El sacrificio y los priones
Miles de ceut¨ªes incumplieron las restricciones de Sanidad en la musulmana Fiesta del Cordero
M¨¢s de 6.000 corderos degollados en cuatro horas pusieron ayer fin a la pol¨¦mica suscitada en Ceuta en torno a la matanza ritual por la Pascua Grande de los musulmanes. El sacrificio se cumpli¨® a rajatabla, pero no as¨ª las medidas higi¨¦nicas impuestas por las autoridades debido a la confluencia del mal de las vacas locas y de la fiebre aftosa, enfermedades que han condicionado este a?o la celebraci¨®n de la festividad religiosa del Aid El Kebir, la m¨¢s importante tras el Ramad¨¢n y que es seguida por los 30.000 ceut¨ªes que cumplen con los preceptos del Cor¨¢n.
Desde las diez y media de la ma?ana, y una vez concluida la oraci¨®n en las 25 mezquitas y oratorios que hay en la ciudad aut¨®noma, dio comienzo la matanza masiva de corderos entre los seis y los doce meses de edad, requisito indispensable para cumplir con el rito que rememora el sacrificio de Abraham y que en esta ocasi¨®n ha estado sometido a los dictados de la Consejer¨ªa de Sanidad y Consumo. Este organismo prohibi¨® hace un mes la matanza en los hogares isl¨¢micos, aunque despu¨¦s se retract¨® para sugerir, como medida cautelar, que no se cocinaran ni consumieran los materiales espec¨ªficos de riesgo (MER), como la cabeza, la m¨¦dula espinal u otros ¨®rganos vitales de los corderos.
'Nosotros siempre nos lo comemos todo. As¨ª lo dice la tradici¨®n y as¨ª lo seguiremos haciendo', afirmaba ayer Abselam, que degoll¨® su borrego en una carpa vecinal instalada en una barriada de mayor¨ªa musulmana, donde en menos de una hora se sacrific¨® a unos 60 animales, todos procedentes de ganader¨ªas andaluzas. Uno por minuto. Abselam fue uno de los miles de ceut¨ªes que se salt¨® a la torera unas restricciones que no han sido suficientemente entendidas o explicadas.
Un d¨ªa antes de que se celebrara la Pascua, empleados municipales distribuyeron dos mil contenedores herm¨¦ticos en las barriadas, recipientes que, en teor¨ªa, deber¨ªan servir para arrojar los despojos de los animales: bazo si los ejemplares ten¨ªan seis meses, cabeza y m¨¦dula espinal si contaban m¨¢s de doce.
Previamente, los t¨¦cnicos de la Consejer¨ªa de Sanidad hab¨ªan informado a las comunidades vecinales e incluso a l¨ªderes religiosos c¨®mo extraer los ¨®rganos y visceras considerados materiales espec¨ªficos de riesgo. La operaci¨®n de seguridad se cerr¨® con el reparto de complejos tr¨ªpticos en los que se explicaba la mejor forma de extracci¨®n de las v¨ªsceras y las consecuencias que para el humano ten¨ªan las enfermedades de origen animal. Sin embargo, no fueron muchos los ceut¨ªes que atendieron las normas. A pesar del llamamiento a la cooperaci¨®n ciudadana, los recipientes especiales, con capacidad para recoger los despojos de tres animales cada uno, sirvieron ayer como bidones de agua, cubos de basura e incluso para trasladar las cabezas de los corderos hasta los contenedores ordinarios.
Tan s¨®lo la mitad de los recipientes cumpli¨® con su finalidad, aunque las brigadas de limpieza trabajaron a destajo para que las familias devolvieran, al caer la tarde, los contenedores llenos y sellados, que ser¨¢n enviados a una planta incineradora al sur de Francia especializada en residuos peligrosos.
Al final, la Pascua en Ceuta se celebr¨® con normalidad, aunque descafeinada por unas prohibiciones que a punto han estado de romper la paz social en la ciudad aut¨®noma.
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