'Nunca me he dejado enga?ar por la fama'

Robert Redford ha conseguido sobrevivir a su imagen de sex symbol sin traicionarse demasiado ni venderse del todo a Hollywood, del que es, sin embargo, uno de sus ejemplos m¨¢s brillantes. 'Todas las pel¨ªculas que hago tienen un elemento personal; de lo contrario no las har¨ªa. La primera vez que dirig¨ª, con Gente corriente (en 1980, por la que obtuvo el Oscar el mejor director), la gente me preguntaba si era algo autobiogr¨¢fico. No lo era, pero era algo que hab¨ªa visto porque crec¨ª en un ambiente en el que la gente pon¨ªa mucho ¨¦nfasis en las apariencias. Ilustr¨¦ la frustraci¨®n de mi infancia en California'. En una habitaci¨®n de hotel de Nueva York, Redford lleva sus eternos vaqueros, gafas y mirada azul p¨¢lida, algo cansada.

'La elegancia es algo muy importante para m¨ª. Tiene un sentido muy profundo. Ni siquiera tenemos l¨ªderes con elegancia. Parece m¨¢s comercial enfadarse'

A estas alturas, tras casi 40 a?os de carrera, se puede centrar en lo que le interesa, sin tener que hacer concesiones, un equilibrio que no ha sido del todo f¨¢cil mantener. Hace 20 a?os, el actor cre¨® el Sundance Institute, para ayudar a los j¨®venes cineastas, un centro que ahora se ha convertido, a trav¨¦s de su festival, en una de las principales plataformas del cine independiente en Estados Unidos. Pero Redford tambi¨¦n ha protagonizado dudosos productos made in Hollywood, como aquella Proposici¨®n indecente con Demi Moore o el lacrim¨®geno drama period¨ªstico con Michelle Pfeiffer ?ntimo y personal.

En Bagger Vance, la historia de un joven prodigio del golf que pierde su swing y su inter¨¦s por la vida al volver de la Primera Guerra Mundial, Redford ha intentado sumar estas dos vertientes de su carrera, en una pel¨ªcula que recuerda mucho otra que protagoniz¨® sobre el b¨¦isbol, El mejor. Cuentos m¨¢gicos en los que el h¨¦roe siempre est¨¢ buscando algo. 'Me interesa mucho contar historias, por eso me gusta la mitolog¨ªa y siempre hay un ingrediente de p¨¦rdida. No voy a decir que estoy obsesionado con ello, pero me interesa mucho ?Qu¨¦ perdemos cuando vamos avanzando en la vida y qu¨¦ ganamos? Siempre es una victoria p¨ªrrica. En muchas de mis pel¨ªculas, el personaje parece alcanzar lo que realmente quiere s¨®lo para preguntarse cu¨¢l es exactamente su significado'.

No siempre ha sido obvio ser un golden boy con inquietudes. A un sex symbol no le dan papeles serios. 'He tenido que luchar contra esa imagen. No pod¨ªa hablar de ello ni quejarme porque tambi¨¦n tiene cosas buenas. Pero no era f¨¢cil a la hora de trabajar porque s¨®lo se ve¨ªa lo otro. Creo que hay bastante variedad en mi trabajo para mostrar que no s¨®lo era mi aspecto f¨ªsico. He tenido algunas conversaciones sobre eso con Brad Pitt y Matt Damon'. Redford los ha dirigido a los dos. El primero protagoniz¨® El r¨ªo de la vida, y el segundo es el personaje principal de Bagger Vance.

Redford asegura que sus j¨®venes colegas lo tienen ahora mucho m¨¢s complicado para vivir su estrellato y mantener un m¨ªnimo de cordura, independencia y vida personal, algo que el actor ha conseguido. Apenas se sabe nada de su vida privada, s¨®lo que tiene tres hijos que ya le han hecho abuelo y que en 1985 se divorci¨® de su ¨²nica mujer, Lola van Wagenen, tras algo m¨¢s de 25 a?os de matrimonio.

'M¨¢s vale encontrar una buena alternativa a la fama. Tener un sitio caliente para quedarse, porque es muy superficial y pasajera. Va y viene muy deprisa. Nuestros centros de inter¨¦s se vuelven cada vez m¨¢s r¨¢pidos y nuestra capacidad de pensamiento tambi¨¦n, como resultado de la era de la informaci¨®n. La fama es un producto de esto, porque la gente no tiene mucho tiempo de pensar y pide que le den una imagen que les guste por unos minutos, as¨ª que se convierte en algo muy cosm¨¦tico. Nunca me dej¨¦ enga?ar por la fama, por eso he podido sobrevivir'.

Una supervivencia que, sin embargo, le ha dejado nost¨¢lgico de otros tiempos, otros valores, algo que se ve especialmente en Bagger Vance. Quiz¨¢s tambi¨¦n por ello el actor haya defendido con tanto ardor todo lo relacionado con el medio ambiente. El tema es conservar algo. Reconoce que echa sobre todo de menos una palabra: elegancia. 'Es algo muy importante para m¨ª. Tiene un sentido muy profundo. Ni siquiera tenemos l¨ªderes con elegancia. Parece m¨¢s comercial enfadarse. La elegancia era parte de mi infancia, una cualidad importante de la educaci¨®n era la forma de encarar las cosas. En algunos casos pod¨ªa ser Dios. Pero creo que no se piensa mucho en eso. Adem¨¢s, ahora han sustituido a Dios por las celebridades'.

Redford ha contado en muchas ocasiones que no tiene miedo a envejecer, sino a dejar de hacer las cosas de las que todav¨ªa sigue disfrutando, sobre todo el deporte. 'Me gusta el deporte y ahora me estoy acercando a la edad en la que no podr¨¦ practicarlo. Me gusta esquiar, caballos, vela, es divertido, y cuando lo pierda va a ser triste'. ?ste es uno de los poco actores que, igual que su viejo amigo Paul Newman, se ha negado a pasar por el bistur¨ª.

De condensar sus carrera en un par de largometrajes, Redford se quedar¨ªa con algunas de las m¨¢s conocidas, las que ayudaron a crear su estrellato sin perder del todo su alma. 'Dos hombres y un destino era la mas divertida y tambien la que muestra mi parte m¨¢s oscura. La mayor satisfacci¨®n fue Todos los hombres del presidente, porque todo el mundo nos dijo que no podr¨ªamos hacerla y que a nadie le interesaba el Watergate. No era una pel¨ªcula sobre Nixon, sino sobre periodismo de investigaci¨®n. Fue una pel¨ªcula muy dif¨ªcil, hab¨ªa una aut¨¦ntica paranoia, pero yo la produje'.

Producir y dirigir se han convertido en las dos principales actividades de Redford, aunque acaba de volver delante de las c¨¢maras en una historia de esp¨ªas, The spy game, con su antiguo protegido Brad Pitt. Bagger Vance es su sexto intento como director. Ninguno de sus largometrajes, excepto Gente corriente, ha tenido el ¨¦xito de sus pel¨ªculas como protagonista.

El toque zen lo da el actor Will Smith (m¨¢s acostumbrado a cazar lagartos extrarrestres en pel¨ªculas como Hombres de negro o El D¨ªa de la Independencia), que encarna a Bagger Vance, que es, m¨¢s que un caddy, un ¨¢ngel de la guarda que imparte consejos excesivamente sabios sobre la vida, la muerte y el destino al jugador Matt Damon. 'Nunca he tenido un gu¨ªa espiritual. En tiempos modernos ser¨ªa terapia o p¨ªldoras, pero he tenido profesores o gente que me han ayudado en un momento dado, que me dieron un empuje; pero nunca he tenido a alguien que me ayudara del todo cuando me hund¨ª en la oscuridad o me desmoron¨¦'.

Bagger Vance no ha sido muy bien recibida ni por el p¨²blico ni por la cr¨ªtica en Estados Unidos. El actor-director asegura que a estas alturas ya no se lo toma de forma personal. Sin embargo afirma: 'Me afecta m¨¢s cuando es una pel¨ªcula que dirijo porque he tardado m¨¢s tiempo en hacerlo. Recuerdo en particular una pel¨ªcula que obtuvo una mala acogida, pero que a m¨ª me gust¨® mucho como actor, Habana. Me gust¨® el papel, pero de pronto la gente se obsesion¨® con mi aspecto y si parec¨ªa viejo. Me decepcion¨® porque mi interpretaci¨®n era mejor, se supon¨ªa que deb¨ªa tener mal aspecto. Cuando me di cuenta de eso, no pens¨¦ m¨¢s en cr¨ªticas. Ahora s¨®lo intento hacer mi trabajo lo mejor que puedo esperando que alguien lo entienda. No puedo controlar el resto'.