Ladrillos de solidaridad
Sensibilizaci¨®n
En la vida acad¨¦mica de los estudiantes siempre emergen ideas innovadoras y atrevidas. As¨ª lo reconocen arquitectos gaditanos reci¨¦n licenciados, que aseguran, con todo, no haberse desprendido de ese esp¨ªritu solidario y aventurero, propio de j¨®venes aguerridos y comprometidos. Lo suyo es pura vocaci¨®n. Acostumbrados a altibajos en su actividad constructora, cuando el trabajo escasea, Germ¨¢n L¨®pez Mena y Charo Escobar, junto con otros tres compa?eros -todos licenciados en Arquitectura-, se embarcan en proyectos de ayuda a las poblaciones m¨¢s desfavorecidas. Son colectivos que se encuentran en situaciones de pobreza severa en algunos pa¨ªses del Tercer Mundo.Hace cuatro meses crearon la delegaci¨®n de Arquitectos Sin Fronteras en la provincia de C¨¢diz y, desde entonces, la actividad de este grupo de trabajo ha sido incesante. Su labor ha estado encaminada hasta el momento a dos vertientes claramente definidas.
Lo m¨¢s inmediato cruza fronteras. En breve, viajar¨¢n a la Rep¨²blica Dominicana, donde se integrar¨¢n en un equipo de trabajo para la remodelaci¨®n urbana de algunos barrios deprimidos.
"Se trata de racionalizar proyectos urban¨ªsticos para la ordenaci¨®n de varias ciudades", explica Germ¨¢n L¨®pez, quien subraya el papel "decisivo" que deben asumir los arquitectos en estas iniciativas de cooperaci¨®n. "Podemos actuar, sobre todo, en medidas preventivas para evitar enfermedades de contagio. Hay zonas, por ejemplo, donde se extienden constantemente epidemias y contagios, que afectan a gran parte de la poblaci¨®n, porque no hay unas redes o canalizaciones de saneamiento apropiadas. Es ah¨ª donde nosotros debemos actuar con proyectos de depuraci¨®n", explica.
Pero no es ¨¦sta la ¨²nica actuaci¨®n en espera. En Guinea, estos arquitectos planean rehabilitar un hospital que se encuentra en muy mal estado. Una tarea que entra?a otras dificultades a?adidas. "El mayor problema es conseguir que nos concedan el visado", afirma Germ¨¢n L¨®pez.
Son los dos primeros proyectos de una delegaci¨®n que tiene encomendada a su cargo colaborar con iniciativas integrales de desarrollo en los pa¨ªses del continente africano. Con todo, hasta el momento, su actividad, a la espera de emprender estos viajes, ha estado volcada casi todo el tiempo en un proyecto concreto de sensibilizaci¨®n de la sociedad, mediante una campa?a constante de informaci¨®n en asociaciones de vecinos, de ecologistas y en organizaciones no gubernamentales, as¨ª como en la organizaci¨®n de conferencias.La ¨²ltima disertaci¨®n corri¨® a cargo de Juli¨¢n Salas, un ingeniero industrial de la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional (AECI), dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores.
La tarea que tienen encomendada no consiste tanto en ampliar las dotaciones o equipamientos de las zonas deprimidas como en resolver las carencias ya existentes. "Y siempre respetando la identidad urban¨ªstica y arquitect¨®nica de los territorios donde actuamos", matiza Germ¨¢n L¨®pez.
"No podemos llenar de cemento terrenos desasistidos, sino emprender trabajos a largo plazo para planificar las comunicaciones y organizar la zona elegida", explica L¨®pez, sabedor, a¨²n as¨ª, de la dificultad que ello entra?a. "En los pa¨ªses m¨¢s pobres se construye o se urbaniza como se puede, en funci¨®n de los recursos econ¨®micos que tienen y de las necesidades vitales m¨¢s inmediatas. Y est¨¢n muy alejados de la tecnolog¨ªa m¨¢s sencilla que aqu¨ª disponemos como gr¨²as, maquinarias o un equipo de topograf¨ªa", se lamenta este arquitecto solidario.
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