Sito Mi?anco
LA DETENCI?N de Jos¨¦ Ram¨®n Prado, alias Sito Mi?anco, y otras 13 personas, por supuesta implicaci¨®n en una operaci¨®n de narcotr¨¢fico, pone de manifiesto la responsabilidad de los jueces en la lucha contra esa lacra. Mi?anco fue detenido pr¨¢cticamente con las manos en la masa: cuando controlaba desde un chal¨¦ de Madrid, y con cartas de navegaci¨®n marcadas sobre la mesa, el trasvase de unas cinco toneladas de coca¨ªna de un buque procedente de Colombia a un pesquero, encargado de introducirlo en Espa?a. Sito Mi?anco disfrutaba de libertad condicional tras haber sido condenado a 20 a?os de prisi¨®n hace ocho, y se encontraba a la espera de que se dictase sentencia por otro juicio iniciado en octubre pasado y en el que el fiscal pidi¨® para ¨¦l m¨¢s de seis a?os de c¨¢rcel.
Se trata de una combinaci¨®n llamativa, porque si estaba en libertad condicional era porque los jueces le hab¨ªan considerado capaz de vivir al margen de la actividad delictiva, y, por otra parte, la acusaci¨®n por la que se le ped¨ªan seis a?os y nueve meses en el juicio cuya sentencia se ha demorado era la de haber organizado en 1997, desde la prisi¨®n, por tel¨¦fono m¨®vil, una operaci¨®n de desembarco de seis toneladas de hach¨ªs en la r¨ªa de Vigo.
Tanto el Supremo como el Condicional confirmaron la condena a 20 a?os que le fue impuesta en 1993 por la Audiencia Nacional tras ser considerado culpable de un delito de introducci¨®n de 2.500 kilos de coca¨ªna. Para otorgarle la libertad condicional, el juez tuvo que considerar los condicionantes establecidos por la ley: si se aplica el anterior C¨®digo Penal, que el preso ofrece 'garant¨ªas de hacer vida honrada en libertad', y si se aplica el actualmente vigente, que exista 'un pron¨®stico individualizado y favorable de reinserci¨®n social, emitido por los expertos que el juez de vigilancia penitenciaria estime convenientes'.
El retraso en emitir la sentencia en el segundo juicio que tiene pendiente impide conocer su grado de culpabilidad, pero, de haber sido condenado, y con independencia de posibles recursos, el juez de vigilancia penitenciaria habr¨ªa tenido motivos para revocar la libertad condicional.
En ese caso, Jos¨¦ Ram¨®n Prado Bugallo, alias Sito Mi?anco, no habr¨ªa tenido ocasi¨®n de participar en el delito del que ahora se le acusa y del que tendr¨¢ que responder ante la justicia.
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