Catalu?a incumple la LOGSE al no convocar plazas de catedr¨¢tico

En la ¨²ltima d¨¦cada, Catalu?a ha sido la ¨²nica comunidad aut¨®noma espa?ola con competencias en Ense?anza en la que no se han celebrado concursos a catedr¨¢ticos de secundaria. La Generalitat incumple la LOGSE al no aplicar el principio de convertir en catedr¨¢ticos al 30% de los profesores de secundaria, como exige la ley. De los 25.000 profesores de secundaria que hay en Catalu?a, 6.000 deber¨ªan ser catedr¨¢ticos y, sin embargo, s¨®lo est¨¢n cubiertas 2.200 plazas, de las cuales unas 1.000 corresponden a profesores que ya hab¨ªan sido nombrados antes de la promulgaci¨®n de la ley.

Las ¨²nicas oposiciones convocadas fueron las de 1991, en las que se aplicaron unos baremos que dos a?os m¨¢s tarde el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a oblig¨® a modificar porque, entre otras anomal¨ªas, valoraba m¨¢s los conocimientos del catal¨¢n que los de las materias en cuesti¨®n y adem¨¢s reservaba cupos de plazas por especialidades, lo que hac¨ªa que algunos profesores con mejor puntuaci¨®n no obtuvieran la c¨¢tedra y otros con peor, pero de otra especialidad, la lograran. El tribunal oblig¨® tambi¨¦n a aceptar las memorias de los profesores escritas en castellano y no ¨²nicamente en catal¨¢n, como exig¨ªa Ense?anza.

Los cambios forzados por el TSJC en los baremos de calificaci¨®n de las oposiciones fueron trasladados a una mesa de negociaci¨®n en la que estaban representados, adem¨¢s de la Administraci¨®n, las centrales sindicales CC OO, UGT y USTEC y tambi¨¦n la asociaci¨®n de funcionarios, CESIF, y la de profesores, ASPEC. Posteriormente, ya en junio del 2.000, Ense?anza convoc¨® un nuevo concurso de m¨¦ritos para 728 plazas, correspondientes a los profesores suspendidos en 1991, que en la repesca ten¨ªan la ocasi¨®n de pasar las oposiciones con los nuevos baremos. 14 meses despu¨¦s, sin embargo, las 728 plazas no han sido asignadas todav¨ªa. En junio pasado, la resoluci¨®n del recurso presentado por el Colegio de Bi¨®logos ante el Tribunal Superior, oblig¨® a la Generalitat a reconocer como catedr¨¢ticos desde 1993 a los 728 profesores y pagarles los atrasos correspondientes: 2.000 millones de pesetas. Ense?anza comunic¨® en julio pasado a los profesores afectados que podr¨¢n conocer su nota cuando se aclare el alcance de las decisiones del Tribunal Superior. Ayer, al trascender la sentencia, la consejera de Ense?anza, Carme Laura Gil, asegur¨® que los atrasos se pagar¨¢n sin problemas.

El Colegio Oficial de Bi¨®logos, que recurri¨® los baremos de las oposiciones de 1991, se felicit¨® ayer del auto del alto tribunal. El presidente del colegio, Pere Camprub¨ª, valor¨® ayer la decisi¨®n del tribunal 'muy satisfactoriamente porque hasta ahora Ense?anza estaba practicando un obstruccionismo claro en esta cuesti¨®n'. Camprub¨ª puso como ejemplo de la injusticia del baremo de 1991 que 'el primer bi¨®logo que se qued¨® sin c¨¢tedra ten¨ªa una puntuaci¨®n de 10 y en cambio, uno de pl¨¢stica consigui¨® serlo con un 7,5'.