, y, apurando un poco, por casi inexistente. Tras el ¨²ltimo Consejo de Gobierno antes de iniciar sus vacaciones, el presidente habl¨® ayer de esta contienda que aparentemente no fue tal. Lo hac¨ªa por primera, y parece que por ¨²ltima vez.

Lo dijo. Dijo que estaba satisfecho. Que ten¨ªa que decirlo. Y dijo que el alcalde de Madrid, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, hab¨ªa recibido la preocupaci¨®n del Gobierno de Madrid con inter¨¦s y, por ese inter¨¦s, hab¨ªa rectificado en sus primeras intenciones y hab¨ªa excluido el suelo industrial de sus planes para la construcci¨®n de plazas hoteleras. Todos contentos.

?Cu¨¢l era la preocupaci¨®n del Ejecutivo regional? Tambi¨¦n lo dijo. Dijo que la posibilidad de modificar el uso de suelo industrial para edificar hoteles pod¨ªa tener "un efecto preverso", "favorecer la especulaci¨®n" y "destruir empleo". Ruiz-Gallard¨®n dijo que tantas facilidades pod¨ªan llevar a algunos empresarios a cerrar sus empresas, sus f¨¢bricas y talleres, y ofrecer esos terrenos a empresarios hoteleros. Un chollo que el Ejecutivo regional no deb¨ªa favorecer, y mucho menos animar.

El presidente cont¨® que le comunic¨® a ?lvarez del Manzano sus temores. Y que, como no pod¨ªa ser menos, el alcalde entendi¨® sus preocupaciones y acept¨® retirar el suelo industrial de sus planes. Todos contentos. Ruiz-Gallard¨®n, por lo menos. As¨ª que aqu¨ª paz y despu¨¦s gloria.

Pero es una paz vigilada, casi una tregua. A pesar de la satisfacci¨®n del presidente, la Comunidad, a trav¨¦s de la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, llevar¨¢ al Ayuntamiento a los tribunales. Ruiz- Gallard¨®n insisti¨® ayer en que deben ser los jueces quienes decidan qui¨¦n tiene raz¨®n en una disputa que, seg¨²n sus palabras, es ya de tono menor. Porque una cosa es una cosa, y otra, otra. La satisfacci¨®n de que el suelo industrial se quede ah¨ª no quita para que a¨²n haya alguna diferencia entre Ayuntamiento y Comunidad. Son lo que defini¨® como discrepancias jur¨ªdicas: cu¨¢l de esas dos instituciones es la competente para decidir este tipo de cambio de uso del suelo urbano.

Pero "lo verdaderamente importante es que se ha retirado la posibilidad de que se recalifique suelo industrial", afirm¨® Ruiz-Gallard¨®n. Lo de los hoteles, a lo mejor era una excusa. Hoteles, seg¨²n dijo, hacen falta. El problema es el precio.