Europa, cuerpos y pasiones
Vivo debate entre Miquel Roca, Herrero de Mi?¨®n y Sol¨¦ Tura sobre la necesidad de una constituci¨®n para la UE
?Necesita Europa una Constituci¨®n? ?Qu¨¦ le hace falta a la Uni¨®n Europea para seducir a los europeos? A estas preguntas, los padres de la Carta Magna espa?ola tienen distintas respuestas. Para el veterano pol¨ªtico nacionalista Miquel Roca hace falta contagiar pasi¨®n pol¨ªtica y po¨¦tica, volver a los grandes temas; el ex diputado popular Miguel Herrero y Rodr¨ªguez de Mi?¨®n, por su parte, opina que a Europa le falta cuerpo pol¨ªtico; mientras que el senador de la Entesa Jordi Sol¨¦ Tura sugiere continuar el camino comenzado, pero sin posibilidad de marcha atr¨¢s. El pasado lunes por la noche los argumentos de unos y otros chocaron en la Fundaci¨®n CIDOB de Barcelona, moderados por el presidente del Consell Catal¨¤ del Moviment Europeu, Josep Verde Aldea.
Roca: 'Hay que volver a la pol¨ªtica, a la formulaci¨®n po¨¦tica de la Europa de los valores'
Herrero se revel¨® moderadamente euroesc¨¦ptico, por lo menos en lo que a Constituci¨®n se refiere. A su juicio, a una carta magna le corresponde un cuerpo pol¨ªtico. Y ese cuerpo, hoy por hoy, Europa no lo tiene, a menos que se quiera comenzar la casa por la ventana y se elabore una ley de leyes europea a la espera de que genere por s¨ª misma conciencia de pertenencia, seg¨²n Herrero de Mi?¨®n. Eso ser¨ªa, en opini¨®n del ex diputado del PP y eterno heterodoxo de la derecha espa?ola, confiar en el modelo sovi¨¦tico. 'La URSS se dio una constituci¨®n y nunca existi¨® conciencia de ciudadan¨ªa sovi¨¦tica, al igual que en Yugoslavia, donde todo salt¨® por los aires por falta precisamente de ese cuerpo pol¨ªtico', subray¨®. Herrero, convertido en soviet¨®logo por una tarde, ech¨® mano de la tesis de soberan¨ªa limitada del socialismo real para compararla con actitudes como la de Jacques Delors, ex presidente de la Comisi¨®n Europea, que advirti¨® a Gran Breta?a que no tomara una direcci¨®n contraria a sus socios europeos.
Los tonos grises, m¨¢s bien negros, de Herrero dejaron paso a la explosi¨®n de vitalidad de Miquel Roca, miembro del Consejo de Notables para el debate sobre la Uni¨®n Europea. 'En un ejercicio de prosovietismo debo decir que soy partidario de un proceso constituyente europeo', inici¨® su intervenci¨®n Roca. 'Europa chirr¨ªa y necesita una respuesta antes de la ampliaci¨®n de la UE; hay que volver a la pol¨ªtica, a la formulaci¨®n po¨¦tica de la Europa de los valores; son las ideas las que generan entusiasmo', agreg¨®. 'La nivelaci¨®n en la aplicaci¨®n de IVA no interesa ni genera pasiones desordenadas', a juicio de Roca. Europa naci¨® de una idea: 'Estoy seguro de que cuando se cre¨® la CECA , ni a Schuman ni a quienes le acompa?aban les interesaba demasiado ni el carb¨®n ni el acero', dijo el ex dirigente de Converg¨¨ncia . 'Debe volver el debate y volver la alegr¨ªa de la pol¨ªtica, frente a la tristeza de la burocracia', subray¨®, y para ello es preciso democratizar las instituciones y aprender a federarse.
Roca concluy¨® su mensaje entusiasta con un 'Europa no puede generar indiferencia, sino despertar pasiones', porque en 'el mundo no hay tantos espacios de libertad y solidaridad como el del Viejo Continente'. Jordi Sol¨¦ Tura sigui¨® la estela de Roca con m¨¢s prudencia y se declar¨® ir¨®nicamente sorprendido por Herrero de Mi?¨®n 'y la importancia que ha atribuido al leninismo en la constituci¨®n europea'.
El senador del PSC asegur¨® que un primer paso hacia esa ley de leyes puede ser la redacci¨®n de la Carta Europea de Derechos Fundamentales, de la cual fue ponente y que supone un m¨ªnimo com¨²n denominador de las distintas legislaciones de pa¨ªses de la Uni¨®n Europea. 'La Constituci¨®n europea debe existir y se debe hacer por arriba, sobre todo en un continente tan martirizado por guerras como el nuestro', concluy¨®.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.