Jap¨®n entra en recesi¨®n t¨¦cnica tras caer su econom¨ªa otro 0,5%

Jap¨®n obtuvo ayer la prueba oficial de un temor que lleva meses fragu¨¢ndose: la recesi¨®n econ¨®mica. La segunda potencia del mundo registr¨® un crecimiento negativo de medio punto en el trimestre comprendido entre julio y septiembre. Ha sido el segundo periodo consecutivo de n¨²meros rojos, lo que t¨¦cnicamente se conoce como recesi¨®n. Algunos miembros del Gobierno japon¨¦s piensan que lo peor est¨¢ por venir. El presidente, Junichiro Koizumi, anunci¨® ayer medidas de austeridad para paliar la situaci¨®n.

El producto interior bruto (PIB) japon¨¦s, el mejor indicador de la producci¨®n de bienes y servicios de un pa¨ªs, ya hab¨ªa experimentado un fuerte retroceso en el segundo trimestre del a?o: un 1,2%. Aunque la ca¨ªda del tercer trimestre coincide con lo previsto, el anuncio de un segundo dato negativo ha hecho saltar todas las alarmas sobre si la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno servir¨¢ para remontar la crisis. En comparaci¨®n con el mismo trimestre de 2000, la ca¨ªda del PIB asciende al 2,2%.

'La dif¨ªcil situaci¨®n continuar¨¢ durante un tiempo, pero si no adoptamos reformas estructurales ser¨¢ a¨²n peor. Estamos tomando medidas. Las reformas estructurales son la mejor pol¨ªtica', se?al¨® el primer ministro, Junichiro Koizumi. Otros miembros del Ejecutivo se mostraban m¨¢s pesimistas: 'Si la actual situaci¨®n contin¨²a, el crecimiento negativo es inevitable', dec¨ªa el ministro de Comercio, Takeo Hiranuma, aludiendo a una contracci¨®n en la evoluci¨®n anual del PIB en marzo, cuando concluya el actual a?o fiscal.

El propio Ejecutivo admiti¨® el mes pasado que esperaba una contracci¨®n del 0,9% en la econom¨ªa para el presente ejercicio fiscal. Esta previsi¨®n difiere notablemente del pron¨®stico anterior: un crecimiento positivo del 1,7%. De momento, las perspectivas no apuntan a una mejor¨ªa. El ministro de Econom¨ªa, Heizo Takenaka, advirti¨® ayer: 'Hay muchas posibilidades de que los datos de octubre a diciembre sean tambi¨¦n desfavorables'.

Tambi¨¦n la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE), que aglutina a los pa¨ªses industrializados, ha ofrecido hace poco una visi¨®n negativa sobre el futuro de Jap¨®n. La OCDE espera una contracci¨®n del 0,75% en el PIB este a?o y del 1% el pr¨®ximo.

El mercado japon¨¦s acogi¨® con un leve pesimismo la recesi¨®n del pa¨ªs. El ¨ªndice Nikkei, el m¨¢s representativo de la Bolsa de Tokio, descendi¨® un 0,58%. M¨¢s muestras de debilidad ofreci¨® el yen, que lleg¨® a cambiarse a 124,9 frente al d¨®lar, su nivel m¨¢s bajo desde el 1 de agosto. Esta ca¨ªda reflejaba tambi¨¦n el miedo de los inversores a quiebras de empresas.

Precedentes lejanos

Con dos trimestres seguidos de crecimiento negativo, Jap¨®n se coloca en una posici¨®n similar a la que ten¨ªa en la primera mitad de 1998, en plena resaca del colapso econ¨®mico de las principales instituciones financieras. Para encontrar tres trimestres de crecimiento negativo habr¨ªa que remontarse a 1993. En aquel momento, la situaci¨®n ni siquiera parec¨ªa tan dram¨¢tica, ya que las ca¨ªdas del PIB eran casi inexistentes (inferiores al 0,01%).

La mala situaci¨®n econ¨®mica tambi¨¦n se refleja en el empleo. En una sociedad que durante a?os ha tenido un paro casi testimonial, la tasa de desempleo ha alcanzado un r¨¦cord del 5,4%. Y la deuda p¨²blica, que supone un 130% del PIB, es la m¨¢s abultada de todos los pa¨ªses desarrollados. El Gobierno nip¨®n ya ha aprobado un presupuesto suplementario de 24.090 millones de d¨®lares (4,5 billones de pesetas, 27.074 millones de euros). Ahora est¨¢ preparando otra partida de importe parecido para intentar reanimar la econom¨ªa.