La Comunidad empezar¨¢ a derribar las 300 chabolas de El Salobral

El consejero de Obras P¨²blicas, Urbanismo y Transportes, Luis Eduardo Cort¨¦s, no quiso dar fechas para el desmantelamiento de ambos poblados. 'Este a?o avanzaremos en el Pozo del Huevo e iniciaremos la primera fase del desmantelamiento de El Salobral', explic¨®. Esa 'primera fase' de El Salobral consiste en conocer el n¨²mero exacto de chabolas del n¨²cleo y cu¨¢ntas de ellas se usan de vivienda.

'En El Salobral hay unas 300 edificaciones, pero no todas est¨¢n habitadas, porque algunas se emplean para guardar aperos de labranza. Y, adem¨¢s, entre las habitadas hay desde chabolas hasta una especie de chal¨¦s', a?adi¨® Cort¨¦s. El segundo poblado m¨¢s grande de la regi¨®n es el vallecano de Las Barranquillas, con 150 casetas.

El Salobral est¨¢ situado en el kil¨®metro 10,5 de la avenida de Andaluc¨ªa, entre Villaverde y Getafe. Este barrio no es un hipermercado de la droga como La Celsa, La Rosilla o Las Barranquillas. Pero su crecimiento incontrolado alarma a los vecinos de Villaverde, que temen que pueda convertirse en una bolsa de marginaci¨®n y delincuencia. Por eso, en el plan de inversiones para el distrito negociado en 1997, las asociaciones vecinales arrancaron al presidente regional, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, la promesa de desmantelar este n¨²cleo.

Cort¨¦s destaca la 'insalubridad' e '¨ªnfimas' condiciones de habitabilidad de este barrio con 141 ni?os escolarizados. Los chabolistas obtienen la luz por enganches ilegales y el agua la sacaban de pozos hasta que el Ayuntamiento avis¨® sobre su baja potabilidad y hubo que recurrir a las bocas de riego. Adem¨¢s, el asentamiento est¨¢ muy alejado de comercios y escuelas y rodeado de torres el¨¦ctricas de alta tensi¨®n.

Los primeros colonos de El Salobral fueron vecinos de la zona que a comienzo de los a?os ochenta labraron huertos en estos suelos p¨²blicos no edificables que pertenecen a particulares, a Renfe y al Ministerio de Fomento. Pero el mayor crecimiento se ha producido en el ¨²ltimo lustro, con la llegada de chabolistas expulsados de poblados desmantelados. Los reci¨¦n llegados compraron a los huertanos parcelas que no pod¨ªan vender porque no eran suyas. En 1997 hab¨ªa 410 casetas.

El Pozo del Huevo es m¨¢s antiguo. Naci¨® en la d¨¦cada de los cincuenta, cuando inmigrantes extreme?os se asentaron en el kil¨®metro 2 de la carretera de Villaverde a Vallecas.

En 1990, la mayor¨ªa de las 382 familias del Pozo fueron realojadas en el ruedo de la M-30, el edificio de pisos sociales de Moratalaz dise?ado por el arquitecto Francisco Javier S¨¢enz de Oiza. Pero 35 familias quedaron sin alojar y otras m¨¢s fueron llegando, hasta alcanzar las 140 actuales.

Hace un a?o, el Ayuntamiento envi¨® a estos chabolistas una orden de derribo de sus casetas sin fecha de ejecuci¨®n. Ante la alarma creada, cuatro asociaciones que trabajan en la barriada -C¨¢ritas Apomar, las franciscanas de Mar¨ªa, el Movimiento Cuarto Mundo y el movimiento cat¨®lico gitano La Frontera- pidieron soluciones para al menos 40 familias muy necesitadas que no tendr¨ªan cobijo si les tiraban las chabolas.

Hace un a?o, Ruiz-Gallard¨®n prometi¨® a las asociaciones de vecinos vallecanas que, una vez derribados los conflictivos poblados de La Celsa y La Rosilla, se desmantelar¨ªa el Pozo, que nunca ha creado problemas.

En la regi¨®n son 1.500 las familias que viven en chamizos. El presupuesto regional de este a?o para erradicar el chabolismo es de 3.000 millones.