Camino hacia la paz
Si en el conflicto zapatista la imagen ha representado un factor importante, todo o casi todo lo dice la fotograf¨ªa que muestra a los comandantes del EZLN, hombres y mujeres, con el rostro cubierto y los atav¨ªos de su respectiva etnia, desfilando en silencio por el pasillo que los conducir¨ªa a la m¨¢s alta tribuna del pa¨ªs. Contra el temor a insultos e imprecaciones, el discurso pausado y persuasivo; la invitaci¨®n a ser escuchados y la disposici¨®n para escuchar.
A las se?ales de paz, que reconocen, la respuesta de paz, materializada en la orden a sus subordinados, Marcos en primer lugar, para que as¨ª sea. La puerta al di¨¢logo 'se ha abierto', dir¨ªa la comandante Esther, y explic¨® la ausencia del subcomandante: 'Nosotros somos los comandantes, los que mandamos en com¨²n, los que mandamos obedeciendo a nuestros pueblos... Ahora es nuestra hora'. El tiempo de los ind¨ªgenas, en efecto, lleg¨® ayer y qued¨® plasmado para la historia, con su llegada al recinto parlamentario, desde el cual se proyect¨® la posibilidad cierta del di¨¢logo, lejana desde cuando en noviembre de 1996 fueron firmados los Acuerdos de San Andr¨¦s Larrainzar. El contacto comienza ya, entre el comandante Germ¨¢n y el comisionado para la paz, Luis H. ?lvarez. Las armas zapatistas no colmar¨¢n el vac¨ªo dejado por las del Ej¨¦rcito mexicano en su repliegue. (...)
La imagen de esa entrada al recinto parlamentario, ansiada por quienes quieren la paz, queda ah¨ª como testimonio de un paso importante. (...)
M¨¦xico DF, 29 de marzo
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