70 corresponsales analizan su labor como 'ojos de la guerra'

El espa?ol Manuel Leguineche los llam¨® 'la tribu' y el franc¨¦s Paul Marchand los bautiz¨® como 'los hermanos'. Son los corresponsales de guerra, esos periodistas que necesitan acercarse mucho al horror, como dec¨ªa Robert Capa, para dejar testimonio de los conflictos. Con el t¨ªtulo de Los ojos de la guerra (Plaza y Jan¨¦s), 70 corresponsales de guerra han escrito un libro colectivo que recuerda a Miguel Gil, periodista espa?ol muerto en Sierra Leona en mayo de 2000, y que analiza la labor de estos profesionales.

Como el pasado lunes la muerte de Julio Fuentes en Afganist¨¢n, el asesinato de Miguel Gil, c¨¢mara y productor de APTV, conmocion¨® a la profesi¨®n period¨ªstica.

Cuando el duelo cedi¨® el paso a la p¨¦rdida, un grupo de compa?eros decidi¨® escribir un libro colectivo, presentado ayer en Madrid, como homenaje a Miguel Gil y como reflexi¨®n de los periodistas que trabajan bajo el fuego. Bajo la coordinaci¨®n de Manuel Leguineche, un veterano de muchas batallas; y del fot¨®grafo y periodista Gervasio S¨¢nchez, Los ojos de la guerra repasa la trayectoria de Miguel Gil y de Kurt Schork, un corresponsal de Reuters asesinado tambi¨¦n en Sierra Leona.

Pero este ensayo coral analiza asimismo las principales guerras que cubrieron los citados periodistas, desde Bosnia a Chechenia pasando por ?frica; recuerda a los informadores espa?oles muertos en zonas calientes (Juantxu Rodr¨ªguez, Jordi Pujol Puente y Luis Valtue?a), evoca conflictos ya olvidados como Vietnam o Am¨¦rica Latina y reflexiona sobre la guerra y el periodismo.

'El libro apuesta', comenta Gervasio S¨¢nchez, 'por un periodismo de verdad, cr¨ªtico y autocr¨ªtico, que denuncie las injusticias y las miserias y que no se pliegue a los intereses de los poderosos. Nosotros ejercemos como periodistas y no como pol¨ªticos'. Los 70 corresponsales han aportado sus trabajos de forma desinteresada y los derechos de autor se dedicar¨¢n a la creaci¨®n de un premio period¨ªstico que llevar¨¢ el nombre de Miguel Gil.