Mujeres en la campa?a de Ir¨¢n

Vestida con un tradicional y riguroso chador negro, pero con una rosa roja en la mano, Farah Josravi se convirti¨® ayer en la primera mujer que presenta su candidatura a la presidencia de Ir¨¢n desde la revoluci¨®n isl¨¢mica de 1979. Soltera y representante de la asociaci¨®n Ir¨¢n-e-Fard¨¢, conocida por su cercan¨ªa a c¨ªrculos conservadores, esta mujer de 47 a?os no fue la ¨²nica que intentar¨¢ romper la hegemon¨ªa masculina en las elecciones presidenciales previstas para el 8 de junio.

Turan Jamili, una periodista de 56 a?os, tambi¨¦n logr¨® que su candidatura fuese aceptada, mientras que otras dos mujeres, Masumeh Yavari y Aghdass Modarese-Fathi -que reclama el derecho a vestir 'chadores de colores'-, lo intentaron, pero sus solicitudes fueron rechazadas por problemas administrativos, seg¨²n informaron fuentes del Ministerio del Interior iran¨ª.

'La ley no es clara, pero espero que el Consejo de Vigilancia Electoral me acepte', asegur¨® Josravi a los periodistas congregados ayer ante el Ministerio del Interior, en Teher¨¢n, el d¨ªa en que se abrieron las candidaturas a los comicios presidenciales. La legislaci¨®n electoral iran¨ª mantiene que los candidatos deben ser rejal (personalidades eminentes) y, aunque no est¨¦ escrito negro sobre blanco, da por hecho que ser¨¢n de sexo masculino. 'Todo candidato debe ser una personalidad eminente pol¨ªtica o religiosa, de origen iran¨ª, de la religi¨®n oficial del Estado [islam] y fiel a los fundamentos de la Rep¨²blica Isl¨¢mica', asegura el texto legal, cuya aplicaci¨®n est¨¢ en manos del Consejo de Vigilancia, formado por seis religiosos y seis juristas, que deber¨¢ publicar la lista de los presidenciables antes del 17 de mayo.

'El presidente Mohamed Jatam¨ª no ha cumplido sus promesas. No ha sido capaz de bajar el paro, no ha logrado controlar la inflaci¨®n. Ha tenido el comportamiento de un hombre fr¨¢gil', dijo Josravi. 'Si vuelve a presentarse, ni siquiera llegar¨¢ a los ocho millones de votos', frente a los 20 millones que logr¨® en mayo de 1997, cuando fue elegido el actual presidente de Ir¨¢n, un religioso que ha lanzado un amplio programa de reformas enfrent¨¢ndose a los poderosos sectores conservadores del pa¨ªs.

Entre los 67 candidatos que se presentaron ayer no figuraba Jatam¨ª, que todav¨ªa no ha confirmado p¨²blicamente si optar¨¢ a un segundo mandato. Enfrentado a un asalto conservador, con sus principales aliados destituidos, los peri¨®dicos reformistas sometidos a una presi¨®n constante o directamente cerrados y con batidas policiales continuas entre los reformistas, Jatam¨ª, de 58 a?os, mantiene que la presidencia carece del poder suficiente para reformar el pa¨ªs.

Nadie duda en medios pol¨ªticos iran¨ªes de que Jatam¨ª lograr¨¢ la victoria si es candidato, aunque necesitar¨¢ un ampl¨ªsimo margen para continuar con su programa reformista. Con los tribunales y la poderosa polic¨ªa pol¨ªtica controlados por los conservadores pr¨®ximos al l¨ªder supremo del pa¨ªs, el ayatol¨¢ Al¨ª Jamenei, la ¨²nica arma de Jatam¨ª es el apoyo popular.

Las candidaturas se cierran el domingo, y los c¨ªrculos pr¨®ximos al presidente creen que se presentar¨¢ a la reelecci¨®n, aunque es posible que mantenga el suspense hasta el final. Si las candidaturas de Farah Josravi y Turan Jamili son finalmente aceptadas, aunque sus posibilidades de victoria son nulas, se habr¨¢ dado un paso m¨¢s en el dif¨ªcil camino hacia la reforma en Ir¨¢n.