Protocolos asesinos

Si algo le sobra al Metro, son bocas, como es l¨®gico. Sin embargo, a¨²n no ha dicho esta boca es m¨ªa con relaci¨®n a la muerte de Javier Echevarr¨ªa, el cr¨ªo de 19 a?os al que un directivo de la empresa orden¨® rematar porque se hab¨ªa desmayado.

-No somos monjas de la caridad. Y si es un drogata, que le den por el culo -dijo sin conmoverse un ¨¢pice cuando dos vigilantes le pidieron que avisara al Samur.

Se pregunta uno si en el Metro hay director de recursos humanos o algo semejante. Y, si lo hay, d¨®nde estaba el d¨ªa en el que nombraron jefe de seguridad a esa perla que produce tanta inseguridad. Uno cre¨ªa que el problema del metro eran los carteristas, pero los carteristas s¨®lo te roban la cartera, mientas que sus directivos te arrebatan la vida.

-Hijo, no te desmayes en el metro, que los servicios de seguridad son muy dados a darte el tiro de gracia -dir¨¢n con toda la raz¨®n los padres a sus hijos adolescentes.

Quienes hayan sufrido en su vida alguna lipotimia se habr¨¢n quedado especialmente espantados ante la noticia. Personalmente, ayer mismo intent¨¦ coger el metro en Tribunal y a medio camino regres¨¦ corriendo a la superficie. Hab¨ªa empezado a sentir ahogos y me dio miedo que alg¨²n directivo ordenara que me dieran por el culo. Qu¨¦ f¨®rmula tan rara por otra parte, ?no? 'Sacadle a la calle; no somos monjas de la caridad, y si es un drogata, que le den por el culo'.

Se pregunta uno si el directivo del metro sac¨® esta pieza verbal del protocolo marcado para este tipo de incidencias. El protocolo es muy importante cuando se carece de sentido com¨²n:

-Oye, que tenemos a un chico agonizando en Lista.

-Espera un momento, que voy a ver qu¨¦ dice el protocolo.

En el hospital universitario de Getafe tienen un protocolo que a Francisco Manuel Casas no le sirvi¨® de nada. Muri¨® once horas despu¨¦s de que le dieran el alta, tras haber sido golpeado en la cabeza con un bate de b¨¦isbol. Los amigos de Francisco Manuel dicen que el m¨¦dico s¨®lo lo tuvo en observaci¨®n durante 20 minutos y que no fueron capaces ni de raparle la cabeza, que es lo normal, en la zona donde presentaba la brecha. Fuentes del hospital aseguran que se sigui¨® el protocolo. Uno no ha tenido oportunidad de leer el protocolo del hospital universitario de Getafe, pero uno sabe que cuando un paciente presenta un golpe de esa naturaleza en la cabeza el sentido com¨²n dice que ha de permanecer internado y en observaci¨®n durante 24 horas, por si las moscas. Los amigos del muerto tampoco entienden por qu¨¦ la polic¨ªa no detuvo a los autores de la paliza, a quienes s¨ª tom¨® la filiaci¨®n. La polic¨ªa asegura que los agentes no pueden detener a una persona si los involucrados en la pelea no han presentado una denuncia en la comisar¨ªa.

Si es eso lo que dice el protocolo de la polic¨ªa de Getafe, hay que cambiar de protocolo a cien por hora. Un muerto no puede, por definici¨®n, presentar denuncia alguna. Pese a ello, la polic¨ªa debe detener al agresor. Los protocolos no pueden estar por encima del sentido com¨²n. De hecho, a pesar de tantas formalidades, empieza a dar miedo salir a la calle, no ya porque te pueden dar con un protocolo en la cabeza, sino porque luego no llama nadie a tu familia. Es lo que le pas¨® a Jos¨¦ Luis S¨¢nchez, un disminuido ps¨ªquico que perdi¨® la vida en la carretera de Valencia y cuya familia no fue avisada por Interior hasta un a?o m¨¢s tarde. Y no es que fuera indocumentado ni nada parecido, sino que la burocracia es como es. La familia de Jos¨¦ Luis se pas¨® medio a?o recorriendo Espa?a y colocando carteles por todas las paredes con la angustia que cabe suponer. Luego demandaron a Interior para resarcirse de los da?os materiales y ps¨ªquicos, pero Mayor Oreja, a la saz¨®n ministro de la porra, respondi¨® que no estaba 'acreditado ni justificado' que los padres hubieran sufrido da?o ps¨ªquico.

No es que el ministro del Interior se hubiera vuelto loco; es que aplic¨® el protocolo para no tener que pagar los cinco millones que ped¨ªa la familia de la v¨ªctima. La aplicaci¨®n indiscriminada y cruel del protocolo produce, como vemos, trastornos graves por doquier. Aconsejamos que los protocolos sean sustituidos de inmediato por el sentido com¨²n o que, en su defecto, se redacten de nuevo. Y que en el del Metro quiten esa frase horrible: 'Sacadle a la calle; no somos monjas de la caridad, y si es un drogata, que le den por el culo'. Gracias.