Estrada narra la vida de los obreros del Valle de los Reyes

El arquitecto Fernando Estrada Laza (Barcelona, 1943) considera que los obreros del Valle de los Reyes fueron 'los art¨ªfices del arte egipcio'. En opini¨®n de este aficionado a la arqueolog¨ªa, la vida de los faraones ha inspirado numerosos libros tanto de divulgaci¨®n como de ficci¨®n, pero se ha escrito mucho menos de los artesanos, obligados a vivir recluidos en una aldea prohibida para mantener el secreto de su trabajo. Los obreros de la muerte (Planeta), su primer libro, es una cr¨®nica de la vida cotidiana de esos obreros, que 'formar¨®n cofrad¨ªas religiosas equiparables a los gremios de la Edad Media, y que dedicaron su existencia a edificar y decorar la tumba de sus se?ores'.

Los obreros de la muerte incluye fotograf¨ªas y planos detallados de algunas construcciones, pero no puede considerarse como un libro de historia o de arqueolog¨ªa sino como una mezcla de cuaderno de viaje y relato cotidiano. Estrada Laza llevaba 25 a?os estudiando la aldea egipcia conocida como Deir-el-Medina, 'cuya existencia sali¨® a la luz, despu¨¦s de 3.000 a?os de olvido, a partir de las excavaciones de Bernard Bruy¨¦re'. Parte de la documentaci¨®n conseguida a lo largo de los a?os por este arquitecto fue chequeada, 'en la medida de lo posible, a pie de obra', asegura el escritor . 'El texto es una mezcla de los datos hist¨®ricos y de mis experiencias personales'.

Confesi¨®n

Estrada Laza, que hasta ahora en su curr¨ªculo s¨®lo inclu¨ªa art¨ªculos y separatas, se ha enfrentado a la p¨¢gina en blanco como 'si le hablara a un amigo y confes¨¢ndome con el ordenador'. Los obreros de la muerte son, en palabras de su autor, una especie de confesi¨®n personal y un homenaje a unos personajes an¨®nimos que contribuyeron a la gloria de una civilizaci¨®n. La medicina, las leyes, la estructura social, los alimentos, el erotismo y la muerte son algunos de los temas que se desarrollan ampliamente en este relato, que abarca desde 1550 a 1070 antes de Cristo, bajo el gobierno de dinast¨ªas como la de Rams¨¦s II o Seti I. 'Es un relato casi detectivesco en el que no faltan ni el amor ni los tesoros escondidos'.

El autor, que actualmente colabora en la conservaci¨®n y reconstrucci¨®n de una tumba en Meidum, situada junto a la pir¨¢mide del mismo nombre, ya prepara el que ser¨¢ su segundo libro, dedicado a la tem¨¢tica del arte egipcio.