?Qui¨¦n controla al inspector de Hacienda?

El empresario inmobiliario Baltasar Aznar tiene declarado al juzgado que en 1998 su empresa, Metro 3, estaba siendo investigada por el inspector fiscal ?lvaro Pernas y que un ex compa?ero de ¨¦ste, Enrique Viola, le dijo que lo suyo se pod¨ªa arreglar con 40 o 50 millones. 'Viola', manifest¨® el empresario, 'insisti¨® en que me conven¨ªa aceptar su propuesta, porque si no las consecuencias podr¨ªan ser peores, ya que las inspecciones tributarias se sab¨ªa c¨®mo empezaban pero no c¨®mo acababan. Tambi¨¦n insisti¨® en que el precio pod¨ªa rebajarse'.

Pernas, ex inspector jefe de unidad, est¨¢ en prisi¨®n preventiva desde enero, tras comprobar la juez Elisabet Castell¨® que intent¨® colocar parte de su patrimonio en el extranjero. Tambi¨¦n se le descubri¨® un zulo en el que escond¨ªa expedientes originales que afectaban a contribuyentes.

Los 850 agentes que fiscalizan los tributos tratan de superar el trauma de los casos de corrupci¨®n descubiertos en Catalu?a, Madrid o Baleares

Sucesi¨®n de esc¨¢ndalos

La sucesi¨®n de esc¨¢ndalos relacionados con inspectores fiscales ha sido constante. Hay seis inspectores y cargos de Hacienda investigados en Barcelona en estos momentos. La llamada trama de Barcelona estall¨® en 1999, cuando el ex abogado del Grupo Torras y de Javier de la Rosa Juan Jos¨¦ Folchi declar¨® en la Corte de Londres y en la Audiencia Nacional que el ex delegado de la Agencia Tributaria de Catalu?a Ernesto Aguiar y el ex jefe regional de Inspecci¨®n Josep Maria Huguet recib¨ªan cantidades millonarias en Suiza por realizar trabajos para De la Rosa, algo que ellos niegan.

Los inspectores de Hacienda son funcionarios de ¨¦lite. Un colectivo de 870 inspectores que vigilan el comportamiento fiscal de los contribuyentes. Un inspector de Hacienda cobra una media de 9,5 millones al a?o; de ellos, 1,6 millones son retribuciones que dependen de distintas variables; s¨®lo una de las ocho variables depende de la cantidad de fraude aflorada por su actividad. En otras palabras, no existe una relaci¨®n directa entre salario y afloramiento de fraude.

El caso de Barcelona fue casi un trauma para la mayor¨ªa de los inspectores. Produjo un efecto desmoralizador que la Agencia Tributaria resolvi¨® actuando con rapidez. El 16 de diciembre de 1998 Hacienda ya hab¨ªa iniciado la revisi¨®n de los trabajos de algunos inspectores, y en julio del a?o siguiente entreg¨® sus conclusiones a la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, que acab¨® felicitando al director de la Agencia Tributaria por la colaboraci¨®n.

'Lo que se produjo con Huguet y Aguiar en Barcelona es casi imposible que pueda reproducirse de nuevo', afirman fuentes oficiales de la Agencia Tributaria. Adem¨¢s, seg¨²n Hacienda, se han reforzado los controles. Ahora la inclusi¨®n de contribuyentes en planes de inspecci¨®n debe justificarse adecuadamente, lo mismo que sacar a un contribuyente del plan de inspecci¨®n.

El caso de Barcelona contaba con la cobertura de Josep Maria Huguet, que hasta 1994 fue jefe de Inspecci¨®n en Catalu?a. Huguet ten¨ªa a su favor cuatro cosas: el ¨¦xito recaudador de su oficina, su prestigio de celoso cumplidor de las normas fiscales (se le consideraba un talib¨¢n), su ascendiente con Josep Borrell, ex secretario de Estado de Hacienda, y su aireado ¨¦xito como inversor en Bolsa, lo que justificaba aparentemente determinadas actitudes vitales.

El 8 de marzo de 2000, la fiscal Teresa G¨¢lvez present¨® una querella contra ocho funcionarios en activo o excedencia de la Agencia Tributaria. La querella afirma que no fueron 'comportamientos aislados, sino conductas presumiblemente concertadas'.

Los imputados -adem¨¢s de algunos empresarios como Eduardo Bueno o Josep Llu¨ªs N¨²?ez Navarro y de algunos asesores de empresas- fueron Jos¨¦ Mar¨ªa Huguet y su esposa Rosa Guasch, Ernesto Aguiar, Manuel Abella, ?lvaro Pernas, Juan Jos¨¦ Lucas Carrasco y su esposa Mayra Mas, Jos¨¦ Ram¨®n Morat¨®, Roger Bergua y el corredor de comercio Enrique Viola. Los que estaban en activo fueron suspendidos de empleo y sueldo, excepto Jos¨¦ Ram¨®n Morat¨®.

El enriquecimiento m¨¢s llamativo es el de los m¨¢ximos jefes: Ernesto Aguiar y Josep Maria Huguet. Huguet ten¨ªa cuenta en la Banque Paribas de Suiza con ingresos de 247 millones. Aguiar la ten¨ªa en la misma entidad con movimientos desde 1990 e ingresos en francos suizos, d¨®lares y marcos. Los dos atribuyen estos ingresos a fabulosas ganancias en Bolsa. ?Pero es normal que un inspector tenga cuentas en Suiza?

Los acusados ten¨ªan fondos que gestionaban en com¨²n. Pernas lleg¨® a decirle a un joven inspector que hab¨ªa invertido en su club de Bolsa y le ped¨ªa datos para declarar sus plusval¨ªas. '?Chico, tendr¨¢s que decidir si quieres ser rico o bur¨®crata!'.

Tratos irregulares

Seg¨²n Anticorrupci¨®n, la supuesta trama de Barcelona ofreci¨® durante a?os al Grupo N¨²?ez y Navarro un 'trato fiscal irregular'. Todo ello, presume la fiscal¨ªa, a cambio de 'contraprestaciones' del Grupo N¨²?ez, que ha negado haber favorecido a los inspectores vendi¨¦ndoles pisos a precios m¨¢s baratos. Algunos inspectores como Manuel Abella compraban pisos de lujo a N¨²?ez mientras levantaban actas de sus empresas, obteniendo presuntamente trato de favor y recomendaciones ante cajas de ahorros.

Roger Bergua, inspector regional adjunto, compr¨® otro piso residencial a N¨²?ez. Otro inspector, Jos¨¦ Lucas Carrasco, estaba comercialmente asociado al Grupo N¨²?ez y Navarro, que le vendi¨® no menos de 22 fincas. Lucas es titular de la sociedad LML, junto a su esposa, la ex subinspectora Mayra Mas, que, a pesar de no tener la m¨¢s m¨ªnima infraestructura, facturaba al Grupo N¨²?ez por m¨¢s de cien millones. Lucas ten¨ªa cuenta en el Cr¨¦dit Suisse de Ginebra.

Pero los esc¨¢ndalos en Barcelona no han sido los ¨²nicos. A finales de 1999 se descubri¨® en Madrid una red de extorsi¨®n que operaba desde la Unidad de Estudios Econ¨®micos y Sectoriales. Hacienda actu¨® con dureza disolviendo esta unidad y expedientando a varios inspectores, entre ellos a Mariano Navarro Rubio, hijo del que fuera ministro franquista de Hacienda. La unidad utiliz¨® datos de la Agencia para extornionar a empresarios como Juan Abell¨®. ?Nadie sab¨ªa en Hacienda que Navarro Rubio ten¨ªa 10 ¨®rdenes de busca y captura?

En Baleares se ha repetido el espect¨¢culo. Hacienda ha sancionado a dos inspectores con suspensi¨®n de empleo y sueldo: a Sebasti¨¢n Ca?ellas, por incompatibilidades, y a Javier Salvador Milla, por forzar contratos de empresas a favor de la firma de seguridad de su esposa. Se da la circunstancia de que Milla fue compa?ero de bachillerato de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.