Cinco inc¨®gnitas sobre Gescartera
La investigaci¨®n que arranca esta semana en el Congreso indagar¨¢ sobre los 'cerebros' de la trama y las responsabilidades pol¨ªticas
El Congreso inicia esta semana la investigaci¨®n del esc¨¢ndalo de Gescartera, pocos d¨ªas antes de que los imputados declaren de nuevo ante la Audiencia Nacional y las indagaciones emprendidas por los ministerios de Econom¨ªa, Hacienda, Administraciones P¨²blicas, Defensa e Interior avancen resultados. Parlamentarios, t¨¦cnicos y jueces intentan desvelar las claves de un desfalco de 18.000 millones de pesetas sobre el que pesan numerosas inc¨®gnitas. Entre otras, las siguientes:
- ?Por qu¨¦ la CNMV asciende a Gescatera el mismo d¨ªa en que la sanciona?
La explicaci¨®n de Pilar Valiente, la presidenta de la Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) -el organismo encargado de vigilar el funcionamiento de las empresas que operan en Bolsa- ante el Congreso, el pasado 2 de agosto, s¨®lo convenci¨® al PP. Valiente admiti¨® que es una 'contradicci¨®n' y se apresur¨® a aclarar que ocurri¨® tres meses antes - julio de 2000- de su nombramiento. Aleg¨® dos razones: la entrada de la ONCE en el accionariado con un 10% -operaci¨®n que no le cost¨® a la organizaci¨®n de ciegos ni una peseta-, y un mayor control sobre Gescartera. Este control vendr¨ªa dado porque una sociedad gestora de carteras -que precisan de intermediarios para ejecutar la voluntad del inversor- requiere menos vigilancia que una agencia de valores, con capacidad para maniobrar libremente con los fondos. Lo que no explic¨® Pilar Valiente es por qu¨¦ s¨®lo se sancion¨® a Gescartera con 10 millones ante una irregularidad clamorosa como es operar por cuenta propia, al margen de cualquier control. El hecho de no calificarla como 'muy grave' le evit¨® adem¨¢s una indeseable publicidad. El diputado socialista Antonio Cuevas no acept¨® el t¨¦rmino 'contradicci¨®n'. Lo sustituy¨® por 'prevaricaci¨®n'.
Para el socialista Cuevas, quienes ten¨ªan que vigilar el mercado 'o eran tontos o estaban en el ajo'
Para el PP y el Gobierno, sin embargo, la actuaci¨®n de Valiente ha resultado impecable y gracias a ella -Rato no se cansa de repetirlo- se descubri¨® el pastel.
- ?C¨®mo logra Gescartera sortear a?o tras a?o los controles?
Burl¨® los suficientes como para que empresas p¨²blicas, la Armada, la polic¨ªa, la Guardia Civil, una buena parte de la Iglesia y numerosos inversores, en su mayor¨ªa del sector inmobiliario, confiaran su dinero a cambio de una rentabilidad superior a la que el mercado ofrec¨ªa al resto de ciudadanos. Algunos ahorradores depositaron el dinero en met¨¢lico, en maletines, y las inciertas garant¨ªas de tan peculiar inversi¨®n obligaron al broker del barrio madrile?o de Usera a pertrecharse d¨ªa y noche de guardaespaldas. Otros se movieron dentro de la legalidad. Probablemente ni unos ni otros sab¨ªan que ya en 1994 la CNMV mult¨® a Gescartera con 128 millones de pesetas por -tambi¨¦n entonces- operar por su cuenta. Con un dep¨®sito de 30 millones, manejaba 95.000 millones de ¨²nicamente 227 clientes. Recurrieron la multa -que a¨²n no han pagado- y siguieron funcionando hasta 1999, en que un informe demoledor firmado por David Vives, entonces supervisor jefe de la CNMV, suger¨ªa la necesidad inmediata de intervenir la sociedad. La oposici¨®n de la entonces vocal Pilar Valiente y del vicepresidente, Luis Ramallo, dieron al traste con la sugerencia impl¨ªcita de Vives. La investigaci¨®n le fue encomendada entonces a Antonio Botella, quien, tras meses de silencio, fue ascendido a jefe de supervisi¨®n por Valiente nada m¨¢s tomar posesi¨®n como presidenta.
Las connivencias familiares y personales entre Gescartera y la Administraci¨®n figuran tambi¨¦n en en el punto de mira de la oposici¨®n. La presidenta, Pilar Gim¨¦nez-Reyna, es hermana del ex director general de Tributos y ex secretario de Estado de Hacienda Enrique Gim¨¦nez-Reyna. ?ste ha sido compa?ero y jefe de Pilar Valiente, con quien le une una 'gran amistad', seg¨²n declar¨® ella en el Congreso. El ex diputado del PP Luis Ramallo intercambi¨® regalos con Camacho, medi¨® para vender la agencia a una compa?¨ªa alemana de la que nunca m¨¢s se supo y ratific¨® como notario las auditor¨ªas de Deloitte & Touche, sometidas ahora a investigaci¨®n. Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz de la Serna, apoderado plenipotenciario de Gescartera, y el interventor Salvador Alcaraz dejaron sus cargos en la CNMV por las n¨®minas m¨¢s sustanciosas que les ofreci¨® Camacho.
El presidente Aznar dio a entender el pasado s¨¢bado en Menorca que se hab¨ªan producido 'favoritismos y arbitrariedades' en esta monumental estafa. El socialista Cuevas lo resume de otro modo: 'Quienes ten¨ªan la obligaci¨®n de vigilar, o eran rematadamente tontos o estaban en el ajo'.
- ?Qu¨¦ precipita la intervenci¨®n?
Pilar Valiente se refiere al multimillonario agujero patrimonial y a la resistencia a la inspecci¨®n como detonantes de la intervenci¨®n. Camacho alude al baj¨®n bursatil y a la retirada de 13.0000 millones en pocos d¨ªas. Algunas fuentes creen que el chivatazo que propici¨® dicha descapitalizaci¨®n -si es que efectivamente se produjo- parti¨® del sector de la CNMV indignado por el retraso en actuar de la propia Comisi¨®n. Otros expertos atribuyen el desmantelamiento de Gescartera al proceso penal iniciado en un juzgado madrile?o por Caja Madrid tras falsificar sello en Gescartera. Para estas fuentes, Valiente s¨®lo se habr¨ªa adelantado a los tribunales.
- ?Por qu¨¦ algunos clientes retiran a tiempo su inversi¨®n?
La Armada logra salvar 265 millones en una confusa operaci¨®n en la que Gescartera utiliza su nombre en talones al portador que van y vienen y cuya titularidad no les corresponde a ellos, sino a los hu¨¦rfanos de la polic¨ªa. Lo ¨²nico claro en este enredo es que los militares sab¨ªan que su dinero se mov¨ªa en sectores de alto riesgo y que generaba por ello buenas plusval¨ªas. Los empresarios del juego relacionados registralmente con el ministro de Agricultura, Miguel Arias Ca?ete, salvan su inversi¨®n, al igual que los arzobispos de Burgos y Valladolid y la propia ONCE, que recupera 540 millones de los mil invertidos. La mayor¨ªa invoca la 'intuici¨®n'. PSOE e IU prefieren hablar de 'informaci¨®n privilegiada'.
- ?Acaba la responsabilidad de Enrique Gim¨¦nez-Reyna con su dimisi¨®n?
Un mes despu¨¦s de la intervenci¨®n, cuando s¨®lo se relacionaba a Gescartera con el secretario de Estado de Hacienda por el parentesco con la presidenta de la agencia, este profesor, que comparti¨® veraneos con Aznar en Nerja (M¨¢laga) y le ayud¨® a preparar las oposiciones al cuerpo de inspectores, confes¨® tener invertidos all¨ª 'todos sus ahorros', 1,5 mill¨®nes. Y advirti¨® que estudiaba querellarse contra Gescartera como perjudicado. Para cuando se descubri¨® que hab¨ªa sentado en la misma mesa a Valiente y a los jefes de Gescartera en plena crisis, ya hab¨ªa dimitido.
Ahora las investigaciones apuntan a que pudo ser el art¨ªfice de la entrada de la ONCE en Gescartera, con cuyo vicepresidente segundo, Rafael de Lorenzo -destituido esta semana junto al otro implicado en el esc¨¢ndalo, Jos¨¦ Mar¨ªa Pichel-, le un¨ªa una estrecha relaci¨®n desde 1999, cuando Gim¨¦nez-Reyna era director general de Tributos y eximi¨® a la ONCE del 20% de retenci¨®n fiscal en los premios.
Ni al PSOE ni a IU les ha pasado inadvertida la coincidencia de fechas entre el boom de Gescartera y el nombramiento de Gim¨¦nez-Reyna como director general de Tributos -entre 1997 y 2000- y secretario de Estado de Hacienda, desde mayo de ese a?o hasta su dimisi¨®n. Seg¨²n la contabilidad presentada en el registro, Gescartera multiplic¨® su fondo patrimonial entre 1996 y los cinco ejercicios siguientes. De 756,6 millones en 1995 pas¨® a gestionar 8.700, al menos en dinero blanco. El negro, que oscila entre los 400 millones a cuyos titulares tiene identificados el fiscal y los 6.000 reconocidos por Camacho, serpentea, quiz¨¢s, en para¨ªsos fiscales.
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