La OCDE avisa sobre el riesgo de usar las ventajas fiscales para atraer inversi¨®n

La Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE) ha decidido revisar un asunto complejo y pol¨ªticamente delicado de la econom¨ªa: las ventajas fiscales para atraer la inversi¨®n. La organizaci¨®n teme que los bajos impuestos sean la raz¨®n por la cual una empresa se instale en un pa¨ªs u otro, situaci¨®n que provocar¨ªa roces entre Estados, movimientos ficticios de capital dif¨ªciles y costosos de controlar y el aumento de otros grav¨¢menes para suplir los descuentos.

Competencia desleal

La lucha de la organizaci¨®n en contra de los para¨ªsos fiscales ha sido celebrada por los pa¨ªses desarrollados, los miembros de la OCDE. Pero meterse con los reg¨ªmenes fiscales preferenciales que los propios miembros han creado y de los cuales se benefician es otra cosa. Nadie aplaude con mucho entusiasmo esta iniciativa. Los 35 para¨ªsos fiscales que la OCDE ha se?alado con el dedo acusador se presumen como centros donde la delincuencia financiera internacional campa a sus anchas. Cualquier pa¨ªs que se precie de tener un compromiso con la ley est¨¢ de acuerdo con que estos centros (aun cuando sean parte de su territorio, como las Islas V¨ªrgenes de EE UU) sean sancionados si no modifican sus reg¨ªmenes fiscales.

Pero ahora la OCDE recomienda al Gobierno irland¨¦s, entre otros, que revise las normas de su exitoso centro de inversiones de Dubl¨ªn o al italiano que haga lo mismo con su "para¨ªso" financiero de Trieste, por ahora inactivo.La OCDE se?ala reg¨ªmenes preferenciales en 21 miembros y todos pueden convertirse en una "seria amenaza para las econom¨ªas de los pa¨ªses desarrollados". Algunos de ellos han sido eliminados recientemente o est¨¢n en proceso de serlo. Los reg¨ªmenes del Pa¨ªs Vasco y Navarra tambi¨¦n est¨¢n incluidos en la lista de la OCDE. La Diputaci¨®n de Vizcaya decidi¨® derogar en julio pasado su r¨¦gimen especial de incentivos fiscales. Las diputaciones de ?lava y Guip¨²zcoa lo hicieron en marzo pasado, mientras que Navarra tambi¨¦n decidi¨® en mayo poner fin a su r¨¦gimen.

Australia y Holanda tambi¨¦n han abolido algunos de sus reg¨ªmenes fiscales preferenciales. Suecia est¨¢ revisando alternativas a su r¨¦gimen de alivio fiscal para el sector asegurador, mientras que centros de Finlandia y Turqu¨ªa, a pesar de estar en vigor, no han sido utilizados por los inversores, por lo que, como en el caso de Navarra, es muy probable que desaparezcan.

Los reg¨ªmenes que han permitido la proliferaci¨®n de los centros financieros han sido clave en casos como el irland¨¦s para atraer la inversi¨®n extranjera y desarrollar la econom¨ªa de una zona primero, y m¨¢s tarde hasta la de un pa¨ªs. La Zona Econ¨®mica Especial de Canarias (ZEEC) pudo haber arrebatado a los irlandeses parte de su "milagro econ¨®mico", pero el proyecto tard¨® mucho en aprobarse y la inversi¨®n no espera.

El tema es tan espinoso que la propia OCDE intenta no pillarse los dedos. "Es importante destacar", dice la organizaci¨®n, "que las recomendaciones para que se logren sistemas fiscales seguros no pretenden imponer la armonizaci¨®n fiscal entre los miembros de la organizaci¨®n o de fuera de ella, ni decirle a un pa¨ªs cu¨¢l ser¨ªa el nivel de presi¨®n fiscal apropiado".

"Las propuestas para evitar la competencia fiscal desleal intentan lograr que los impuestos no sean la causa determinante de que la inversi¨®n se haga en un lugar u otro", concluye la OCDE.Todos los pa¨ªses tienen alg¨²n tipo de r¨¦gimen preferencial y no es su existencia lo que preocupa a la OCDE, sino sus diferencias. La competencia por ver qui¨¦n ofrece las mejores condiciones fiscales y otros tipos de ventajas para atraer la inversi¨®n se ha vuelto tan salvaje, que la organizaci¨®n teme que aumenten las fricciones entre los Estados.

El pa¨ªs que pierde una empresa atra¨ªda por otro Estado se siente, ante todo, agredido. A?adido a esto, a la OCDE le preocupa que tantas ventajas tributarias terminen por perjudicar la recaudaci¨®n fiscal de tal manera que el Estado tenga que aumentar el gravamen sobre el trabajo, el consumo o la renta personal.