Mar¨ªa Vasco marcha a pi?¨®n fijo
La medallista ol¨ªmpica de bronce s¨®lo pudo ser quinta en los 20 kil¨®metros, un paseo triunfal para la rusa Ivanova
La rusa Olimpiada Ivanova, todo un nombre, todo un car¨¢cter, tom¨® las de Villadiego en la pista de tart¨¢n y nadie pudo seguirla. Las dem¨¢s marchadoras, todas menos una, se tomaron los 20 kil¨®metros con m¨¢s calma y Mar¨ªa Vasco termin¨® la quinta. Para ?ngela Keogh, de 39 a?os, de las islas Norfolk, pinta de cualquier cosa menos de deportista, fue una tarde de paseo. Lleg¨® la ¨²ltima, a 41 minutos de la campeona.
A Mar¨ªa Vasco, la medallista de bronce en los Juegos Ol¨ªmpicos de Sydney 2000, no le sali¨® su carrera y lleg¨® deshecha. Por puro coraje. Se dobl¨® nada m¨¢s cruzar la meta. Cay¨® de rodillas mientras las italianas, tres entre las ocho primeras, se envolv¨ªan en una bandera verde, blanca y roja. 'He llegado sin resuello', dijo luego la espa?ola; 'no pod¨ªa dar un paso. Me he dejado el pellejo al final'. Mal s¨ªntoma, la agon¨ªa es la ¨²ltima soluci¨®n.
'Has marchado a pi?¨®n fijo, te ha faltado el cambio', le dijo nada m¨¢s verla su entrenador, Josep Mar¨ªn. Vasco, disciplinada, asinti¨®. 'He pinchado en el kil¨®metro 12, pero me he podido recuperar en el 15 dej¨¢ndome la piel. Aqu¨ª hay que ir a por todo. Estoy fatal'. Vasco hizo unos ¨²ltimos metros, una recta final, desenfrenada, intentando batir un r¨¦cord de Espa?a, 1h 30m. 9s, que se le escap¨® por diez segundos. Por delante ya hab¨ªan entrado cinco rivales -posteriormente fue descalificada la noruega Kiersti Platzer-, entre ellas la italiana Elisabetta Perrone, descalificada en Sydney cerca del estadio, que recuper¨® el bronce de entonces, el que atrap¨® Vasco.
Los expertos y las rivales ya sab¨ªan que Ivanova iba a salir disparada. Es la t¨¦cnica habitual de la rusa, que perdi¨® una medalla de plata conseguida en Atenas en 1997 al dar positivo en un control antidopaje. Purg¨® una sanci¨®n de dos a?os, en 1999 regres¨® a la competici¨®n y en 2001 a la cima por fin.
La carrera en solitario de Ivanova no era la de Vasco. Las que intentaron cazarla se suicidaron. A Vasco ni se le pas¨® por la mente: 'La rusa ten¨ªa que ir delante porque es la m¨¢s r¨¢pida de la historia'. Mar¨ªn acumul¨® en su cron¨®metro todas las referencias de su pupila cada dos kil¨®metros. El t¨¦cnico hizo el an¨¢lisis. Y enseguida se lo cont¨® a Vasco. 'Lo peor es que se te fueran la rusa y la italiana [Fedoskina, que luego fue descalificada, y Perrone]. ?se era tu grupo, tu nivel', le reproch¨®. Y le ense?¨® el reloj. Menos de nueve minutos cada dos kil¨®metros hasta el 12. Luego, m¨¢s de nueve. Y hasta 4m 36s en el ¨²ltimo.
Hab¨ªa que estar bien y ser mayor. Mar¨ªa, a sus 25 a?os, parec¨ªa una ni?a tras Ivanova, de 31; Tsybulskaya, la bielorrusa que gan¨® la plata, de 33; Perrone, tambi¨¦n de 33, y la otra italiana, la cuarta, Alfridi, igualmente de 33.
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