Un agente de la DINA dice que los detenidos eran arrojados al mar
Un ex agente de la Direcci¨®n de Inteligencia Nacional (DINA, los servicios secretos durante la dictadura de Pinochet) confes¨® en una declaraci¨®n judicial que los cuerpos de la mayor parte de los detenidos en campos de tortura entre 1973 y 1978 eran lanzados al mar dentro de sacos y atados a un trozo de riel de ferrocarril.
El ex agente, del cual se desconoce la identidad, pero s¨ª se sabe que era funcionario de la Polic¨ªa de Investigaciones antes de pasar a la DINA, asegur¨® que las ¨®rdenes las daban los jefes de los centros de tortura, todos oficiales en aquel momento activos del Ej¨¦rcito.
El testimonio, difundido por Radio Cooperativa, se?ala que quien revisaba las listas y decid¨ªa la suerte final de los detenidos era el propio jefe de la DINA, el general Manuel Contreras, quien hace s¨®lo una semana sali¨® de la c¨¢rcel tras cumplir su condena de siete a?os por el asesinato del ex canciller Orlando Letelier, y que hoy est¨¢ bajo arresto domiciliario por otros dos casos que investiga el juez de fuero Juan Guzm¨¢n Tapia.
El ex agente de la DINA hizo una larga confesi¨®n ante un tribunal de Santiago, que fue recogida en 20 p¨¢ginas.
Entre los macabros detalles de la confesi¨®n, el ex agente recuerda que una vez que visit¨® por primer a vez el centro de torturas de la calle Londres 38 de Santiago, fue al ba?o del segundo piso donde se encontr¨® con una gran cantidad de pedazos de rieles ferroviarios recientemente cortados. Relata que le pregunt¨® a un oficial a cargo del lugar para qu¨¦ eran esos pedazos de riel, obteniendo como respuesta que eran para que no flotaran 'los paquetes', como se les llamaba a los detenidos moribundos o muertos que met¨ªan en sacos de arpillera amarrados con alambres. Los pesados hierros imped¨ªan que los cuerpos flotar¨¢n.
El ex agente, habr¨ªa confesado porque sufre una enfermedad terminal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.