La Almudena les da una oportunidad

Ayer jueves por la tarde se abrieron las puertas de Vista Alegre, en fechas tan se?aladas para Madrid, fiesta de la Almudena, y tres novilleros de la capital tuvieron la oportunidad de demostrar su torer¨ªa y ambici¨®n, ante un paisanaje dispuesto que, a estas alturas del a?o en curso, est¨¢ preparando las pr¨®ximas navidades, y que nunca escatima un ol¨¦ cuando el diestro que pisa el albero acierta a interpretar un lance con aroma o enjundia.Los tres novilleros tuvieron cada uno a su disposici¨®n un burel con el que agradar al respetable, y aprovecharon tal ocasi¨®n lo mejor que pudieron seg¨²n su saber y preparaci¨®n art¨ªstica.

Los novillos, presentados en escalera, por sus diferentes hechuras, fueron nobles y blandos, serios algunos, otros discretos de cornamenta. Y uno mermado en sus defensas, una de ellas tan herida que solt¨® alguna gota de sangre, como el tercero de la tarde. El resto estaba en general con los pitones en buen estado. Todo esto nos puede dar una muestra de las desigualdades rese?adas.

Chapurra en su primero tore¨® de capa de manera vistosa en los lances de saludo, que remat¨® con sendas medias ver¨®nicas en las que hubo gusto. Su faena de muleta tuvo altibajos, las condiciones del novillo, flojo y nobl¨®n, hicieron que el trasteo tuviera tales vaivenes. Pero cuando le cogi¨® la distancia y el temple, le enjaret¨® una buena serie de redondos que le fueron aplaudidos. Al natural dibuj¨® muletazos sueltos suaves que no acabaron de cuajar. Y tanto en el comienzo de la faena, como al final, con ayudados y trincherillas, el planteamiento de su labor fue bueno.

En su segundo Chapurra dio los mejores muletazos de la tarde, a un novillo que en el tercio de muleta tuvo casta. Dos series de redondos, ajustados a la cadera y bien rematados hacia atr¨¢s, hicieron que los tendidos vibraran de verdad. Estrope¨® aquello en el momento de manejar la espada, que es una asignatura que le queda pendiente, y que debe estudiar muy a fondo.

David Cortijo no pudo hacer demasiado en su primero, que, al segundo muletazo, se di¨® una vuelta de campana espectacular que luego acus¨®. Desorientado estuvo el espigado novillero de Carabanchel, que se sac¨® la espina amarga en su segundo, en una faena elegante y algo fr¨ªa, templada, por los dos pitones, en series cortas y limpias, concluida con muletazos a dos manos de bella factura. Una buena estocada al segundo encuentro y cort¨® la ¨²nica oreja de la tarde.

?ngel Amos apunta buen corte, pero era el m¨¢s verde de la terna. No acab¨® de centrarse en el sexto, al que di¨® buenos muletazos sueltos. Pases de todas las marcas en una faena larga. En su primero, estuvo a la deriva ante una res que se raj¨® muy pronto. Y puso banderillas en sus dos novillos. Un calvario result¨® ese tercio en su primero. Sin embargo, se desquit¨® en el ¨²ltimo de la tarde, en el que gan¨® bien la cara, sac¨® los brazos de abajo y clav¨® en lo alto con solvencia.