Los diplom¨¢ticos dejan Kabul sin ver a los ocho cooperantes detenidos
Los talib¨¢n estudian permitir a la Cruz Roja visitar a los occidentales
El r¨¦gimen de los talib¨¢n anunci¨® ayer que estaba considerando autorizar una visita del Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja (CICR) a los ocho trabajadores humanitarios.
'Como el CICR es neutro [en la guerra civil en Afganist¨¢n] y ha visitado en diversas ocasiones a los dos bandos, consideramos autorizarles a visitar a los ocho cooperantes', declar¨® el ministro de Asuntos Exteriores, Ahmed Mutawakil.
El pasado 7 de agosto, el CICR inform¨® de que hab¨ªa pedido permiso a las autoridades talib¨¢n para visitar a los detenidos. Cuatro ciudadanos alemanes, dos australianos y dos estadounidenses que trabajan para la organizaci¨®n no gubernamental Shelter Now International, fueron detenidos junto con 16 colegas afganos a principios de agosto. La polic¨ªa religiosa de los talib¨¢n les acusa de haber intentado convertir musulmanes al cristianismo.
Desde ese momento, les han estado prohibidas las visitas. Ni siquiera los tres diplom¨¢ticos de sus pa¨ªses de origen que la semana pasada viajaron desde Pakist¨¢n para facilitarles asistencia consular han podido tener acceso a ellos. Los talib¨¢n les devolvieron el lunes los pasaportes con la negativa a ampliar sus visados, por lo que ayer tuvieron que abandonar Afganist¨¢n.
'Regresamos a Islamabad para continuar nuestros esfuerzos de obtener acceso consular y trabajar por la r¨¢pida puesta en libertad de nuestos ciudadanos', declar¨® David Donahue, el c¨®nsul estadounidense, en nombre de los tres Gobiernos implicados, poco antes de despegar de Kabul, la capital afgana.
Los c¨®nsules de Alemania, Australia y Estados Unidos en Islamabad regresaron ayer a esta ciudad procedentes de Kabul sin haber conseguido visitar a los ocho cooperantes de sus pa¨ªses detenidos en Afganist¨¢n bajo la acusaci¨®n de propagar el cristianismo. A pesar de que durante la semana pasada en ese pa¨ªs no lograron entrevistarse con ning¨²n alto dirigente, su esfuerzo puede traducirse en una visita de la Cruz Roja.
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