El Gobierno regional proyecta adjudicar licencias de taxi a empresas privadas

El Gobierno presidido por Alberto Ruiz-Gallard¨®n ha redactado un proyecto de decreto del reglamento regional del taxi que permitir¨¢, por primera vez en Espa?a, la adjudicaci¨®n de licencias a sociedades mercantiles. De esta manera, el sector, que da trabajo directo a unos 16.000 aut¨®nomos y a unos 4.000 asalariados en la regi¨®n, ver¨¢ c¨®mo irrumpen en ¨¦l empresas mercantiles con cuentas de resultados, accionistas y balances de beneficios o p¨¦rdidas.

El proyecto, elaborado por la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, Urbanismo y Transportes, impide, no obstante, que estas firmas puedan disponer de m¨¢s de 15 licencias en la regi¨®n o el 10% de las existentes en cada municipio. Pero la Uni¨®n de Peque?os Transportistas (UPT-UGT) considera que 'es la puerta de entrada perfecta al sector para los grandes grupos econ¨®micos'. 'Si el reglamento se aprueba tal y como est¨¢ redactado, ser¨¢ el hundimiento definitivo de miles de familias trabajadoras que viven del taxi y que no podr¨¢n competir con los grandes grupos de presi¨®n, que se quedar¨¢n con las licencias', asegura el presidente de UPT-UGT de Madrid, Eduardo Arriaga.

Actualmente, el sector del taxi se rige por un real decreto de 1979 y por la Ley de Ordenaci¨®n de Transportes Urbanos de la Comunidad de Madrid de 1998, que impide que cada taxista pueda tener m¨¢s de un permiso de explotaci¨®n, aunque hay serias sospechas de que hay personas que poseen m¨¢s licencias a trav¨¦s de personas interpuestas.

Las licencias que otorga el Ayuntamiento permiten en este momento que cada profesional pueda contratar a otros conductores (los llamados asalariados) para que exploten su taxi a tiempo parcial. Pero no existen empresas privadas que tengan flotas de taxis tal y como dise?a el nuevo texto.

El art¨ªculo 10 del proyecto de decreto se?ala claramente que podr¨¢n optar a las licencias de taxi no s¨®lo, como hasta ahora, las 'personas f¨ªsicas', sino tambi¨¦n las 'personas jur¨ªdicas, debiendo revestir ¨¦stas la forma de sociedad mercantil, sociedad laboral o cooperativa de trabajo asociado'. Estas empresas podr¨¢n ser, adem¨¢s, extranjeras, siempre y cuando pertenezcan a pa¨ªses de la 'Uni¨®n Europea o de un Estado no miembro con el que, en virtud de lo dispuesto en los tratados o convenios internacionales suscritos por Espa?a, no sea exigible el requisito de nacionalidad'.

Las empresas que logren las licencias tendr¨¢n que contar, como m¨ªnimo, con el mismo n¨²mero de conductores que de coches.

Antonio Rivera, presidente nacional de Unitrans-UGT, mostr¨® ayer su indignaci¨®n ante un reglamento que permitir¨ªa la entrada de las empresas privadas en el sector. 'Ser¨¢ el fin para las miles de familias que viven del taxi en Madrid, comenzar¨¢ la desaparici¨®n del sector tal y como lo conocemos actualmente. Las empresas privadas no se conformar¨¢n con las 15 licencias que les concede como m¨¢ximo el reglamento, sino que crear¨¢n nuevas sociedades, con hombres de paja o entidades intermedias, para acaparar el mayor n¨²mero de permisos posible'.

'Los miembros de estas sociedades interpuestas', a?ade Rivera, 'que trabajar¨¢n para los grandes grupos de presi¨®n, nunca se repetir¨¢n en el accionariado de dos empresas, con lo que no vulnerar¨¢n el reglamento, aunque los due?os finales de todos estos entramados siempre ser¨¢n los mismos', vaticina.

Los representantes sindicales afirman que estas sociedades podr¨¢n comprar sin l¨ªmite todas las licencias que deseen, algo que no ocurre ahora entre los aut¨®nomos. Una licencia de taxi se vende aproximadamente por unos 12 millones de pesetas, el dinero justo que un aut¨®nomo puede pedir prestado a un banco o que puede tener ahorrado su familia. 'En cambio, una de esas sociedades con 1.000 o 2.000 millones de pesetas en el bolsillo podr¨¢ comprar todos los taxis que quiera', asegura Rivera.

El presidente nacional de Unitrans-UGT prosigue: 'El trabajo de los profesionales, con sus errores y aciertos, las horas de dedicaci¨®n, los esfuerzos de m¨¢s de 15.000 familias, se vendr¨¢n abajo ante este tipo de competencia. Las sociedades podr¨¢n contratar adem¨¢s a cuantos asalariados quieran para trabajar las 24 horas del d¨ªa, los 365 d¨ªas del a?o. Los aut¨®nomos, en cambio, no podr¨¢n hacer frente a esta competencia, porque su ¨²nico coche tiene que parar un d¨ªa a la semana obligatoriamente'.

Rivera pone un ejemplo: 'En Suecia, con un parque de 30.000 taxis, tambi¨¦n se liberaliz¨® el sector hace pocos a?os. Las grandes compa?¨ªas se quedaron con la mayor parte de las licencias. Cuando ya nadie les hac¨ªa la competencia, redujeron el parque de autotaxis a s¨®lo 5.000, porque no les era rentable mantener tantos coches en la calle. Eso es lo que suceder¨¢ en Madrid'.

Compatibilidades

El proyecto permite por primera vez el pluriempleo entre los taxistas. 'La titularidad de las licencias', dice el texto, 'ser¨¢ compatible con el ejercicio de cualquier otro trabajo o actividad comercial, mercantil o industrial, siempre que se acredite disponer del n¨²mero de conductores necesarios'. Actualmente est¨¢ prohibido el pluriempleo, aunque existe. El Ayuntamiento de Madrid, por ejemplo, no concede licencias si el taxista trabaja en una empresa o es funcionario.

'Es simplemente inadmisible que el reglamento intente legalizar el pluriempleo. ?C¨®mo se puede mantener la seguridad en los veh¨ªculos si el conductor, tras ocho o diez horas de trabajo en la EMT o dirigiendo el tr¨¢fico, inicia despu¨¦s otra jornada de las mismas o m¨¢s horas al frente de un taxi? ?Qui¨¦n va a velar por la seguridad de los pasajeros con un conductor que lleva ocho horas en su trabajo habitual y otras ocho o diez en un taxi?', se pregunta el presidente de UPT-UGT, Eduardo Arriaga.

'Este art¨ªculo', incide Arriaga, 's¨®lo busca reducir a su m¨ªnima expresi¨®n la capacitaci¨®n profesional de los conductores. De esta manera, las empresas que se introduzcan en el sector podr¨¢n contratar a cualquier persona, que aceptar¨¢ el trabajo como un simple complemento salarial. Se desplazar¨¢ as¨ª a los aut¨¦nticos profesionales, ya que ahora se exigen unos m¨ªnimos, y entrar¨¢n otras personas m¨¢s necesitadas y dispuestas a trabajar por cuatro perras. Lo que ahora es empleo fijo se convertir¨¢, sin ning¨²n tipo de dudas, en trabajo precario', concluyen los representantes de UGT.

Este sindicato exige que el proyecto de reglamento sea sometido a refer¨¦ndum entre los afectados. 'Si la Comunidad quiere saber qu¨¦ pensamos las 15.000 familias que vivimos de esto, que nos pregunte', propone.

Como norma general, el reglamento establece, adem¨¢s, que las ciudades de m¨¢s de 500.000 habitantes podr¨¢n conceder 3,5 licencias por cada 1.000 ciudadanos, mientras que en las localidades de menos de 100.000, s¨®lo podr¨¢ haber una licencia cada 2.000 personas. No obstante, los 'municipios podr¨¢n establecer un m¨®dulo o contingente espec¨ªfico, aun cuando del mismo resulte un n¨²mero de licencias superior al que corresponder¨ªa por la aplicaci¨®n del baremo general'. Si bien, seg¨²n el proyecto de reglamento, 'deber¨¢n acreditar la necesidad y conveniencia de aumentar el n¨²mero de licencias en relaci¨®n con la oferta y la demanda, as¨ª como justificar el umbral de rentabilidad m¨ªnima de explotaci¨®n'.

La Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas rehus¨® ayer hacer declaraciones. S¨®lo record¨® que el proyecto es un borrador y que es susceptible de ser modificado.