Autoridades y ONG se muestran impotentes para controlar a los menores inmigrantes en Canarias
Aumentan las denuncias por reyertas, agresiones sexuales y fugas de los centros de acogida
A primeros de mes el juzgado de Las Palmas recibi¨® una denuncia ins¨®lita: tres polic¨ªas nacionales afirmaban haber sido agredidos cuando intentaban sofocar una pelea en el centro de acogida de menores de La Monta?eta. La direcci¨®n del lugar hab¨ªa requerido su ayuda ante la impotencia de los educadores para impedir que un grupo de marroqu¨ªes linchara a un saharaui.
Cuando lograron poner fin al tumulto los agentes intervinieron varios trozos de hach¨ªs, una pistola de balines, dos cuchillos y cuatro porras de fabricaci¨®n casera: estacas cuyo extremo hab¨ªa sido envuelto en papel de lija y atravesado por decenas de clavos. Adem¨¢s, el d¨ªa 4 una educadora denunci¨® haber sido agredida por cuatro chicos mientras esperaba el autob¨²s para volver a su domicilio.
En La Monta?eta est¨¢n tres de los siete centros de acogida de menores inmigrantes que existen en el archipi¨¦lago. Entre todos suman 110 plazas: 60 en Gran Canaria, 30 en Fuerteventura, 10 en Lanzarote y 10 en Tenerife. Dependen del Cabildo de la isla, que ha encargado su gesti¨®n a la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (CEAR).
Pero el personal de esta prestigiosa ONG est¨¢ desbordado por las situaciones en las que le colocan con frecuencia algunos de los 60 muchachos marroqu¨ªes, saharauis y subsaharianos que viven all¨ª. Sus responsables han pedido la repatriaci¨®n de 23 de ellos. Consideran que su integraci¨®n es pr¨¢cticamente imposible y perjudica la de sus 32 compa?eros, que se quejan de que por su culpa los 'miran mal por la calle'. Adem¨¢s de al consumo de hach¨ªs, algunos de los revoltosos son adictos a pegamentos y disolventes, que inhalan.
M¨¢s repatriaciones
El consejero de Asuntos Sociales del Cabildo, Mario Hern¨¢ndez Sangin¨¦s, ha declarado al diario Canarias 7 que ha denunciado 'por escrito' esta situaci¨®n al Gobierno aut¨®nomo en 290 ocasiones. Sus quejas han sido atendidas por el consejero de Asuntos Sociales, Marcial Morales, que ha respondido con varias medidas, entre ellas el fomento de la pol¨ªtica de 'reagrupamiento' de los adolescentes con sus familiares en ?frica. Frente a los diez repatriados a lo largo de todo el 2000, en lo que va de a?o ya han sido devueltos a Marruecos seis menores. Pero el proceso es complicado.
La ley establece que el Ejecutivo aut¨®nomo, que tiene la tutela de los muchachos, ha de localizar a sus familiares. Despu¨¦s debe dirigirse a la Delegaci¨®n del Gobierno para que ejecute el procedimiento. El mes pasado fueron devueltos cuatro del centro de Puerto del Rosario, gestionado tambi¨¦n por CEAR. Atemorizados por la posibilidad de ser los siguientes, sus 24 compa?eros se dieron a la fuga. 18 de ellos a¨²n est¨¢n en paradero desconocido. Entonces CEAR, la misma organizaci¨®n que denuncia la situaci¨®n de La Monta?eta, protest¨® por la actuaci¨®n policial. La repatriaci¨®n presenta un problema a?adido: s¨®lo es posible devolver a los llegados de Marruecos. Desde su toma de posesi¨®n, hace ya m¨¢s de un a?o, el delegado del Gobierno para la Extranjer¨ªa, Enrique Fern¨¢ndez-Miranda, no ha logrado firmar un solo convenio con ning¨²n pa¨ªs de ?frica.
La actitud de la sociedad hacia el 'reagrupamiento familiar' es adem¨¢s contradictoria. La firma de una profesora que hace un a?o exigi¨® al Ejecutivo canario: 'Tienen ustedes que echar de aqu¨ª a estos moros', acaba de aparecer al pie de un documento en contra de la repatriaci¨®n. 'Se trata de un problema complejo', analiza Morales.
'No estamos hablando de ni?os como los entendemos en nuestra sociedad, sino de chicos de la calle, a los que su lucha por sobrevivir ha hecho mucho m¨¢s avispados. La diferencia entre ellos y los espa?oles es la misma que hab¨ªa hace treinta a?os entre los espa?oles, que ten¨ªan que buscarse el pan, y los franceses, que lo ten¨ªan garantizado'. Aplicar una pol¨ªtica que permita ayudarles sin alarmar a la sociedad es tarea para equilibristas.
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