Alterne
Madrid es la capital europea del alterne. Se alterna en el aperitivo, entre horas, al anochecer, antes y despu¨¦s de cenar, en la noche profunda y en todas las fases de la aurora. La palabra alterne es sin¨®nimo de chateo, pero tambi¨¦n se relaciona ¨ªntimamente con las rameras (los chulos siempre gozaron aqu¨ª de mucho prestigio). Lo malo no son las lumis, que son unas santas, sino la morralla que pulula a su alrededor. A esas desventuradas las entendi¨® mejor Felipe II que los actuales mun¨ªcipes: en aquel tiempo, las mancebas trajinaban alegremente en la Puerta del Sol, con sus papeles en regla y sus armas de trabajo controladas por la sanidad p¨²blica.
El alterne se est¨¢ volviendo insoportable. Es dif¨ªcil entablar conversaciones en un bar si no est¨¢s al tanto de lo que vomita la televisi¨®n, ese ojo cuadrado que te mira incluso cuando t¨² lo desde?as. Siempre hay alg¨²n desgraciado que te envenena el aperitivo comentando insensateces que vio ayer en la peque?a pantalla, o las heces que defec¨® un programa especializado en excrementos. La televisi¨®n incita a hablar con fluidez e ignorancia a los m¨¢s zotes. Dan ganas de tirar el aparato por la ventana.
Pero esto es lo que hay. Habr¨¢ que hacer algo para que no nos amarguen esta vida. Hay que dar la vuelta a la tortilla con una parodia ejemplar, como hizo Cervantes, que masacr¨® el marujeo de su tiempo, las novelas de caballer¨ªa, haciendo la mejor novela de todos los tiempos. Hasta que eso ocurra, es mejor pasar de la televisi¨®n. Hay opciones much¨ªsimo m¨¢s divertidas. Por ejemplo, los libros (para Groucho, la televisi¨®n da cultura: cuando llegas a casa y est¨¢ encendida la tele, vete a la habitaci¨®n de al lado y m¨¦tete en un libro). Otra opci¨®n es alternar, es decir, tomar ca?as y ser novio de una corriente alterna, que cambia peri¨®dicamente de intensidad y direcci¨®n.
M¨¢s divertido que la tele es, por ejemplo, un crucigrama. Fortuny, que confecciona los crucigramas de La Vanguardia, hace esta definici¨®n: 'Mantiene el instrumento erguido entre las piernas y lo toca por ambos lados'. Soluci¨®n: arpista. Los juegos de palabras son la base de la vida.
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