En defensa de James Agee

La interesante colecci¨®n La Memoria del Cine, que incluye buenos textos de Fellini, Truffaut, Dreyer, Rohmer, Rossellini, Kazan y Scorsese, de momento se cierra con una aburrida selecci¨®n de cr¨ªticas de James Agee (1909-1955). Menos conocido que los anteriores, firma los guiones de La reina de ?frica (1951), de John Huston, y La noche del cazador (1955), de Charles Laughton; tambi¨¦n publica dos novelas, un libro de poemas y otro de reportajes. Adem¨¢s, entre noviembre de 1941 y septiembre de 1948 desarrolla una fruct¨ªfera colaboraci¨®n como personal cr¨ªtico cinematogr¨¢fico en el peri¨®dico de izquierdas The Nation.

El volumen Escritos sobre cine, publicado a principios de 2001, incluye una discutible selecci¨®n de sus cr¨ªticas, editadas en su totalidad en ingl¨¦s en 1983. Al dedicarlo en especial a las pel¨ªculas de guerra da una idea bastante equivocada y tendenciosa de la labor de Agee como prestigioso cr¨ªtico. El hecho de que la mayor¨ªa de las pel¨ªculas s¨®lo se citen por el t¨ªtulo original, y no con el que circulan habitualmente por televisi¨®n, y la falta de cualquier tipo de ¨ªndice dificultan el inter¨¦s de un volumen que en ning¨²n caso puede leerse como una novela.

En una carta mucho m¨¢s larga que mi breve rese?a sobre este libro, publicada en El Espectador, Elisenda Julibert, del Departamento de Promoci¨®n y Prensa de Editorial Paid¨®s Ib¨¦rica, SA, trata de justificar lo injustificable. Es decir, la inclusi¨®n de una mayor¨ªa de cr¨ªticas de pel¨ªculas de guerra, citarlas por el t¨ªtulo original y la carencia de ¨ªndices, mal que padecen la mayor¨ªa de los libros de no ficci¨®n nacionales, sean de cine o no. Sin embargo, creo que el libro hace un flaco servicio a la memoria de James Agee y al lector que intente leerlo para conocerlo.-