La casa de la patria

Comienza hoy una negociaci¨®n varias veces aplazada. Los herederos de Blas Infante, padre de la patria andaluza, se re¨²nen con el consejero de Relaciones Institucionales y secretario general del Partido Andalucista, Antonio Ortega, para tratar la compra de la finca, incluida la casa y lo que contiene, donde vivi¨® el ide¨®logo del andalucismo y de donde lo sacaron para matarlo en 1936. A pesar de que andalucismo es un vocablo que manejan sin reparos todos los partidos pol¨ªticos de la comunidad, es el PA, "heredero leg¨ªtimo" de la filosof¨ªa infantiana quien podr¨ªa ver cumplido uno de sus sue?os: en el castillo, como llaman en Coria del R¨ªo a la casa de Blas Infante, pretenden instalar el Centro de Estudios Andaluces.El notario se traslad¨® a esa finca cuando todav¨ªa no era padre de la patria andaluza. Uno de sus hijos estaba afectado de una bronconeumon¨ªa y los m¨¦dicos le recomendaron aire de campo. Al terreno que adquiri¨®, en un promontorio natural del pueblo sevillano lo llam¨® finca Santa Alegr¨ªa e hizo levantar una casa de estilo mud¨¦jar de 289 metros doblados en piso y terrazas y distribuidos en 10 compartimentos y un comedor central; corral, gallinero, cuadra y dependencias para criados rematan, seg¨²n reza en las escrituras, la construcci¨®n. Un olivar lo rodea.

El terreno estaba calificado como suelo r¨²stico, de escaso valor en el mercado inmobiliario. Las nuevas normas urban¨ªsticas pendientes de su aprobaci¨®n definitiva dividen la finca en dos: la franja que rodea la casa es ahora terreno protegido porque as¨ª lo pidi¨® la Consejer¨ªa de Cultura; y el resto de la ladera, 21.400 metros cuadrados, se ha calificado provisionalmente como urbanizable con lo que su valor en el mercado se dispara.

Ortega considera que el precio total puede rondar los 800 millones de pesetas aunque dice que no sabe con exactitud la dimensi¨®n del terreno. "Eso es cosa de los t¨¦cnicos".

Para hablar de precios, metros aparte, hay que calibrar el valor simb¨®lico de la propiedad. En aquella casa escribi¨® y se conservan los textos de Blas Infante sobre andalucismo; all¨ª est¨¢ la bandera verdiblanca, el himno andaluz y el primer escudo de la comunidad labrado en piedra. Elementos considerados hoy patrimonio hist¨®rico.

Los propietarios actuales son las tres hijas del notario, Mar¨ªa Luisa, Mar¨ªa de los ?ngeles y Mar¨ªa de la Alegr¨ªa Infante Garc¨ªa. En las escrituras de la propiedad consta un tercero, Francisco Navarro, que fue el marido de la mayor, ya fallecido.

Mar¨ªa Luisa Infante, la mayor de las hermanas, de 72 a?os, dice que ella no vender¨ªa nunca, pero que la casa es grande y sus cuidados onerosos... "La casa est¨¢ en buen estado, y las escayolas s¨®lo necesitan una restauraci¨®n". Se refiere a los arabescos que adornan las paredes y que le dan un aire de mezquita. Pero aclara: "Si se hace todo urbanizable valdr¨ªa bastante m¨¢s" que 800 millones de pesetas.

La intenci¨®n del consejero andalucista es respetar la finca como zona verde. No sabe por qu¨¦, a?os atr¨¢s, se declar¨® urbanizable una franja, pero hablar¨¢ con el alcalde de Coria del R¨ªo, Tom¨¢s Alfaro, tambi¨¦n andalucista: "Eso no se aprobar¨¢". Agradece de antemano a los propietarios que sean sensibles con el proyecto porque "especular con el terreno" lo har¨ªa m¨¢s costoso.

La finca ten¨ªa en origen unos 68.000 metros cuadrados. La autov¨ªa le pas¨® por encima y se habla de que se vendi¨® un trozo, pero los propietarios no hacen declaraciones. En 1998 el entonces alcalde de Coria del R¨ªo, Fernando Su¨¢rez Villar, contesta en una carta a Antonio Ortega: "Una vez revisadas las normas subsidiarias, y a petici¨®n de los propietarios, la superficie protegida ser¨ªa de 15.000 metros cuadrados cuyo valor como suelo r¨²stico ser¨¢ de 3.885.000 pesetas. No obstante, si se quiere dar un valor m¨¢ximo a los terrenos protegidos (como urbanizables) la cifra ser¨ªa de 300 millones de pesetas m¨¢s el valor del edificio".

Ortega dijo ayer que no tuvo con los anteriores alcaldes la colaboraci¨®n del actual, con quien acordar¨¢ que todo sea r¨²stico.