Badajoz dedica una gran retrospectiva al surrealismo portugu¨¦s con 170 obras
El proyecto de los museos MEIAC y Chiado se ver¨¢ posteriormente en Lisboa
Con una profunda vocaci¨®n ib¨¦rica desde su fundaci¨®n hace cinco a?os, el MEIAC de Badajoz ofrece hasta el 29 de abril m¨¢s de 170 obras portuguesas, sum¨¢ndose as¨ª a las frecuentes iniciativas de la Junta de Extremadura en el intercambio cultural de los dos pueblos peninsulares. En el museo del Chiado se expondr¨¢n a partir del 24 de mayo.
El director del MEIAC, Antonio Franco, y el del Chiado, Pedro Lapa, reconocieron que la exposici¨®n constituye 'la primera gran retrospectiva del surrealismo portugu¨¦s', un movimiento irreverente y pr¨¢cticamente desconocido en Espa?a, cuya muestra ha sido posible gracias a una enorme labor de investigaci¨®n y a la colaboraci¨®n de muchos de los artistas, cuyas obras han salido por primera vez de sus colecciones particulares para integrar esta exposici¨®n. Ant¨®nio Franco subraya que una muestra de esta 'extensi¨®n y naturaleza, producto de una minuciosa investigaci¨®n, constituye sin duda el proyecto m¨¢s amplio y profundo hasta ahora realizado sobre el surrealismo portugu¨¦s', algunas de cuyas obras tienen una evidente influencia daliniana.
Acercamiento
La coproducci¨®n de la exposici¨®n, a juicio de Franco, supone tambi¨¦n 'un ejemplo de una l¨ªnea coherente de trabajo entre Espa?a y Portugal y corresponde, por una parte, a la perseguida pol¨ªtica de internacionalizaci¨®n de la cultura portuguesa, y por otra, al cumplimiento del programa del MEIAC que incluye el efectivo acercamiento de los dos pa¨ªses'.
El nacimiento del citado movimiento est¨¢ marcado en 1934 con el primer cuadro surrealista de Ant¨®nio Pedro, Le crachat embelli, y finaliza en 1952 con las intervenciones del denominado grupo de Lisboa y los surrealistas portugueses que se iniciaron en 1947 y 1949. A pesar de las obras de Ant¨®nio Pedro, uno de los m¨¢ximos exponentes del movimiento, y de Ant¨®nio da Costa y C¨¢ndido Costa Pinto, el surrealismo portugu¨¦s irrumpi¨® con enorme fuerza a mediados de la d¨¦cada de los cuarenta enfrent¨¢ndose a las dos tendencias que dominaban el panorama art¨ªstico de Portugal: el modernismo academicista que impulsaba el r¨¦gimen salazarista y el neorrealismo, un movimiento fundamentalmente pol¨ªtico que se alej¨® de las tendencias puramente pl¨¢sticas.
Entre los autores expuestos se encuentran artistas y poetas (algunos de ellos utilizaron las dos disciplinas) de la talla de Fernando Azevedo, Jo?o Moniz Pereira, Marcelino Vespeira, el escultor Jorge Vieira, el fot¨®grafo Fernando Lemos, el dibujante Artur do Cruceiro Seixas o los poetas Alexandre O'Neill o M¨¢rio Cesariny.
Sue?o y deuda
La muestra est¨¢ dividida en dos grandes n¨²cleos: la introducci¨®n del movimiento entre 1934 y 1947 y su definitiva implantaci¨®n, siguiendo su resurgimiento internacional con el regreso de Breton del exilio americano.
El comisario del ¨¢rea literaria de la exposici¨®n, Perfecto Cuadrado, explic¨® que esta muestra constituye 'el pago parcial de una deuda y el cumplimiento de un sue?o'. No se puede entender el surrealismo portugu¨¦s, a su juicio, 'sin aproximarse a sus diversos lenguajes, fundamentalmente las artes pl¨¢sticas y la literatura que, en mi caso, me han ense?ado a ver, entender y compartir el mundo desde su ¨®ptica'.
La exposici¨®n presenta ejemplares de las obras de varios poetas y escritores del movimiento que, posteriormente, ejercieron una enorme influencia en las generaciones posteriores, no s¨®lo de los artistas portugueses sino de otras nacionalidades como las del italiano Antonio Tabucchi.
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