Europa, en la guerra
La posici¨®n europea en la crisis desatada el 11 de septiembre puede verse mejor como una botella medio vac¨ªa que medio llena. Pese a sus limitaciones intr¨ªnsecas en medios, instituciones y liderazgo pol¨ªtico, la Uni¨®n Europea no est¨¢ saliendo malparada de esta crisis. Es cierto que, pasadas las muestras de solidaridad, la UE no tiene visibilidad en EE UU. La ¨²nica cara europea que se ve es la de Blair, su permanente y fiel aliado, ya sea en Afganist¨¢n o en Irak. Pero el hecho de que Alemania haya decidido enviar cerca de 4.000 hombres a Afganist¨¢n, aunque no sea para combatir, es un paso hist¨®rico. Tambi¨¦n Italia enviar¨¢ 2.700 soldados, y Francia anuncia una mayor 'densidad' en su aportaci¨®n militar. Queda por concretar la participaci¨®n espa?ola.
Estas aportaciones europeas se hacen a pesar de que en Europa crezcan las dudas sobre si la estrategia militar seguida por EE UU es la adecuada. Adem¨¢s, cuando hablan las armas, la UE parece peque?a. Es una sensaci¨®n alimentada por las desastrosas pol¨ªticas nacionales de defensa. La crisis del 11 de septiembre le ha pillado a la UE en pleno proceso de formaci¨®n de su Pol¨ªtica Exterior, de Seguridad y de Defensa Com¨²n, y cuando varios pa¨ªses est¨¢n cambiando de un r¨¦gimen de servicio militar obligatorio a otro profesional. Que 4.000 hombres sea casi el l¨ªmite que puede enviar Alemania es poco en comparaci¨®n con su presupuesto militar. Lo mismo cabr¨ªa decir para Espa?a o Italia. Europa no s¨®lo gasta poco en defensa, sino que, sobre todo, gasta mal.
En esta UE pillada un poco a contrapi¨¦ ha surgido de forma casi natural una vanguardia, o directorio, en torno al tri¨¢ngulo Londres-Berl¨ªn-Par¨ªs. El primer encuentro de los tres grandes, el 19 de octubre, provoc¨® serias susceptibilidades en los dem¨¢s. Hasta el punto de que el pasado domingo Blair se sinti¨® obligado a invitar a su mesa de Downing Street a Berlusconi, al primer ministro belga en su condici¨®n de presidente semestral de la UE, a un Aznar que le va a suceder en enero, al autoinvitado holand¨¦s Win Kok y a M¨ªster Pesc, Javier Solana. ?Es ¨¦sta la Europa de los que cuentan? Susceptibilidades aparte, es mejor que ¨¦stos tiren de los dem¨¢s a intentar un ejercicio a quince que todav¨ªa resulta imposible por falta de rodaje. El riesgo es que el impulso se quede en estos pocos, aunque sean los m¨¢s grandes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Opini¨®n
- PESC
- Afganist¨¢n
- Cooperaci¨®n antiterrorista
- Italia
- PESD
- Estados Unidos
- Reino Unido
- 11-S
- Francia
- Cooperaci¨®n policial
- Atentados terroristas
- Europa occidental
- Uni¨®n Europea
- Acci¨®n militar
- Europa
- Organizaciones internacionales
- Asia
- Conflictos
- Terrorismo
- Defensa
- Pol¨ªtica exterior
- Relaciones exteriores
- Oriente pr¨®ximo