Un gol que vale por 480

Sergio y Alejandro, los dos porteros del Gredos San Diego C, hab¨ªan recogido 480 veces el bal¨®n del fondo de la red de la meta que defienden y nunca, hasta el pasado d¨ªa 19, pudieron experimentar la alegr¨ªa de un gol de su equipo, que participa en la competici¨®n benjam¨ªn de f¨²tbol federado de Madrid para ni?os de ocho y nueve a?os. Enrique, uno de los delanteros, fue quien abri¨®, tras 22 partidos y ocho meses de espera, la cuenta goleadora de este equipo del barrio de Entrev¨ªas. Era un gol que val¨ªa m¨¢s que los 480 recibidos, y Enrique lo cuenta con entusiasmo: 'Intent¨¦ regatear al portero, pero el bal¨®n rebot¨® en su cuerpo y tuve que recuperarlo. Volv¨ª a regatear y desde fuera del ¨¢rea tir¨¦ hacia un poste, dio en ¨¦l y se meti¨® dentro'.

El Gredos perd¨ªa en ese momento (6-0) ante el Santa Eugenia y ya se hab¨ªa cumplido el tiempo reglamentario. Se hizo el saque de centro y se acab¨® el partido. Sin embargo, el alborozo por el primer gol de Liga del Gredos C fue de los que hace historia. 'Parec¨ªa que hab¨ªan ganado la Copa de Europa', dice ?scar P¨¦rez, el entrenador, al que secunda su ayudante, Ra¨²l Collados: 'Fue como si les diesen la victoria, y es que el hecho de no marcar en ning¨²n partido era lo que les derrotaba; mucho m¨¢s que el recibir tantos goles'.

Los chavales tambi¨¦n recuerdan el momento de la celebraci¨®n, y el goleador, Enrique, comenta que recibi¨® 'muchos abrazos'. 'Todos nos choc¨¢bamos las manos y mis compa?eros me dec¨ªan OK con los dedos', cuenta.

Como el Gredos San Diego C hay otros 2.500 equipos federados en Madrid, desde benjamines hasta aficionados, que disputan cada fin de semana su partido en una Liga que comienza en septiembre u octubre, seg¨²n los casos, y que finaliza ahora, entre finales de mayo y principios de junio. Es el vivero de los futbolistas de Madrid y de ah¨ª salen las estrellas que ahora triunfan en Primera en equipos de la Comunidad, como Ra¨²l, Guti o Casillas, del Real Madrid, y M¨ªchel, del Rayo Vallecano, o en equipos de fuera como T¨¦llez, del Alav¨¦s.

No es normal que un equipo est¨¦ a punto de acumular 500 goles en contra. Faltan dos jornadas y la media anotadora de sus rivales conduce a ese guarismo. Lo habitual es que los peor clasificados lleguen a los 250 goles. En la presente temporada, s¨®lo hay 16 equipos m¨¢s que han recibido m¨¢s de 200 tantos, y de ellos ¨²nicamente un cadete, el Miraflor B, ha superado en 77 los 300. El siguiente equipo m¨¢s goleado es otro cadete, el Uni¨®n Dehesa B, que acab¨® la Liga con 268.

Lo que tampoco es normal es que no se consiga hacer un solo gol, pero los entrenadores del Gredos C argumentan con contundencia el caso especial de su equipo: 'Son todos jugadores de primer a?o que se enfrentan a ni?os mayores que ellos; adem¨¢s, vienen del f¨²tbol sala y no hab¨ªan jugado nunca al f¨²tbol-11', dice P¨¦rez, quien a?ade: 'En el colegio Gredos se tiene por costumbre dar salida a todas las aspiraciones deportivas de sus alumnos: si vienen 40 ni?os que quieren jugar se hacen cuatro equipos, si vienen 30 se hacen tres... Nadie se queda sin jugar y eso es muy importante'.

A todas estas razones, Emilio Abad, que entrena al Gredos B, a?ade el esp¨ªritu competitivo con el que acuden algunos de los rivales: 'Muchos entrenadores de otros equipos aprovechan el partido contra el Gredos C para romper r¨¦cords goleadores y no para que toquen el bal¨®n y aprendan cada d¨ªa algo m¨¢s. Incluso han hecho que su portero salga de su marco para que busque la posibilidad de hacer tambi¨¦n alg¨²n gol'. Abad est¨¢ en contra de esa filosof¨ªa y apoya la del Gredos: 'No apostar por la competitividad y s¨ª por la formaci¨®n del ni?o en el deporte que ¨¦l elija'.

Pero lo que no puede ning¨²n contrario es acabar con la moral de los chavales del Gredos C. Han ca¨ªdo en 22 partidos, y en alguno, como ante el Rayo Vallecano, han recibido m¨¢s goles que minutos de partido, 41 tantos en 40 minutos. 'No pasa nada, no nos desanimamos', dice Enrique, el goleador. V¨ªctor, otro jugador, sigue las premisas de su entrenador: 'No debemos tener miedo y tenemos que meter el pie cuando ataque un jugador del otro equipo'. Y es que para levantar el ¨¢nimo, P¨¦rez, el entrenador, tiene mucha mano y desde el primer entrenamiento de esta semana ha apodado a Enrique como el pichichi, lo que ha hecho que el resto de la plantilla se pique y quiera marcar en el pr¨®ximo partido. 'Ahora lo ven hasta f¨¢cil', apunta P¨¦rez, que resalta el otro frente moral del equipo: las madres. 'Aguantan cada s¨¢bado la goleada y acuden los martes y jueves al entrenamiento con la misma ilusi¨®n del primer y d¨ªa'.

As¨ª lo ratifica la madre de Enrique: 'Nos ten¨ªan que dar un premio por el esfuerzo que hacemos por mantener la afici¨®n de nuestros hijos'. Pero para premio el que hay dar a Sergio y Alejandro, los porteros, que aguantan el chaparr¨®n de malos modos de sus compa?eros cada vez que les meten un gol. Su entrenador est¨¢ seguro de que cumplen a la perfecci¨®n con su trabajo y les da la raz¨®n cuando 'replican que, si no fuera por ellos, le habr¨ªan hecho m¨¢s goles al equipo'.

El Gredos C volvi¨® a jugar ayer. Encaj¨® 17 goles, pero seguro que sus jugadores no han perdido la moral que exhiben y que supera a la del m¨ªtico Alcoyano, aquel equipo cuyos jugadores ped¨ªan al ¨¢rbitro que parase el reloj en las interrupciones cuando iban perdiendo 7-0.