Juan Pablo II, "angustiado" por la tensi¨®n en la zona

El Papa lanz¨® ayer un "angustiado" llamamiento para que se ponga fin a la espiral de violencia en Oriente Pr¨®ximo y se reanude el camino del di¨¢logo. "Seguimos con gran angustia", dijo Juan Pablo II al t¨¦rmino de la tradicional audiencia de los mi¨¦rcoles, "la grave tensi¨®n existente en Oriente Pr¨®ximo, una vez m¨¢s sacudido por acontecimientos que han causado numerosas v¨ªctimas y no han excluido ni siquiera algunos lugares sagrados".El Papa se refer¨ªa a las decenas de muertos, palestinos la mayor¨ªa, que han ca¨ªdo en 12 d¨ªas de protestas duramente reprimidas por la polic¨ªa y el Ej¨¦rcito israel¨ª, pero tambi¨¦n a la destrucci¨®n, a manos de airados palestinos, de la llamada Tumba de Jos¨¦, lugar sagrado de los jud¨ªos. "Ante esta dram¨¢tica situaci¨®n", a?adi¨® el Pont¨ªfice ayer, "no puedo sino exhortar a todos a poner fin, sin paliativos, a esta espiral de violencia".

Los graves incidentes de estos d¨ªas son especialmente amargos para el Pont¨ªfice, que albergaba la esperanza de un acuerdo entre palestinos y jud¨ªos tras su visita oficial a Israel y los territorios bajo la autoridad palestina, en marzo pasado. En aquel viaje, Juan Pablo II logr¨® satisfacer a ambas partes, con gestos simb¨®licos que fueron muy del agrado de las autoridades de Israel y del propio Yasir Arafat. El Papa rindi¨® tributo a las v¨ªctimas del Holocausto y dej¨® un mensaje en el que la Iglesia ped¨ªa perd¨®n por siglos de antijuda¨ªsmo, entre las piedras del Muro de las Lamentaciones, principal templo jud¨ªo, en Jerusal¨¦n. Al mismo tiempo, reconoci¨® p¨²blicamente la existencia del Estado palestino en su visita a Arafat en Bel¨¦n. Todo ello sin dejar de reclamar un status internacional para Jerusal¨¦n.

Por otra parte, el primer ministro italiano, Giuliano Amato, dijo ayer en el Parlamento que hab¨ªa ofrecido Roma como sede de un pr¨®ximo encuentro negociador entre las partes enfrentadas en Oriente Pr¨®ximo.