Una obra de arte en cualquier rinc¨®n

Cualquier rinc¨®n, rotonda o plazuela es un buen lugar en Legan¨¦s para colocar una escultura. El municipio cuenta con m¨¢s de un centenar de obras de gran relieve regadas por todos los barrios.

Un recorrido para ver las m¨¢s importantes podr¨ªa empezar en el barrio de San Nicasio, junto a la ermita hom¨®nima. Hace 15 d¨ªas se instal¨® la ¨²ltima obra, que representa al santo patr¨®n de la localidad. Esta escultura de Zapata mide m¨¢s de siete metros de altura. Lo m¨¢s destacado de la pieza es que representa la historia del obispo franc¨¦s. ?ste fue decapitado hace 500 a?os por el jefe pol¨ªtico de la ¨¦poca. En Legan¨¦s se vivieron pestes y miserias continuas, por lo que pidieron al obispo de Toledo que les enviase un santo protector. El eclesi¨¢stico opt¨® por el m¨¢rtir franc¨¦s, que siempre es representado mientras sujeta su cabeza en la mano derecha.

El recorrido contin¨²a en el campus de la Universidad Carlos III, en el antiguo cuartel de Sabatini. El patio interior acoge una veintena de obras, cedidas por el Museo de Arte Reina Sof¨ªa y pertenecientes a las primeras d¨¦cadas del siglo XX. As¨ª se pueden ver esculturas de Mois¨¦s Huerta y Ayuso, Fructuoso Ordu?o de la Fuente o Jos¨¦ Azpeitia, entre otras. Los materiales empleados var¨ªan, desde el bronce o el acero hasta la escayola. Este lugar fue elegido porque dispon¨ªa de fuertes medidas de seguridad, uno de los requisitos impuestos por el Patronato del Reina Sof¨ªa. Nada m¨¢s salir del patio, el visitante se encuentra, en los jardines exteriores del campus, con Unicornio, una obra de Eduardo Arroyo, que representa un gran cuerno de bronce sobre dos bloques de granito.

El trayecto art¨ªstico contin¨²a por la parte posterior del campus. Un enorme y rampante caballo de bronce con cinco cabezas, que representan el movimiento del equino, se puede apreciar en la primera rotonda con la que topa el paseante, en la avenida del Mediterr¨¢neo. Esta obra, titulada Caballo de agua, pertenece al escultor Luis Arencibia.

Bienvenida al conductor

El visitante contin¨²a por la avenida hacia el barrio de Zarzaquemada. All¨ª encuentra otro monstruo escult¨®rico. Son tres cabezas, colocadas en sus respectivos pedestales, que con las s¨ªlabas de Legan¨¦s dan la bienvenida a los veh¨ªculos procedentes de la carretera de Carabanchel y de la M-40. Esta escultura, de Juan Bordes, fue construida en 1997 con acero cort¨¦n, bronce y aluminio.

La siguiente parada ya se mete de lleno en el populoso barrio de Zarzaquemada. Los llamados Gigantes de Fernando Bellver copan las principales rotondas de la avenida del Rey Juan Carlos I y de las calles aleda?as. Los seis gigantes construidos por el artista madrile?o representan a personajes destacados de la historia de la localidad. Entre ellos es posible distinguir al marqu¨¦s de Legan¨¦s, a Ventura Rodr¨ªguez, a los hermanos Rej¨®n, h¨¦roes de la guerra de la independencia; a don Juan de Austria o a una aguadora que aparece en una obra de Luis de G¨®ngora. Todos fueron construidos en 1998 en acero cort¨¦n, lo que les da un aspecto rojizo. Miden m¨¢s de siete metros.

La visita a Zarzaquemada tambi¨¦n permitir¨¢ ver, de paso, una obra de ?ndres R¨¢bago (El Roto), instalada en la rotonda de la calle de los Monegros. La mujer de la luz (bronce, 1999) porta cuatro grandes globos de colores rojo, azul, amarillo y verde.

El paseante puede salir entonces del barrio de Zarzaquemada y dirigirse hacia la Casa del Reloj y la plaza de toros La Cubierta. En su camino, junto al edifico de los Juzgados, ver¨¢ a Dolores Ib¨¢rruri, La Pasionaria (1937), una obra de Victorio Macho, donada al municipio de Legan¨¦s por el PCE.

El recorrido contin¨²a junto al coso taurino. La primera rotonda da acceso a la calle de Getafe con La puerta del aire (1995), del premio nacional de Artes Pl¨¢sticas en 1981, Jos¨¦ Hern¨¢ndez. Dos enormes columnas que sujetan un capitel y una esfera, todo ello en acero cort¨¦n, es el recibimiento a los conductores procedentes de la carretera de Getafe.

Museo al aire libre

La ¨²ltima parada de este itinerario acaba en el Museo de Esculturas al Aire Libre. All¨ª se da la mayor concentraci¨®n de obras de todo el municipio. El gigante del bosque, de Toni Gallardo, construida con piedra caliza de Colmenar de Oreja; Anna, de Susana Lorenzo, que representa una especie de verja cerrada, o Escalera-rampa, de ?ngeles Marcos (1984), son algunas de las obras que se pueden ver en esta parte. Tambi¨¦n destaca ?caro, del acad¨¦mico de Bellas Artes de San Fernando Jos¨¦ Luis S¨¢nchez (1997).

Aqu¨ª, los grandes jardines del museo permiten apreciar con toda tranquilidad las obras. El proyecto del Ayuntamiento es vallar toda la zona y poner vigilancia para que las esculturas no sufran ning¨²n tipo de agresi¨®n. Tambi¨¦n ser¨¢n ¨¦stas las dos condiciones para solicitar m¨¢s obras procedentes de los fondos del Museo de Arte Reina Sof¨ªa. Si se cumplen las previsiones municipales, todos los jardines contar¨¢n con destacadas piezas escult¨®ricas.

La colecci¨®n leganense es fruto de m¨¢s de 30 a?os de compras y cesiones. El mayor empuj¨®n lo ha recibido este parque escult¨®rico en los ¨²ltimos cinco a?os. El desembolso global del Ayuntamiento no ha superado los 100 millones de pesetas, ya que, en muchos casos, el Consistorio s¨®lo ha tenido que pagar los materiales o el transporte, seg¨²n explica el alcalde de Legan¨¦s, Jos¨¦ Luis P¨¦rez R¨¢ez, del PSOE. 'Muchos artistas se han enterado de nuestro proyecto y han querido estar presentes en la colecci¨®n', a?ade P¨¦rez R¨¢ez.