Madrid, pionera en la reducci¨®n de las vacaciones escolares Los sindicatos rechazan "de plano" el aumento de d¨ªas lectivos

La Consejer¨ªa de Educaci¨®n de la Comunidad de Madrid anunci¨® la semana pasada que, a partir del curso 2001-2002, ampliar¨¢ en 20 d¨ªas lectivos el calendario escolar: suprimir¨¢ la semana blanca de febrero y reducir¨¢ las vacaciones de Navidad, verano y Semana Santa. Una medida pionera en Espa?a que ha puesto en pie de guerra a los sindicatos y merecido el aplauso de las asociaciones de padres.

Sobran 'puentes'

El consejero madrile?o de Educaci¨®n, Gustavo Villapalos, ha se?alado que, a su juicio, los alumnos gozan de "demasiadas vacaciones", y ha asegurado que en el curso 2001-2002 ¨¦stas se reducir¨¢n en aproximadamente 20 d¨ªas para aliviar trastornos a los padres y "mejorar el rendimiento" de los chavales. La Comunidad de Madrid cuenta para este curso con 174 d¨ªas lectivos en educaci¨®n infantil y primaria y 168 en secundaria, justo en la media registrada en el conjunto de Espa?a el a?o pasado por la Confederaci¨®n Espa?ola de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA). Esta asociaci¨®n recuerda que Espa?a es el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea que menos d¨ªas de clase tiene, y el ¨²nico, junto con Grecia, que goza de m¨¢s d¨ªas de vacaciones que lectivos. "El tiempo es un factor de calidad, y el reducido n¨²mero de jornadas lectivas es una de las causas del fracaso escolar", asegura Eulalia Vaquero, presidenta de CEAPA. Vaquero destaca que la ¨²nica ley vigente que establece el n¨²mero de d¨ªas lectivos (la Ley ?rg¨¢nica de Ordenaci¨®n General del Sistema Educativo s¨®lo marca el n¨²mero de horas por asignatura) es la Ley General de Educaci¨®n de 1970, y en ella se fijan 220 jornadas anuales de clase. "La media europea est¨¢ en 180 d¨ªas; est¨¢ claro que Espa?a se est¨¢ descolgando en este tema", a?ade la presidenta de las asociaciones de padres.

No piensan lo mismo los representantes sindicales de los profesores, que respondieron la semana pasada al anuncio de Villapalos con una "firme negativa" y un "rechazo rotundo y de plano". Los docentes manejan datos muy distintos, y sit¨²an a Espa?a a la cabeza de la UE en "horas lectivas". "Seg¨²n varios informes de la Comisi¨®n Europea, los estudiantes alemanes, por ejemplo, reciben al a?o casi un centenar de horas menos de clase que los espa?oles", explica Francisco Garc¨ªa, secretario general de ense?anza en CC OO-Madrid. "Estamos dispuestos a negociar la apertura de los colegios durante once meses al a?o, siete d¨ªas a la semana y doce horas al d¨ªa, pero no a costa de los profesores ni del aumento de las jornadas lectivas, sino pidi¨¦ndole a la Administraci¨®n m¨¢s dinero y actividades complementarias", a?ade.

Madrid es la primera comunidad que propone una reforma de este tipo en el calendario escolar. Aunque, por ejemplo, los tres o cuatro d¨ªas de ocio de la semana blanca de febrero (implantada hace una d¨¦cada para favorecer el descanso de los alumnos en el trimestre m¨¢s largo del curso) fueron suprimidos hace tiempo en diversas regiones como Asturias, Baleares, Canarias, Catalu?a, la Comunidad Valenciana, Murcia y la casi totalidad de Andaluc¨ªa y Castilla-La Mancha.

Desde el Colegio Oficial de Profesores de la Educaci¨®n, que agrupa a 60.000 docentes de toda Espa?a, se propone otra forma de resolver la pol¨¦mica: "Me parece bien ampliar el periodo lectivo, pero aprovechando, y cumpliendo, el calendario que ya hay", aclara Jos¨¦ Luis Negro Fern¨¢ndez, su presidente. "Es evidente, por ejemplo, que sobran puentes, no de los fijados en el calendario laboral sino de los que se a?aden sobre la marcha. Y junio y septiembre son dos meses que casi no se aprovechan; por unas razones o por otras, las clases se suspenden o se acortan".Negro dice que entiende que la reducci¨®n de las vacaciones tranquilice a los padres de los alumnos, pero rechaza que el calendario se deba modificar para agradarles: "Los colegios no son guarder¨ªas", concluye.