El caso de la cat¨¢strofe minera de Aznalc¨®llar y el dise?o de contenci¨®n en los dep¨®sitos de gas

La cat¨¢strofe de Aznalc¨®llar (Huelva), que se produjo en 1998 al derrumbarse el muro de una gran balsa que conten¨ªa material residual de la explotaci¨®n minera de la empresa Bolid¨¦n, tiene una explicaci¨®n, a pesar de que posiblemente fuera dif¨ªcil de prever. Este caso fue uno m¨¢s de los estudiados por Joaqu¨ªn Mart¨ª, especialista junto a sus compa?eros de la peque?a empresa que dirige, en el estudio, a priori y a posteriori, del comportamiento de estructuras ante explosiones, impactos, terremotos, derrumbamientos y otros sucesos.Tras los an¨¢lisis posteriores a la cat¨¢strofe le quedan pocas dudas a la mayor¨ªa de los expertos de que el dise?o original de la presa y sus sucesivos recrecimientos adolec¨ªan de graves defectos estructurales, a pesar de que te¨®ricamente estaba hecha de una forma moderna y muy conservadora respecto, por ejemplo, a los temblores s¨ªsmicos.

'Hubo dos aspectos, ambos ligados al terreno de esa zona, que no se tuvieron en cuenta', opina Mart¨ª. Explica que cuando se pone un peso en el suelo (formado por part¨ªculas s¨®lidas y por agua) la presi¨®n se transmite primero al agua, de donde se va difundiendo al s¨®lido y as¨ª se produce el reparto del peso. En el caso de las margas azules del Guadalquivir, el terreno sobre el que se construy¨® la presa, la permeabilidad es baj¨ªsima y el espesor es 70 metros, lo que quiere decir que har¨ªan falta centenares de a?os para que se produzca esta difusi¨®n de las llamadas presiones instersticiales. Es decir, se hizo una buena presa para dentro de muchos a?os, pero se empez¨® a utilizar enseguida (en total aguant¨® 20 a?os).

Adem¨¢s, explica, las margas se comportan de una manera que se conoce como fr¨¢gil en la jerga t¨¦cnica. A partir de unas ciertas condiciones de deformaci¨®n, la resistencia es mucho menor que la que hab¨ªa al principio. El caso extremo de esto es el vidrio: si el vidrio se empieza a deformar, llega un momento en que se rompe (resistencia cero). Con las margas azules del Guadalquivir, el problema es que al ir construyendo hay unos puntos en que, al no tener en cuenta las presiones que no se han difundido por el terreno y producirse la deformaci¨®n, se llega al punto de menor resistencia y el riesgo de fractura, sin que nada lo indique. De hecho la presa aguant¨® ocho a?os tras su ¨²ltimo recrecimiento en estas condiciones.

?Estaba mal hecha la presa de Aznalc¨®llar? 'Depende de lo que se entienda por mal hecha', dice Mart¨ª y matiza: 'Es verdad que los c¨¢clulos que se hab¨ªan hecho no reflejaban la realidad f¨ªsica de lo que estaba pasando. Sin embargo, hasta qu¨¦ punto cada uno de los estudios deb¨ªa de estar enterado de los detalles t¨¦cnicos de los otros estudios, y hasta que punto lo hecho reflejaba el estado del conocimiento en esa ¨¦poca es algo a discutir'.

'De lo que no hay duda es de que hay una explicaci¨®n, y de que la explicaci¨®n es clar¨ªsima', remacha este ingeniero. Y es la explicaci¨®n de por qu¨¦ la presa, a pesar de que en su proyecto figuraba un te¨®rico coeficiente de seguridad alto que le permitir¨ªa, por ejemplo, llegar a la altura final de 30 metros frente a la de 27 metros que ten¨ªa, no aguanta y se viene abajo.

Gas licuado

Mart¨ª y sus compa?eros est¨¢n ahora involucrados en un gran proyecto de los que pretenden evitar cat¨¢strofes en vez de estudiarlas cuando ya se han producido. Se trata del dise?o de enormes dep¨®sitos de gas natural en la India para hacerlos tanto resistentes a impactos exteriores como seguros respecto a su contenido. Los dep¨®sitos de gas natural son enormes estructuras ¨²nicas y curiosas, verdaderos b¨²nkeres dise?ados tanto para evitar que salga al exterior su contenido como para resistir ataques externos.

El gas se guarda a baja temperatura (168 grados bajo cero) para mantenerlo l¨ªquido, porque as¨ª ocupa mucho menos. Cada uno de los dep¨®sitos a construir en la India contiene unos 150.000 metros c¨²bicos de gas licuado y est¨¢ formado por un tanque cil¨ªndrico de acero criog¨¦nico sobre una losa circular de hormig¨®n armado de 80 metros de di¨¢metro, rodeado por paredes de hormig¨®n pretensado de decenas de metros de altura y una c¨²pula tambi¨¦n de hormig¨®n armado.

El dise?o se hace para que aguante los mismos terremotos y vientos que las centrales nucleares. Tambi¨¦n tiene que soportar que se incendie un dep¨®sito adyacente y el incendio propio sin que se escape el l¨ªquido del edificio de contenci¨®n. Todo ello con un ajuste muy fino de algunas condiciones especiales relacionadas con la peligrosidad potencial de su contenido.