El ex gerente de Amappace niega las acusaciones de abusos sexuales e implica a otros trabajadores
El ex gerente de la Asociaci¨®n Malague?a de Padres de Paral¨ªticos Cerebrales (Amappace), Jos¨¦ Colomina Llorens, defiende su inocencia frente a las denuncias por abusos sexuales reiterados contra dos j¨®venes paral¨ªticos cerebrales -una chica de 20 a?os y un menor-, y atribuye a otros trabajadores de la residencia que la asociaci¨®n posee en M¨¢laga la pertenencia de las pruebas halladas en su despacho. Colomina, en prisi¨®n preventiva por esta causa desde el 9 de junio, ha solicitado en dos ocasiones la libertad, que le ha sido denegada. Ahora su defensa tendr¨¢ que recurrir ante la Audiencia.
Sumario
El ex gerente de Amappace defendi¨® su inocencia en la declaraci¨®n ante el juez; neg¨® las acusaciones de abusos sexuales y atribuy¨® a otros trabajadores de la residencia la pertenencia de las pruebas que fueron halladas en su despacho guardadas bajo llave. Seg¨²n Colomina, el disquete de ordenador con im¨¢genes pornogr¨¢ficas pertenec¨ªa al conserje de la residencia, y el preservativo, dijo, se lo hab¨ªa requisado a un trabajador al que hab¨ªa abierto expediente.Estos objetos, adem¨¢s de un tubo de vaselina que el ex gerente dijo utilizar para combatir la sequedad que el tabaco le provocaba en las fosas nasales, fueron hallados por la Polic¨ªa Judicial Auton¨®mica en el registro que se llev¨® a cabo en su despacho de la residencia el d¨ªa de su detenci¨®n. El lugar donde se hallaba cada una de las pruebas fue indicado por la propia joven que interpuso la primera denuncia.
Otras denuncias
Todos estos datos figuran en el sumario del caso, al que ha podido tener acceso este peri¨®dico despu¨¦s de que la juez titular de Instrucci¨®n 1 levantase el secreto. Tambi¨¦n figura la declaraci¨®n de la joven denunciante, que asegura que Colomina viene abusando sexualmente de ella aproximadamente desde que ten¨ªa ocho a?os.La joven tetrapl¨¦jica, que desvel¨® los abusos a los que presuntamente ha sido sometida a sus compa?eras del Instituto de Secundaria donde estudiaba -de hecho, fueron las propias compa?eras las que pusieron los hechos en conocimiento de la polic¨ªa-, asegura que el ex gerente sol¨ªa desnudarla y, coloc¨¢ndola sobre la mesa de su despacho o en una colchoneta, la somet¨ªa a tocamientos y penetraciones orales y le mostraba im¨¢genes de car¨¢cter pornogr¨¢fico.
La joven denunciante declar¨® tambi¨¦n que la frecuencia con la que presuntamente se repet¨ªan estas escenas era de dos veces por semana. Relat¨®, asimismo, que su presunto agresor le dec¨ªa que aquella experiencia le servir¨ªa "para cuando tuviera novio", y que le repet¨ªa que aquello era un secreto entre los dos y que no pod¨ªa decir nada.
La joven ofreci¨® incluso detalles como que la colchoneta que el presunto agresor empleaba para tumbarla estaba en una habitaci¨®n contigua a su despacho, y que en reiteradas ocasiones la hab¨ªa llevado a ella a recoger la colchoneta. El ex gerente, por su parte, ha negado todos estos hechos y ha definido a la joven ante el juez como "fantasiosa y sexualmente precoz".
En cuanto a la denuncia de abusos sexuales cometidos presuntamente en la persona de un menor, interno tambi¨¦n en la residencia para paral¨ªticos cerebrales gravemente afectados, ¨¦sta fue interpuesta por profesores del colegio p¨²blico donde el ni?o est¨¢ escolarizado.
Seg¨²n la declaraci¨®n que prestaron ante el juez la educadora, la logopeda y el tutor del menor, ¨¦ste lleg¨® un d¨ªa al colegio con el pa?al manchado de sangre y, al examinarlo, descubrieron que presentaba heridas en el ano. Aseguran que se sorprendieron porque nadie les hab¨ªa advertido desde la residencia.
Posteriormente, unos 40 ¨® 50 d¨ªas despu¨¦s, preguntaron al menor sobre el incidente. El ni?o, que padece una par¨¢lisis cerebral con deficiencia ps¨ªquica asociada, les ofreci¨® unas explicaciones que les resultaron preocupantes, y los educadores decidieron acudir a la polic¨ªa.
Sin embargo, la exploraci¨®n m¨¦dica llevada a cabo por el forense no ha podido concluir nada porque, al haber transcurrido m¨¢s de dos meses entre la comisi¨®n de los supuestos abusos y la exploraci¨®n, es dif¨ªcil determinar si ha existido o no agresi¨®n. El juzgado ha requerido el historial m¨¦dico del menor. Tambi¨¦n se ha decidido aplazar la declaraci¨®n del muchacho, porque la primera vez que acudi¨® al juzgado estaba sobreexcitado.Adem¨¢s de estas dos denuncias que se instruyen en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 1, existen otras seis presentadas por familiares de internos de la residencia que afectan al gerente y a otros trabajadores.
El abogado Francisco Dami¨¢n V¨¢zquez, que representa a la familia del menor antes citado y a otras cuatro familias de enfermos de la residencia de Amappace, coment¨® ayer a este peri¨®dico que el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 2 de M¨¢laga, donde se instruyen estos sumarios, a¨²n no se ha puesto en comunicaci¨®n con las partes, por lo que se desconoce en qu¨¦ estado se encuentra la investigaci¨®n.
En estas denuncias se relatan malos tratos, abusos sexuales e irregularidades cometidas presuntamente por el ex gerente de Amappace y por al menos tres trabajadores de la residencia. Todas ellas fueron presentadas despu¨¦s de la detenci¨®n del ex gerente de la asociaci¨®n, y en uno de los casos, la posible v¨ªctima es tambi¨¦n una menor.
Jos¨¦ Colomina Llorens ingres¨® como socio en Amappace a finales de la d¨¦cada de los setenta, cuando se fund¨® la asociaci¨®n. Padre de un ni?o con par¨¢lisis cerebral, comenz¨® a desempe?ar las labores de gerencia al poco tiempo de ingresar en la asociaci¨®n, y tambi¨¦n realiz¨® las funciones de director de la residencia hasta que Amappace lo suspendi¨® de empleo y sueldo tras su detenci¨®n. Su esposa mantiene el puesto de vocal en la asamblea de Amappace, un cargo que votan los socios.
La asociaci¨®n est¨¢ personada en el caso como parte gravemente afectada y, seg¨²n su abogada, Araceli Gonz¨¢lez, esta semana la junta directiva estudiar¨¢ el sumario.
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