Detenido el coordinador de HB en Navarra al tratar de boicotear una concentraci¨®n pacifista
Agentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa detuvieron ayer en Pamplona al coordinador general de HB en Navarra y miembro de la Mesa Nacional de la coalici¨®n, Juan Cruz Aldasoro, cuando pretend¨ªa manifestarse junto a una veintena de dirigentes y simpatizantes de EH frente a una concentraci¨®n de protesta por el ¨²ltimo crimen de ETA. Unas 1.500 personas secundaban la convocatoria en contra de la organizaci¨®n asesina. Aldasoro, acusado de resistencia a la autoridad, fue puesto en libertad por el juez horas despu¨¦s a la espera de que tenga que comparecer en el juzgado.
Los dirigentes y simpatizantes de la coalici¨®n independentista, entre ellos su portavoz en la C¨¢mara navarra y tambi¨¦n miembro de la Mesa Nacional, Pernando Barrena; el parlamentario foral F¨¦lix Puyo, y la concejal de Pamplona Ainara Armendariz, intentaron desplegar una pancarta y dar una conferencia de prensa a la puerta de su sede. A escasos metros, unas 1.500 personas secundaban en la puerta del Ayuntamiento de Pamplona una concentraci¨®n silenciosa convocada por el consistorio y la Federaci¨®n Navarra de Municipios y Concejos en protesta por el asesinato el pasado mi¨¦rcoles a manos de un pistolero etarra del subteniente de Infanter¨ªa Francisco Casanova.Los agentes intentaron retirar la pancarta que portaban los cargos abertzales y Aldasoro, ex alcalde de la localidad navarra de Etxarri Aranatz, trat¨® de impedirlo encar¨¢ndose a los polic¨ªas. El dirigente de HB fue golpeado y arrastrado por el suelo por los agentes antes de que ¨¦stos le detuvieran.
La polic¨ªa impidi¨® que se realizara la conferencia de prensa e identific¨® a los congregados, mientras cientos de personas aplaud¨ªan su actuaci¨®n y coreaban repetidamente gritos -"asesinos", "cadena perpetua", sois la escoria de Navarra, la basura de Espa?a"- contra los representantes de Euskal Herritarrok. Los incidentes ocurrieron cuando apenas hab¨ªan transcurrido dos minutos desde el inicio de la silenciosa concentraci¨®n pacifista. La Polic¨ªa Municipal y unas vallas de tr¨¢fico separaban al grupo mayoritario de la peque?a concentraci¨®n de los independentistas.
Pernando Barrena asegur¨® despu¨¦s que su convocatoria contaba con el permiso oficial, ya que lo hab¨ªa solicitado el pasado lunes -tras la muerte en Bilbao de los cuatro miembros de ETA a los que les estallaron los explosivos que transportaban-, y no hab¨ªa sido desautorizada. Los dirigentes radicales se retiraron a su sede en Pamplona y, finalmente, no pudieron ofrecer su conferencia de prensa.
Minutos despu¨¦s, y tras un largo aplauso, finaliz¨® la concentraci¨®n ciudadana, presidida por una pancarta en la que se le¨ªa "Por la libertad, ETA no" sostenida por ediles del consistorio.
El Ayuntamiento de Pamplona hab¨ªa aprobado minutos antes una moci¨®n de condena del asesinato del subteniente con los votos a favor de UPN, que gobierna la corporaci¨®n; PSN-PSOE, IU y CDN y la abstenci¨®n de EH, que, no obstante, apoy¨® uno de los puntos del escrito, el relativo a la expresi¨®n de la condolencia municipal a los familiares y compa?eros del fallecido.
El acuerdo incluye un compromiso, que deber¨¢ materializarse en un pr¨®ximo pleno, para destituir a los ediles de EH, la segunda fuerza pol¨ªtica de Pamplona en votos y concejales, de todos los cargos de representaci¨®n municipal que a¨²n manten¨ªan, tales como los consejos escolares. Una medida similar aprob¨® meses atr¨¢s la C¨¢mara de Navarra, que ya apart¨® a parlamentarios radicales de sus cargos en comisiones de trabajo. EH defendi¨® en el pleno del consistorio su propia moci¨®n, en la que, una vez m¨¢s, se limit¨® a "lamentar" el asesinato del subteniente Casanova.
Miles de personas secundaron las convocatorias en numerosas localidades del Pa¨ªs Vasco y Navarra para mostrar su dolor por el ¨²ltimo asesinato etarra. A la concentraci¨®n celebrada delante de la sede del Parlamento navarro se sumaron el ministro de Defensa, Federico Trillo, y varias autoridades militares de uniforme. Por la tarde, varios miles de personas secundaron en las dos comunidades aut¨®nomas las concentraciones de Gesto por la Paz.
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