Zapatero respalda a Areces y emplaza a la renovaci¨®n del partido en Asturias

Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero reiter¨® ayer el respaldo expreso de la Ejecutiva Federal del PSOE a las iniciativas del Gobierno asturiano, que preside el tambi¨¦n socialista Vicente ?lvarez Areces, al tiempo que hizo un llamamiento al di¨¢logo y a la renovaci¨®n en la Federaci¨®n Socialista Asturiana (FSA). El secretario general de los socialistas desarroll¨® ayer en Asturias una intensa jornada de mediaci¨®n entre representantes de los sectores enfrentados por el control del partido y por la acci¨®n de gobierno del Ejecutivo aut¨®nomo. El enfrentamiento entre los partidarios de Areces y los guerristas hab¨ªa llegado al borde de la ruptura en junio pasado con la aprobaci¨®n por el Parlamento auton¨®mico de una Ley de Cajas de Ahorro, por iniciativa del grupo socialista y en contra de los criterios del Gobierno de Areces. Zapatero calific¨® de "bueno, ambicioso y con iniciativas de calado" el programa del Ejecutivo aut¨®nomo, en la sede de la FSA flanqueado por su secretario general, el ex ministro y portavoz socialista Luis Mart¨ªnez Noval, y el representante de la nueva Ejecutiva Federal socialista ?lvaro Cuesta.

El l¨ªder del PSOE hab¨ªa mantenido previamente una entrevista durante una hora con ?lvarez Areces. En la ronda de contactos, Rodr¨ªguez Zapatero conoci¨® la opini¨®n de los representantes del Grupo Parlamentario Socialista en la Junta General, y de la ejecutiva regional. Tambi¨¦n se entrevist¨® con los alcaldes de Gij¨®n y Avil¨¦s, donde se localizan los principales baluartes de Areces en el partido. "Estamos en el horizonte de resolver la situaci¨®n de Asturias por medio del debate y del di¨¢logo", explic¨® el secretario general del PSOE. "Creo que aqu¨ª habr¨¢ muchas iniciativas pol¨ªticas este pr¨®ximo oto?o".

Pero el fondo de la mediaci¨®n de Rodr¨ªguez Zapatero en la crisis no ha tenido demasiado reflejo en las rese?as oficiales. Los partidarios de Areces piden al m¨¢ximo responsable socialista la ratificaci¨®n de las condiciones del acuerdo escenificado en Oviedo hace dos semanas por el secretario de organizaci¨®n, Jos¨¦ Blanco, en el que se garantizaba el respaldo del partido a la acci¨®n de gobierno y se descartaban nuevos escenarios de confrontaci¨®n interna, como el ocurrido en relaci¨®n a Cajastur.

"Se trata de garantizar que el Gobierno va a gobernar, y que el grupo parlamentario ser¨¢ su principal respaldo y no un colaborador lejano", explicaron ayer fuentes pr¨®ximas al presidente asturiano. Tras el par¨¦ntesis vacacional de agosto, una comisi¨®n integrada por representantes del Gobierno, el grupo parlamentario y la direcci¨®n de la FSA se encargar¨¢ de limar diferencias y alcanzar un acuerdo de m¨ªnimos sobre el contenido de nuevos proyectos de ley, antes de su remisi¨®n al Parlamento. Queda pendiente decidir el orden de tramitaci¨®n o si ¨¦sta se realizar¨¢ en bloque. En septiembre, las miras estar¨¢n puestas en contenidos que ya provocaron chispazos entre las familias socialistas en el ¨²ltimo periodo de sesiones. El nuevo talante de consenso se medir¨¢ en proyectos que prepara el Ejecutivo de Areces, como la creaci¨®n de un ente auton¨®mico de televisi¨®n, las leyes del suelo y del juego, y la oferta educativa para ni?os menores de 3 a?os.

Congreso en oto?o

Rodr¨ªguez Zapatero tuvo ocasi¨®n ayer de pulsar opiniones en torno al horizonte en el que se sit¨²a el desenlace final de la crisis: el congreso regional que la FSA celebrar¨¢ en noviembre pr¨®ximo. Zapatero se refiri¨® a ese c¨®nclave para emplazar a los socialistas asturianos a trasladar el esp¨ªritu de renovaci¨®n del congreso federal celebrado en julio.En el apogeo del conflicto sobre Cajastur las familias del socialismo asturiano ya miraban a ese congreso como el escenario en el que Areces luchar¨ªa por el control del partido y, en caso de no tomarlo, se plantear¨ªa dimitir. Aunque Zapatero ha advertido en Oviedo contra la existencia de familias enfrentadas en el seno del PSOE, en Asturias pocos creen que las disputas entre sectores vayan a remitir mediante un apaciguamiento conciliador, casi salom¨®nico.