A las puertas del Instituto Europeo de Ombudsman
P. Nunca ocult¨® que le apetec¨ªa repetir si hab¨ªa consenso. ?Tanto le llena la instituci¨®n?
R. Entiendo que es un proyecto para dos legislaturas. Primero nos hemos esforzado en divulgar la instituci¨®n y hemos intentado romper esa figura del defensor por encima del bien y del mal, quiero una instituci¨®n implicada en la lucha diaria de la gente. Este puede ser el punto de equidistancia con instituciones similares. En muchos temas somos un referente para otras instituciones. Aunque yo vaya de humilde eso hay que decirlo.
P. Consolidada la oficina, ?cu¨¢l ser¨ªa el nuevo objetivo?
R. Me gustar¨ªa profundizar en la idea de mediador y ganar presencia en el Parlamento. Hay otro objetivo que no me preocupa tanto, que es la dimensi¨®n m¨¢s internacional -y eso no quiero decir que quiera viajar, ojo-, hay una propuesta para que ocupe una vocal¨ªa en el Instituto Europeo de Ombudsman. No tengo ambiciones internacionales, pero los temas que tratamos van bien como punto de reflexi¨®n a otras instituciones.
P. ?Qu¨¦ problemas se han encarrilado en los cinco a?os?
R. El de la salud mental era un tema encarrilado que se ha desencarrilado otra vez. Al salario social se le dio un impulso desde la instituci¨®n y se lleg¨® al punto cero, pero este a?o ya tiene d¨¦ficits un poco preocupantes.
P. ?Coincide con la petici¨®n de IU para que los inmigrantes tengan derecho al salario social?
R. S¨ª, me parece una petici¨®n correcta. Estamos abiertos a los cambios en el salario social, no tendr¨ªa inconveniente en que la poblaci¨®n inmigrante pudiera acceder, pero s¨¦ que es cuesti¨®n de qu¨¦ fondos p¨²blicos existen.
P. Tiene una especial sensibilidad hacia los presos. ?Por alguna raz¨®n?
R. Me he dedicado siempre a ayudar a toxic¨®manos. El 80% de ellos est¨¢n en prisi¨®n. Conozco las c¨¢rceles mejor que mi casa.
P. Las c¨¢rceles ?reinsertan o enganchan m¨¢s?
R. No quiero caer en el populismo: hay gente que ha salvado la vida gracias a la c¨¢rcel y gente que se ha buscado la ruina para siempre. Las prisiones tienen que tener m¨®dulos que funcionen como comunidades terap¨¦uticas y no olvidar que es mejor que se cumpla la condena en una comunidad que en una prisi¨®n. Con la metadona no hemos solucionado mucho y con los programas de disminuci¨®n del da?o, que apoyo, que no se olviden los libres de droga. Hay mucha gente que se est¨¢ rehabilitando en Andaluc¨ªa. Me preocupa que llegue ese mensaje de que es imposible salir de la droga, eso no es verdad.
P. ?Es partidario de que se dispense droga en la prisi¨®n?
R. Los programas que est¨¢n en la calle tienen que estar en la c¨¢rcel. Me parece bien, pero estas cosas hay que hacerlas razonablemente, debe ser un programa m¨¢s.
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