El Reino Unido comienza a enterrar miles de animales por la fiebre aftosa

Sin apelativo espec¨ªfico, la tarea ha empezado a denominarse Operaci¨®n Apocalipsis, porque el lugar ser¨¢ transformado en breve tambi¨¦n en matadero al aire libre. El autor de la oscura expresi¨®n que ha servido para calificar popularmente la misi¨®n es el general de brigada Alex Birtwistle, jefe de estas operaciones en el aer¨®dromo de Great Orton, en Cumbria. Si bien sus hombres no participar¨¢n en las matanzas sobre el terreno que se avecinan, ¨¦l supervis¨® desde primeras horas de la ma?ana de ayer la apertura de la zanja de 90 metros de largo, 5 metros de ancho y 4 metros de profundidad, donde se arrojar¨¢n unas 10.000 ovejas diarias.

A partir del mi¨¦rcoles, se espera que el cargamento aumente hasta 20.000 al d¨ªa para limpiar de una vez las tierras de los ganaderos con animales en descomposici¨®n que llevan d¨ªas muertos e incinerados, pero siguen al aire libre. Luego llegar¨¢ el ganado vivo destinado al sacrificio junto a la fosa, unas 250.000 cabezas, seg¨²n el Ministerio de Agricultura. En todos los casos, los animales ser¨¢n trasladados en camiones sellados y desinfectados a la ida y a la vuelta para no propagar la infecci¨®n. El propio hoyo recibir¨¢ a su vez cal viva.

Expertos de Medio Ambiente han asegurado que los acu¨ªferos m¨¢s cercanos no corren peligro de contaminarse con filtraciones de los restos descompuestos. A medida que aumenten las matanzas de animales sanos incluidos en un radio de 3 kil¨®metros de las granjas afectadas, Agricultura necesitar¨¢ m¨¢s hoyos en lugares apropiados.

Ayer tampoco estaba claro el futuro de los cerdos, cabras y reses afectados por la fiebre y ya sacrificados. Por culpa de la enfermedad de las vacas locas, el ganado bovino es incinerado para evitar contaminaciones y el Gobierno espera decidir en los pr¨®ximos d¨ªas el destino final de las cabezas muertas en las ¨²ltimas semanas.

Con los enterramientos en marcha, Nick Brown, ministro de Agricultura, viaj¨® ayer a Devon, al suroeste del pa¨ªs, y otra de las regiones m¨¢s atacadas por la fiebre. Recibido con frialdad, los ganaderos le criticaron abiertamente cuando confirm¨® que ser¨ªan sacrificados 'los reba?os de todo tipo' incluidos en los 3 kil¨®metros estipulados como zona de riesgo cercana a las granjas infectadas. 'Hay ya 617 focos de fiebre y hemos matado a m¨¢s animales que en la epidemia de 1967. Hay que controlar la enfermedad y emplearemos todos los medios para lograrlo', afirm¨®.

En la C¨¢mara de los Comunes, el l¨ªder laborista, Tony Blair, le replic¨® con igual contundencia al jefe de la oposici¨®n, William Hague, al decirle que rastrear el brote aftoso no es tan f¨¢cil como pudiera parecer. 'Es como hallar un resfriado com¨²n entre la poblaci¨®n, y hacemos todo lo posible para evitar retrasos', se?al¨®.

Seg¨²n los ganaderos, son precisamente las horas transcurridas entre el diagn¨®stico de la infecci¨®n, la muerte del animal y su destrucci¨®n las que han contribuido a la extensi¨®n de la epidemia en las ¨²ltimas semanas.

Por otra parte, los an¨¢lisis efectuados por los t¨¦cnicos del Departamento de Agricultura de la Generalitat a los 569 cerdos procedentes de Holanda inmovilizados el pasado 21 de marzo en el Pla de l'Urgell (Lleida) y en el Pla de l'Estany (Girona), para averiguar si hab¨ªan contra¨ªdo la fiebre aftosa, han resultado negativos. Tras estos resultados, el Departamento de Agricultura ha levantado la inmovilizaci¨®n de dichos animales.