Las empresas espa?olas olvidan Latinoam¨¦rica
Las inversiones en el cono sur han ca¨ªdo un 26% en el primer trimestre y se desplomar¨¢n durante los pr¨®ximos meses
Am¨¦rica Latina ha dejado de ser el destino prioritario de las inversiones espa?olas. La ca¨ªda del 38% en los flujos de dinero espa?ol a la regi¨®n en 2000 contin¨²a durante este a?o con descensos del 26% en el primer trimestre y predicciones m¨¢s pesimistas para meses posteriores. El agotamiento de los grandes proyectos en telecomunicaciones y energ¨ªa, la crisis de Argentina, la desaceleraci¨®n de la inversi¨®n mundial y los atentados del 11 de septiembre explican esta involuci¨®n sin precedentes.
Las inversiones espa?olas han bajado el 59%, 13.383 millones de d¨®lares frente a los 32.785 millones de d¨®lares de los mismos meses de 2000
La causa principal del descenso es el agotamiento de las privatizaciones y de los grandes planes financieros y de infraestructuras
Cuando el pasado d¨ªa 3 octubre un selecto grupo de empresarios transmit¨ªa a altos cargos de los Ministerios de Econom¨ªa y Exteriores la elecci¨®n de China como nuevo punto de atracci¨®n del esfuerzo inversor de sus empresas, no hac¨ªan sino confirmar un cambio de tendencia, iniciado ya en el ejercicio de 2000, cuando el volumen de las inversiones espa?olas en Latinoam¨¦rica ca¨ªa un 38% (hasta 3,63 billones de pesetas), con respecto a los 5,84 billones de pesetas del ejercicio precedente, y por vez primera en el reciente proceso de expansi¨®n exterior de nuestra econom¨ªa el cono sur de Am¨¦rica dejaba de ser el destino prioritario del capital espa?ol fuera de nuestras fronteras. Las primeras estimaciones de la Secretar¨ªa de Estado de Comercio, correspondientes al primer trimestre de este a?o, reflejan ya una ca¨ªda del 26% en las inversiones directas espa?olas en Am¨¦rica Latina, con respecto a los mismos meses de 2000, siendo esta involuci¨®n especialmente fuerte en Argentina y Brasil, los primeros receptores mundiales de capital espa?ol, donde los descensos superan el 35 y el 60%, respectivamente.
Estas cifras no recogen todav¨ªa el impacto de los atentados terroristas del 11 de septiembre en Nueva York y Washington, cuya primera repercusi¨®n va a ser, como tambi¨¦n anunciaron los empresarios en el citado encuentro con los responsables econ¨®micos, la paralizaci¨®n de nuevas decisiones de inversi¨®n en esta regi¨®n del mundo. Los an¨¢lisis realizados por la propia Administraci¨®n Espa?ola como por consultores y analistas internacionales, entre ellos el grupo franc¨¦s Coface, l¨ªder mundial del seguro de cr¨¦dito a la exportaci¨®n, coinciden en se?alar a Am¨¦rica Latina como la regi¨®n que sufrir¨¢ en mayor medida los efectos de la crisis econ¨®mica y comercial tras los sucesos del 11 de septiembre, junto con Oriente Pr¨®ximo. El nuevo escenario de incertidumbre no s¨®lo va a retrasar la recuperaci¨®n de la econom¨ªa argentina, sino que va a crear serias dificultades a los otros dos grandes de la zona, Brasil y Chile, por la ca¨ªda en la cotizaci¨®n de las materias primas.
Ausencia de proyectos
Con independencia del conflicto b¨¦lico y sus secuelas, tres factores aparecen como claves en esta paralizaci¨®n de los proyectos empresariales espa?oles en Am¨¦rica Latina. En primer lugar, la fuerte desaceleraci¨®n de los procesos de adquisiciones y fusiones de empresas a nivel mundial. El ¨²ltimo informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad) anuncia una ca¨ªda del 40% en las inversiones extranjeras en el mundo durante 2001, en contraste con el m¨¢ximo hist¨®rico de 1,3 billones de d¨®lares alcanzado en 2000. En esa misma l¨ªnea, la consultora KPMG Corporate Finance refleja, en su informe correspondiente al primer semestre de este a?o, un descenso del 58% en la inversi¨®n extranjera mundial con respecto a enero-junio del a?o pasado.
En el caso de Espa?a la ca¨ªda es del 59% (13.383 millones de d¨®lares frente a los 32.785 millones de d¨®lares de los mismos meses de 2000), que nos devuelve a los niveles de 1998. El segundo, y probablemente el m¨¢s importante de los factores negativos, es el agotamiento de las privatizaciones y de los grandes proyectos financieros, energ¨¦ticos de infraestructuras y de telecomunicaciones que han sido el origen de la penetraci¨®n de las grandes compa?¨ªas de servicios espa?olas en el subcontinente.
A este proceso puramente econ¨®mico, favorecido por las afinidades idiom¨¢ticas y culturales, responde la entrada en la regi¨®n de los grandes bancos, cuyas inversiones acumuladas rondan los dos billones de pesetas. O las operaciones de Telef¨®nica que con m¨¢s de cinco billones de pesetas es la empresa espa?ola con mayor capital invertido en Am¨¦rica Latina y lidera su sector en los mercados de Per¨², Argentina, Brasil y Chile. Y tambi¨¦n las grandes operaciones energ¨¦ticas de Endesa en Chile, Argentina, Brasil, Per¨² y Colombia; de Iberdrola, que participa activamente en la gesti¨®n de 23 empresas en Latinoam¨¦rica; y de Repsol que culmin¨® su estrategia de expansi¨®n internacional con la compra de la sociedad argentina Yacimientos y Petrol¨ªferos Fiscales (YPF). Ahora todos esos grandes proyectos ya se han realizado y los procesos de privatizaci¨®n todav¨ªa pendientes en pa¨ªses como Paraguay, Ecuador o Venezuela, son menos relevantes desde el punto de vista de mercado potencial, exigen menos desembolsos y a¨²n no est¨¢n maduros.
Finalmente, un tercer elemento disuasivo respecto a Am¨¦rica Latina se deriva de las nuevas orientaciones de los programas y planes de apoyo a la internacionalizaci¨®n empresarial que ha realizado el Gobierno en los ¨²ltimos dos a?os. Los planes Ampliaci¨®n y Asia-Pac¨ªfico est¨¢n impulsando una diversificaci¨®n de los destinos de la inversi¨®n espa?ola hacia Europa del Este y, especialmente, hacia China, pa¨ªs que junto a un enorme potencial de mercado (1,2 millones de habitantes) y a unos crecimientos econ¨®micos superiores al 7% en los ¨²ltimos a?os, est¨¢ acometiendo ahora un gigantesco (por el tama?o y el volumen de las inversiones necesarias) proceso de modernizaci¨®n industrial y de infraestructuras similar al descrito en Am¨¦rica Latina en la ¨²ltima d¨¦cada.
Pero en M¨¦xico aumenta
La apertura al exterior que se deriva de la inminente incorporaci¨®n de China a la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) y los preparativos de los Juegos Ol¨ªmpicos de 2008 (que seg¨²n un informe del Hong Kong Trade Development Council van a generar inversiones por 34.000 millones de d¨®lares s¨®lo en la ciudad de Pek¨ªn) abren tambi¨¦n en este pa¨ªs enormes posibilidades de negocio para las empresas espa?olas.
A pesar del citado agotamiento de los grandes proyectos, Am¨¦rica Latina sigue siendo un interesante foco de atracci¨®n para la expansi¨®n exterior de las empresas espa?olas, en el medio plazo. Tambi¨¦n aqu¨ª los informes de la Secretar¨ªa de Estado de Comercio y de la consultora KPMG coinciden en que aparecen buenas perspectivas para las peque?as y medianas empresas y las transacciones y adquisiciones de volumen intermedio (por importe inferior a los mil millones de pesetas), lo que se traducir¨¢ en un mayor n¨²mero de operaciones pero con resultados menos espectaculares en tama?o e inversi¨®n. Algunas empresas espa?olas de segmento medio ya han iniciado, generalmente con ¨¦xito, su aventura americana en los sectores industrial (Abengoa, Acerinox, Aguas de Barcelona, Gamesa, Roca, Ficosa o Mondrag¨®n), comercial (Aldeasa, Zara, Cortefiel o Adolfo Dom¨ªnguez), de ingenier¨ªa y consultor¨ªa (Typsa, Inocsa) y sobre todo en el turismo, donde la presencia de grupos espa?oles como Sol Meli¨¢ y Rius, entre otros, es notoria, especialmente en la regi¨®n de Centroam¨¦rica y el Caribe.
En un contexto general de ca¨ªda de las operaciones en los grandes pa¨ªses del subcontinente, la inversi¨®n espa?ola en M¨¦xico subi¨® un 43% en 2000, hasta 321.424 millones de pesetas, y en el primer trimestre de 2001 el crecimiento respecto a enero-marzo del a?o pasado es espectacular, un 667% y con una amplia diversificaci¨®n de tama?os y sectores.
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