A clase, con goteras
La nueva escuela infantil de Navalcarnero abre con un mes de retraso por la falta de calefacci¨®n y las humedades del centro
![F. Javier Barroso](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F0cf5fb59-eab8-46c8-bcca-f112a1a7846c.png?auth=a4a5a56abc078449e8165721b2b449479e5bd0384d1cd2f70900262c80af7937&width=100&height=100&smart=true)
Escorada en una esquina de la avenida de los Quintos, se alza majestuosa la escuela infantil municipal de Navalcarnero (11.500 habitantes). Por fuera, el edificio parece una construcci¨®n moderna, en la que entra la luz por grandes ventanales y cuyas paredes blancas la reflejan. Sin embargo, el atento observador de la construcci¨®n ve desde la valla exterior algo extra?o en el edificio. Grandes pl¨¢sticos negros sujetados con ladrillos protegen la techumbre de color ceniza que cubre en ca¨ªda el inmueble. Es la muestra externa de los problemas que tiene este centro, que deber¨ªa haber comenzado a funcionar el 30 de noviembre, pero que se puso en marcha ayer por primera vez.
El consejo escolar del centro ya dio la voz de alarma hace un mes, cuando en el techo de dos aulas aparecieron dos grandes manchas. Era la prueba palpable de que la cubierta no aislaba lo suficiente y las lluvias se calaban hasta el interior del edificio. Todav¨ªa quedan en las techumbres las huellas dejadas por la lluvia.
Una trabajadora del centro calific¨® de 'chapuza' la forma en que se ha construido la escuela
'No podemos entender que sea un edificio de nueva construcci¨®n y que ya haya goteras que afecten a una parte importante del edificio. El drenaje no es suficiente y el agua se va filtrando justo a los lugares en los que est¨¢n los ni?os', se?ala Antonio Fidalgo, uno de los padres afectados. Una tabla de madera hinchada por la humedad intenta tapar parte de las goteras que hay en el aula de los ni?os de uno y dos a?os.
El traslado desde la anterior escuela municipal se deber¨ªa haber efectuado entre el 27 y el 29 de noviembre. Una circular municipal avis¨® el 24 de ese mismo mes de que se suspend¨ªa por el momento el cambio a la nueva sede por problemas en el edificio. Adem¨¢s de las goteras, los servicios t¨¦cnicos del Ayuntamiento de Navalcarnero comprobaron que la escuela carec¨ªa de calefacci¨®n: la falta de autorizaci¨®n por parte de la Direcci¨®n General de Industria de la Comunidad imped¨ªa que la caldera se pusiera en marcha. Un nuevo problema que se sumaba a la lista de la escuela.
El tercer impedimento para abrir la nueva escuela se ha descubierto en las ¨²ltimas semanas, con las intensas lluvias ca¨ªdas en la regi¨®n, cuando el patio y las zonas de acceso embarraron de tal forma que ayer todav¨ªa quedaban charcos. El proyecto, seg¨²n Antonio Fidalgo, no inclu¨ªa arquetas o desag¨¹es suficientes para evacuar todo el agua. El problema que tiene ahora la direcci¨®n del centro es que los alumnos no pueden salir al patio por el riesgo de ca¨ªdas en el barro.
Adem¨¢s se est¨¢n abriendo grietas en el terreno, que todav¨ªa no est¨¢ suficientemente asentado. 'Lo l¨®gico es que, si se ha construido un muro de contenci¨®n, se abran en un lateral peque?os desag¨¹es para que el agua no se embalse y se seque de forma adecuada', explica el padre afectado.
La escuela infantil de Navalcarnero es la ¨²ltima de una serie de centros que han sufrido problemas desde el comienzo del curso en septiembre. Unos 800 ni?os de los colegios Magerit y Pablo Ruiz Picasso de Parla (71.400 habitantes) amenazaron con dejar de ir a clase a principios de noviembre por no tener calefacci¨®n. En el primer centro, la falta de calor se debi¨® a la rotura de la caldera y en el segundo, a un retraso en el cambio de la maquinaria. Al final todo se resolvi¨® sin necesidad de salir a la calle para manifestarse por los problemas.
Los padres del colegio Calvo Sotelo, en el distrito de Retiro de la capital, cortaron el 31 de octubre la avenida de la Ciudad de Barcelona durante media hora para protestar por el lamentable estado en que se encontraba el centro. Cuatro grupos ten¨ªan que dar clase en los pasillos y no hab¨ªa ni biblioteca ni laboratorio. El comedor estaba en el sal¨®n de actos.
El nuevo edificio de Navalcarnero, que tiene capacidad para 120 ni?os, ha costado 142 millones de pesetas sufragadas al 100% por la Comunidad, a trav¨¦s del plan regional de inversiones (Prisma). El Ayuntamiento, por su parte, se ha encargado de comprar el material y los muebles necesarios para su puesta en marcha.
Los 19 empleados (15 profesores y cuatro personas de servicio) remataban ayer la puesta en marcha de la escuela. Colocaban los libros que han llevado desde el antiguo centro, mientras varios obreros instalaban parte del mobiliario de la cocina. Una trabajadora del centro calific¨® de 'chapuza' la construcci¨®n de la escuela. Ayer mismo, parte de una puerta se desprendi¨® cuando la abr¨ªan para meter unas cajas. 'Menos mal que no hab¨ªa ning¨²n ni?o cerca', apostillaba esta empleada, que prefiri¨® no dar su nombre.
La nueva escuela infantil no funciona todav¨ªa a pleno rendimiento. En los pr¨®ximos d¨ªas se ir¨¢ incorporando el resto de los alumnos hasta completar sus 120 plazas. Ayer s¨®lo entr¨® una veintena de ni?os. El resto se encuentra de vacaciones o est¨¢ pendiente de su traslado desde otros centros.
El concejal de Educaci¨®n de Navalcarnero, Manuel Barrios, del PP, rest¨® importancia a los problemas de la escuela. Asegur¨® que se han adoptado todas las medidas necesarias para subsanarlos. Y para ello enumer¨® las medidas. Primero se han colocado pl¨¢sticos de color negro de forma provisional en el tejado hasta que llegue el buen tiempo y se pueda cambiar el aislamiento de la cubierta. 'Estas obras no interferir¨¢n en ning¨²n momento en el normal funcionamiento de la escuela', asegura el edil popular.
Los charcos que sufre el patio se evitar¨¢n cuando se plante el c¨¦sped previsto para toda la zona exterior de la escuela. El edil calific¨® de 'peque?os remates' lo que queda para que el edificio est¨¦ perfectamente concluido. 'Cuando los padres del consejo escolar visitaron el nuevo centro, se fueron muy sorprendidos de lo bonito que es el edificio y de lo bien equipado que est¨¢. La gente, desde luego, no se alarm¨® con esos peque?os problemas', explica Manuel Barrios.
Algunos padres no dudan de su palabra, pero quieren un compromiso por escrito de que la empresa constructora reparar¨¢ todos los desperfectos lo antes posible. 'Queremos que exista un clima de confianza entre el Ayuntamiento y los padres, pero que vaya acompa?ado de actas', asegura Fidalgo, 'lo que ahora no vaya con texto parece que no se cumple'.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![F. Javier Barroso](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F0cf5fb59-eab8-46c8-bcca-f112a1a7846c.png?auth=a4a5a56abc078449e8165721b2b449479e5bd0384d1cd2f70900262c80af7937&width=100&height=100&smart=true)