La interminable escalada de Freire
El clicista del Mapei se recupera en Barcelona de una lesi¨®n que arrastra desde hace dos a?os
Sentado en la consulta del doctor, y acompa?ado de su novia, cuesta ver al ciclista. Sin embargo, ese cuerpo menudo, de aspecto extremadamente cordial, casi t¨ªmido, alberga todo un campe¨®n del mundo. Es ?scar Freire, ese muchacho c¨¢ntabro, de 25 a?os, que hace dos se coron¨® como el rey de la ruta. Pero, desde entonces, el camino de Freire ha sido casi una tortura. Desde que en 1999 se cayera en la Challenge de Mallorca, su espalda le ha hecho vivir un calvario. Durante dos a?os, Freire se ha cansado de hacer ruta por cuantos consultorios le han recomendado: doctores, fisioterapeutas, oste¨®patas... Pocos han dado con lo que ten¨ªa; ninguno, hasta ahora, con la soluci¨®n. Y Freire comenzaba a desesperar. 'Pensaba que iba a ser una simple molestia y ya lo arrastro desde hace dos a?os...', dice con gesto resignado. Hasta hace dos semanas. Entonces, cuando una intoxicaci¨®n le apartaba por en¨¦sima vez de la competici¨®n, encontr¨® tambi¨¦n un camino de esperanza: Manuel Rodr¨ªguez, uno de los m¨¦dicos del Mapei, aconsejado a su vez por el doctor del Once, Nicol¨¢s Torrados, le dio una direcci¨®n, un nombre y una clave. Barcelona, doctor Antonio Tramullas, hipertermia. Desde hace una semana, Freire se encuentra mejor.
?Qu¨¦ es lo que ha cambiado? Que su lesi¨®n de espalda ha comenzado a recibir calor. O, dicho de un modo m¨¢s t¨¦cnico, que, tras seis sesiones, Freire empieza a notar los efectos de la hipertermia. Apenas conocida en Espa?a - s¨®lo existen tres m¨¢quinas: las dos que utiliza el doctor Tramullas en Barcelona y otra en Bilbao, propiedad del ex jugador del Atlhetic y del Espanyol, Juanjo Elguez¨¢bal-, pero muy empleada en Italia e Inglaterra (equipos como el Juventus, el Lazio o el Arsenal llevan a?os us¨¢ndola), la hipertermia 'es un tratamiento basado en el incremento de la temperatura de un determinado volumen de tejido y a una determinada profundidad', expone el doctor Tramullas que lleva aplicando esta t¨¦cnica desde hace seis a?os con excelentes resultados. 'La hipertermia', abunda, 'permite administrar el calor en el lugar preciso de la lesi¨®n, disminuyendo el dolor y aumentando la elasticidad del tejido y la capacidad de reproducci¨®n de las c¨¦lulas'. De este modo, Freire se somete, durante 30 minutos, a sesiones de calor, entre 41 y 45 grados, focalizadas en el lado izquierdo de su espalda (isquiotibiales, cuadrado lumbar y parte sacra). 'La diferencia respecto a otras t¨¦cnicas es que, al ser mucho m¨¢s precisa, es tambi¨¦n m¨¢s eficaz', apunta el doctor Tramullas. 'Me encuentro mejor', corrobora Freire esperanzado.
De momento, Freire ha recibido ya seis sesiones de hipertermia y su vida cotidiana es mucho m¨¢s f¨¢cil: el dolor es nulo o m¨ªnimo en muchos movimientos corrientes. Con la d¨¦cima completar¨¢ el tratamiento ideal. 'Me tengo que creer lo que me dicen, pero...', dice Freire sin poder olvidar las veces que las expectativas no se han cumplido. Sin embargo, Tramullas se muestra rotundo: 'Lo que me extra?ar¨ªa es que no se curase'.
La mejor¨ªa experimentada ya ha supuesto un remonte en la moral del ciclista del Mapei. Pero el proceso ha sido como una dura e interminable escalada. 'Nunca me he planteado dejar la bici', revela, 'pero no sabes lo duro que es estar lesionado hasta que te pasa'. Cada tratamiento fallido supon¨ªa una decepci¨®n. 'Algunos de los que prob¨¦, me hicieron incluso empeorar', apunta. Ahora, confiado en que las expectativas del doctor Tramullas, Freire ya ha hecho el dibujo de lo que resta de temporada. No estar¨¢ en el Tour, pero espera hacer pruebas ya en las Cl¨¢sicas y estar a pleno rendimiento en la Vuelta y en el Mundial.
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