Peligro en el parque natural

Con 74 focos confirmados en el Reino Unido, y con el ministerio de Agricultura admitiendo ya que la fiebre aftosa puede empezar a considerarse epidemia, la atenci¨®n se centr¨® ayer en las casi 50.000 reses y ovejas que pastan en el parque natural de Dartmoor, abierto en Devon, al suroeste de Inglaterra.

La zona es una de las mayores reservas naturales y ganaderas y los animales pastan en libertad y est¨¢n en contacto con ponis salvajes, ciervos y tejones. De hallarse tambi¨¦n aqu¨ª la enfermedad, el Gobierno se enfrentar¨ªa a una matanza que ni el m¨¢s audaz de los expertos en infecciones animales se atreve a contemplar.

'Es la pesadilla que todos deseamos evitar, pero ha habido casos de fiebre en sendas granjas situada en el l¨ªmite de Dartmoor (una de ellas propiedad del pr¨ªncipe de Gales) y varias ovejas se han mezclado con las de fincas vecinas, as¨ª que las perspectivas son sombr¨ªas', reconoce la Uni¨®n de Granjeros. Por su parte, los veterinarios oficiales calculan que ser¨¢ necesario sacrificar a unos 60.000 animales en todo el territorio nacional, y nadie quiere a?adir a dicha cifra otra similar en un solo parque.

Anoche, los expertos aseguraban que los ponis salvajes de Dartmoor se salvar¨ªan porque son ¨²nicos, pero los equinos pueden transmitir la fiebre, si bien no la padecen. 'Lo importante es frenar la infecci¨®n y devolver cierto margen de maniobra a la industria c¨¢rnica', han se?alado portavoces de Agricultura.