Bush ratifica la retirada estadounidense del tratado antimisiles
La decisi¨®n permitir¨¢ al Pent¨¢gono desarrollar sin trabas su propio escudo de defensa
El presidente George W. Bush se dispone a anunciar -quiz¨¢ hoy mismo- la retirada de Estados Unidos del Tratado de Antimisiles Bal¨ªsticos (ABM), que Richard Nixon firm¨® con Breznev en mayo de 1972. La decisi¨®n permitir¨¢ al Pent¨¢gono desarrollar sin trabas el escudo antimisiles con el que Bush quiere garantizar la defensa de su pa¨ªs 'frente a los nuevos enemigos'. Seg¨²n Rusia, la ruptura s¨®lo provocar¨¢ una nueva carrera armament¨ªstica.
En la campa?a electoral, Bush nunca escondi¨® su deseo de desarrollar sin tapujos un 'paraguas nuclear' con misiles te¨®ricamente capaces de blindar al pa¨ªs frente a ataques transatl¨¢nticos. En los a?os anteriores a la presidencia actual, Bill Clinton dej¨® que el desarrollo t¨¦cnico avanzara t¨ªmidamente, pero maniobr¨® lo suficiente como para dejar la cuesti¨®n en manos de su sucesor.
EE UU considera que la nueva situaci¨®n de inseguridad que han provocado los atentados del 11-S permite justificar m¨¢s que nunca la necesidad de crear nuevos sistemas de defensa contra ataques exteriores. Rusia siempre ha pensado que el proyecto estadounidense desequilibra la estabilidad nuclear y conduce a un rearme inevitable.
En la cumbre de Tejas, Bush y el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, reafirmaron sus desacuerdos, pero lo aceptaron sin agresividad. Rusia se ve obligada a conformarse con la promesa estadounidense de mantener una l¨ªnea constante de informaci¨®n entre Washington y Mosc¨².
Bush telefone¨® el viernes pasado a Putin para confirmarle su intenci¨®n de retirarse del tratado ABM en los pr¨®ximos d¨ªas. Legalmente, el tratado permite la retirada de cualquiera de sus miembros, aunque establece un periodo de aviso de seis meses.
Estados Unidos formalizar¨¢ la ruptura del pacto en enero: la 'liberaci¨®n' del tratado ser¨¢ efectiva a partir de julio de 2002. En ese periodo, EE UU y Rusia pueden tratar de pactar un compromiso escrito que describa su nueva relaci¨®n armament¨ªstica.
Seg¨²n Bush, el tratado ABM est¨¢ redactado con gram¨¢tica de la guerra fr¨ªa. El presidente de EE UU mantiene que los ataques del 11 de septiembre 'hacen a¨²n m¨¢s evidente que necesitamos construir defensas efectivas contra ataques de misiles. Tenemos que proteger EE UU y a sus amigos ante todo tipo de terror, incluido el que puede llegar con misiles', asegur¨®.
El secretario de Estado, Colin Powell, hab¨ªa tratado de ganarse la comprensi¨®n de Rusia en conversaciones con los m¨¢ximos dirigentes en Mosc¨². La ruptura del tratado ABM es un fracaso personal para Powell frente al secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, abiertamente partidario de romper el pacto. La asesora personal de Bush para cuestiones de seguridad, Condoleezza Rice, seg¨²n muchos la persona en quien m¨¢s conf¨ªa Bush, trat¨® de mediar en ese conflicto, pero se situ¨® finalmente al lado de Rumsfeld.
El Departamento de Defensa considera que EE UU 'tiene las manos atadas a la espalda' con el tratado, como dec¨ªa el subsecretario Paul Wolfowitz. En cambio, Joseph Biden, senador dem¨®crata que preside el Comit¨¦ de Relaciones Internacionales, asegur¨® que la decisi¨®n es 'un grave error'.
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