Libertad con cargos para los 21 detenidos por los altercados de Sants

Todos a la calle. La magistrada Pilar Calvo, titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 17 de Barcelona y que ayer se encontraba en funciones de guardia, decret¨® la libertad con cargos para los 21 j¨®venes antifascistas detenidos el viernes en el barrio de Sants al acabar una manifestaci¨®n de protesta contra los grupos ultraderechistas concentrados en Montju?c con motivo del D¨ªa de la Hispanidad. Un grupo de unos 200 manifestantes intent¨® acceder a la monta?a, pero la polic¨ªa se lo impid¨® y los j¨®venes destrozaron entonces varias oficinas bancarias, agencias de seguros, contenedores y mobiliario urbano.

Pese a la orden de libertad, los 21 j¨®venes est¨¢n acusados, de manera gen¨¦rica, de atentado a la autoridad, da?os o lesiones. Fuentes judiciales explicaron ayer que la fiscal¨ªa no solicit¨® ninguna medida cautelar contra los detenidos y que la juez de guardia que no les impuso ninguna fianza ni deber¨¢n presentarse en el juzgado de forma peri¨®dica.

Un centenar de amigos y familiares de los detenidos estuvieron concentrados toda la ma?ana de ayer frente al juzgado esperando su salida, que se produjo de manera gradual. Entre los detenidos figura un disminuido ps¨ªquico de 21 a?os, quien al salir del juzgado presentaba el ojo izquierdo amoratado y explic¨® que le hab¨ªa golpeado la polic¨ªa. Pr¨¢cticamente todos los detenidos, la mayor¨ªa de los cuales tienen entre 18 o 19 a?os, reconocieron ante la juez que estuvieron en la manifestaci¨®n de la Plataforma Antifascista, pero negaron su participaci¨®n en los destrozos. Anastasio C. B., otro de los detenidos, de 28 a?os, es concejal independiente en la localidad leridana de Tor¨¤.

'El ¨²nico carnet que tiene mi hijo es el del Club Super 3 porque, a sus 18 a?os, todav¨ªa no lo ha tirado'. Es el argumento, ir¨®nico, de uno de los padres que ayer se concentraron frente al juzgado de guardia a la espera de que la juez resolviera. '?Claro que es antifascista! Si no lo es ahora que es joven, ?cu¨¢ndo va a serlo? Pero violento no es', sigue razonando el padre mientras extiende la supuesta conducta pacifista a los dos amigos que iban con su hijo al ser detenidos.

'Lo que no entiendo es por qu¨¦ no detuvieron a los que vi en la televisi¨®n destroz¨¢ndolo todo. Ni mi hijo ni sus amigos dan el perfil de alborotadores y me parece que las detenciones fueron un poco arbitrarias'. El padre, de posici¨®n econ¨®mica acomodada, sigue explic¨¢ndose cuando poco despu¨¦s de las 12.30 horas los primeros siete detenidos salen en libertad del juzgado de guardia. Aplausos, alg¨²n pu?o en alto, un gesto obsceno para la polic¨ªa y ning¨²n grito. Besos y abrazos con los amigos y familares, alguna l¨¢grima de las madres y a explicar lo ocurrido en estas casi 48 horas que ha durado su primera detenci¨®n.

El trato de la polic¨ªa

'Ya nos ¨ªbamos a comer a casa de un amigo cuando vinieron unos secretas que nos pusieron contra la pared y nos esposaron. Nos preguntaron qu¨¦ llev¨¢bamos encima, les dijimos que nada, pero no nos hicieron caso. Nos cachearon y a uno le tiraron la zapatilla deportiva a un contenedor y le dijeron: 'Ahora diremos que te escapaste corriendo', explica uno de los j¨®venes, ataviado con una camiseta de un grupo de rock vasco.

En ese mismo grupo de siete j¨®venes liberados tambi¨¦n estaba Israel M. P., de 21 a?os. Es disminuido ps¨ªquico y no le esperaban guapas amigas ni apuestos amigos. S¨®lo sus padres, de estatura muy baja. El joven se ech¨® a llorar nada m¨¢s ver a su madre, de la que no hab¨ªa quien le deshiciera. 'Me han pegado, pero me ha visto una m¨¦dica', dijo. 'Ve a un hospital y que te vea otro forense que no sea del juzgado', le aconsej¨® una mujer que estaba all¨ª. 'Nos vamos a comer primero', terci¨® el padre. 'No. Primero vamos al Cl¨ªnico y despu¨¦s a comer', sentenci¨® el joven. Y se fueron los tres.

Amigos de los detenidos repitieron ayer su habitual discurso en contra de la actuaci¨®n de la polic¨ªa y de la versi¨®n oficial de los hechos. 'Hay dos personas que est¨¢n en el hospital, heridas por los impactos de pelotas de goma disparadas por los antidisturbios. Una tiene fractura de mand¨ªbula y la otra de c¨®rnea, pero ¨¦sos no salen en los diarios', explica uno de los concentrados.

Media hora despu¨¦s sale el segundo grupo. Son cinco j¨®venes m¨¢s, a los que acompa?an otros detenidos de origen marroqu¨ª que no entienden el porqu¨¦ del jolgorio que se organiza. A ellos no les espera nadie. El gui¨®n se vuelve a repetir. Besos, abrazos y alguna l¨¢grima. Uno explica los detalles de la declaraci¨®n, otro asegura que la polic¨ªa les insult¨® y se mof¨® de su nombre (Mar?al). Y as¨ª, hasta las 15.30 horas, cuando salen los ¨²ltimos detenidos. En total, 21, dos de ellos chicas, a los que se suman los siete menores que quedaron bajo la tutela de sus padres por decisi¨®n de la fiscal¨ªa.

Por la tarde, unas 500 personas se manifestaron por el centro de Barcelona para pedir que se levanten los cargos contra los detenidos, cuatro de los cuales participaron en la marcha. 'T¨² no vas esta tarde a la manifestaci¨®n, aunque te tenga que atar', le dec¨ªa poco antes de la marcha uno de los padres a su hijo, una vez recuperada la libertad.