'El dinero de la Iglesia no puede estar en la Luna, sino en los mercados', dice su portavoz econ¨®mico
La Conferencia Episcopal asegura que las cantidades invertidas en Bolsa 'son m¨ªnimas'
'?D¨®nde quiere que est¨¦ el dinero de la Iglesia? ?En la Luna? El dinero de la Iglesia tiene que estar en los mercados'. As¨ª justific¨® ayer Bernardo Herr¨¢ez, vicesecretario para Asuntos Econ¨®micos de la Conferencia Episcopal, la creaci¨®n en 1999 de una sociedad para invertir en bolsa participada por una mutua, mayoritariamente eclesi¨¢stica, y al menos dos arzobispados (Madrid y Burgos). Herr¨¢ez descart¨® que subvenciones del Estado hayan alimentado esta sociedad y admiti¨® que puede ser dif¨ªcil controlar el destino final de estas inversiones.
Herr¨¢ez matiza que no se debe hablar de una sociedad de Bolsa de la Iglesia, sino de instituciones eclesi¨¢sticas, a pesar de que en la mutua Umas figuran representantes de todos los arzobispados, y que dos de ellos son inversores directos en la sociedad de Bolsa Umasges.
El responsable econ¨®mico de la Conferencia Episcopal reconoce que es dif¨ªcil garantizar que el dinero de la Iglesia no acaba en empresas no deseadas. 'Se puede comprar valores de sociedades que, a su vez, pueden ser accionistas de empresas de armas. Y eso no hay forma de controlarlo cuando te metes en ese r¨ªo de inversiones. Est¨¢s donde todos', explic¨® ayer Herr¨¢ez.
Umasges es una sociedad de inversi¨®n en Bolsa creada en mayo de 1999, s¨®lo dos meses despu¨¦s de que el Arzobispado de Valladolid recuperara una inversi¨®n de 1.000 millones en Gescartera, que ha dejado un agujero de 18.000 millones con 2.000 clientes afectados. Umasges mantiene una inversi¨®n en la Bolsa espa?ola y en bolsas extranjeras de 1.500 millones de pesetas. Benedicto Poza, director general de la mutua Umas, la accionista mayoritaria de Umasges con el 51,7%, aclar¨® ayer el origen de los fondos. 'Somos una mutua de seguros que se ocupa mayoritariamente de personas y bienes eclesi¨¢sticos, pero no s¨®lo. Tambi¨¦n tenemos asegurados privados. Cualquiera puede ser mutualista. Tenemos unos 15.000 mutualistas. No trabajamos ni los seguros de vida, ni las pensiones. Nuestro campo son los seguros sobre edificios, sobre responsabilidad y accidentes. Tambi¨¦n tenemos coches asegurados, unos 7.000, de personal eclesi¨¢stico y seglar'. Y explica con gracejo que el sector del autom¨®viles da m¨¢s quebraderos que beneficios. 'Los tenemos porque los tenemos que tener como cualquier mutua, pero nos traen fritos'. Este directivo de Umas y, a su vez, presidente de Umasges, explic¨® que uno de los campos que cubren es los seguros para el profesorado de los colegios religiosos, tanto en el campo de la responsabilidad civil, como en el caso de que sufran un accidente laboral.
Sobre la creaci¨®n de la Sociedad de Bolsa, Benedicto Poza explica: 'Las aseguradoras tenemos que disponer de unos amplios fondos para cubrir eventuales indemnizaciones, y para rentabilizar el dinero y no tenerlo parado, lo que hacemos es invertirlo en Bolsa'.
El presidente de esta inversora niega que se creara como una alternativa a Gescartera, aunque se fund¨® apenas un mes despu¨¦s de que el Arzobispado de Valladolid recuperara 1.000 millones que figuraban a su nombre. 'No, nosotros ya invert¨ªamos en Bolsa antes de tener esta inversora. Lo hac¨ªamos a trav¨¦s de la misma sociedad que ahora gestiona nuestras inversiones, Inversafei'.
Desconocimiento
Por otro lado, Jos¨¦ S¨¢nchez, presidente de la comisi¨®n de medios de Comunicaci¨®n Social de la Conferencia Episcopal, neg¨® que la Iglesia disponga de inversora alguna. 'No tengo ni idea de que la Iglesia haya creado esa sociedad, no s¨¦ si alguna instituci¨®n o di¨®cesis en particular haya podido hacer eso. La Iglesia en particular en Espa?a no tiene esa sociedad creada ni mucho menos'. Umas, accionista mayoritaria de Umasges, tiene el mismo presidente que la Conferencia Episcopal, Antonio Mar¨ªa Rouco, y cuenta con representantes de todos los arzobispados, algunos de los cuales son accionistas directos. S¨¢nchez tambi¨¦n declar¨® que el dinero que la Iglesia tiene invertido en Bolsa es m¨ªnimo: 'Primamos m¨¢s una producci¨®n m¨ªnima que una arriesgada, por eso no es necesariamente mucho lo que nos puede pillar nunca, aunque no excluyo que haya podido dejarse llevar de las expectativas del gran riesgo, de la gran ganancia. No lo excluir¨ªa', declar¨® S¨¢nchez a Radio Nacional de Espa?a.
La sociedad de Bolsa Umasges, propiedad de la Iglesia, tiene invertidos 1.500 millones de pesetas en valores burs¨¢tiles. El ¨²ltimo a?o perdi¨® 74 millones y hasta julio de este ejercicio perd¨ªa, debido a la ca¨ªda de los valores burs¨¢tiles, m¨¢s de 116 millones.
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